Aprender a sobrevivir en crisis

No es lo mismo ser el director de una empresa con las arcas rebosantes de dinero y posibles inversores acampados a las puertas, que tener que apa?arse con una compa?¨ªa al borde de la suspensi¨®n de pagos. Tampoco seleccionar personal a golpe de contraofertas, que gestionar empleados sobre los que planea un despido masivo. Vender coches y ladrillos ahora ya no es lo que era. Nada es igual que hace un par de a?os. Y las escuelas y centros de formaci¨®n de negocios tambi¨¦n se han dado cuenta. Por eso, donde antes ense?aban a comerse a la competencia, ahora incluyen t¨¦cnicas de supervivencia. La crisis se ha colado en todos los temarios.

"La cosa es simple: durante los pr¨®ximos a?os los bancos van a dar la financiaci¨®n con cuentagotas. ?Para qu¨¦ ense?ar a un director financiero c¨®mo gestionar el capital con las entidades? En lugar de eso hay que mostrarle otros caminos, como el de la financiaci¨®n alternativa", explica Ignacio de la Torre, director de los m¨¢steres de finanzas en el IE Business School. En su ¨¢rea, dice, ya nada es lo que era, y las lecciones han cambiado al ritmo que marcaban los hundimientos en la banca de inversi¨®n. Antes hab¨ªa temarios sobre c¨®mo incluir deuda en los balances. Eso ya ni se lo plantean las empresas.

En el IE ense?an c¨®mo captar financiaci¨®n alternativa o isl¨¢mica

'Llenar' un a?o de paro o cambiar de sector impulsa los m¨¢steres

Para el nuevo a?o, el IE ha incluido tres nuevas asignaturas en sus programas para directivos de finanzas: la financiaci¨®n alternativa, nociones sobre otras crisis hist¨®ricas como las de los setenta y financiaci¨®n isl¨¢mica. "Hay 800.000 millones en el mundo isl¨¢mico, regidos por normas que marca esta religi¨®n. ?C¨®mo se puede atraer este tipo de ahorro?", plantea De la Torre. Una inversi¨®n de este tipo puede ser la clave, por ejemplo, para empresas de infraestructuras, porque el dinero va a parar a un activo real como una carretera o un puente. Y el Cor¨¢n no tiene nada en contra de los puentes ni las carreteras, porque son activos reales, razona.

En el IESE el martes presentan un programa especial para promoci¨®n de talento en tiempos de crisis y a principios de mes empezaron un ciclo de sesiones sobre gesti¨®n, recursos humanos y estrategias para "tiempos de incertidumbre". C¨¦sar Beltr¨¢n, director de Executive Education, subraya adem¨¢s que los servicios de coaching (consejeros) han aumentado, "para templar las tensiones en esta ¨¢poca de cambios".

"Reunimos a todo el personal y explicamos que los cambios en la econom¨ªa nos obligan a hacer cambios en muchas asignaturas", coincide Marcel Planellas, secretario general de Esade. Muchos estudiantes acud¨ªan, por ejemplo, a sus m¨¢steres de finanzas con el fin de hacerse un hueco en la banca de inversi¨®n. "Pero esa banca ha desaparecido", explica.

Del mismo modo, en el marketing ahora, con el consumidor velando por cada euro que sale de su bolsillo, lo que vale son estrategias para crear valor a?adido. Y en gesti¨®n de personal, de traer gente de fuera, se ha pasado a la necesidad de desarrollar el potencial del personal que est¨¢ dentro y fomentar la comunicaci¨®n y la unidad interna, explica Alexandre Carrasco, del BES La Salle. Para adaptarse a las nuevas necesidades ellos han optado por poner en marcha unos cursos espec¨ªficos "muy pr¨¢cticos", puntualiza Carrasco. "Se trata de que los asistentes planteen cu¨¢les son los problemas a los que se enfrentan, para ayudarles a pensar una estrategia", explica.

En el Centro de Estudios Financieros (CEF) han optado por una estrategia similar. Los nombres de sus ¨²ltimos seminarios no dejan lugar a la duda. "Crisis financiera e impuestos", "Reestructuraci¨®n de plantilla en tiempos de crisis"... Ahora hay que hablar de cosas que antes ni se les pasaba por la cabeza a los directivos. "Por ejemplo, ?qu¨¦ pasa si se deval¨²a el precio de los inmuebles? Algo impensable antes que ahora interesa mucho a los asesores fiscales o los contables", reflexiona el subdirector del centro, Arturo de las Heras.

Los cambios en la econom¨ªa no s¨®lo han obligado a cambios en el temario. En ocasiones tambi¨¦n en la organizaci¨®n. Por ejemplo, en la escuela ESCP-EAP muchos de los asistentes acud¨ªan becados por sus empresas. Algunas ahora tienen dificultades para mandar a sus directivos, as¨ª que la escuela ha dividido uno de sus m¨¢steres de gesti¨®n m¨¢s amplios, antes concentrados en un a?o, en dos partes. "As¨ª, las empresas no abandonan la formaci¨®n, s¨®lo la espacian m¨¢s, y consiguen un retorno r¨¢pido de su inversi¨®n, con conocimientos actuales", justifica Ram¨®n Arag¨®n, director de relaciones externas del centro.

Los directivos actuales tienen de media entre 35 y 40 a?os. Para muchos, es la primera vez que se enfrentan a una crisis. Nunca antes hab¨ªan tenido que pelear con los bancos por un pr¨¦stamo. Por eso algunos acuden buscando respuestas, aunque tengan que pagar por ellas sumas un poco elevadas. "Las aulas siguen llenas, y hemos notado que el 56% de los alumnos se pagan ellos mismos los programas. Antes la mayor¨ªa ven¨ªan porque pagaba la empresa", repasa Arag¨®n. "Muchos vienen buscando saber c¨®mo hemos llegado a esta situaci¨®n econ¨®mica", a?ade Beltr¨¢n

"Los MBA [m¨¢steres], son antic¨ªclicos. Crece la demanda en tiempos de crisis. Algunos buscan ampliar sus conocimientos porque se enfrentan a enormes retos. Otros reorientarse", coincide Planellas. Algunos de los cursos son muy exigentes y precisan de al menos un a?o a tiempo completo. Si se tienen ahorros, aprovechar el a?o de dificultades para mejorar el curr¨ªculo es una opci¨®n.

Crisis, crisis, crisis. Un mantra que se repite en los t¨ªtulos de muchos de los nuevos cursos, a los que muchos se agarran como a una br¨²jula en el incierto camino de la econom¨ªa actual. Algunos expertos piden prudencia. En ocasiones la soluci¨®n no es ampliar infinitamente la formaci¨®n, si no la experiencia y otras cualidades. "No hay que estar parado, y es cierto que despu¨¦s, cuando se opte a un puesto, es bueno haber aprovechado los espacios mejorando el curr¨ªculo, pero no hay que caer en la sobreformaci¨®n", razona Margarita Torres, directora de selecci¨®n de GD Human Capital. "A veces se puede aprender dentro de las empresas, trabajando. Lo importante es ser capaz de adaptarse, y dentro de una formaci¨®n adecuada, a veces lo mejor es apostar por fomentar la personalidad", a?ade. -