La d¨¦cada de Ch¨¢vez

El 2 de febrero, Hugo Ch¨¢vez cumpli¨® 10 a?os en el poder con una forma de gobernar que se ha sostenido en la dial¨¦ctica irreconciliable del amigo/enemigo. De un lado, su proyecto socialista y bolivariano; del otro, y tal como no ha dejado de decir, la peor canalla neoliberal. El elevado precio del petr¨®leo, que le ha permitido costear sus iniciativas populares, y la nefasta gesti¨®n de su mayor enemigo, George W. Bush, le han facilitado las cosas y su discurso ha calado profundamente, no s¨®lo en su pa¨ªs (donde goza de un apoyo mayoritario), sino tambi¨¦n en algunos pa¨ªses del entorno hasta convertirse en referencia de buena parte de la izquierda latinoamericana.

Su complicidad con Fidel Castro y el apoyo decidido a otros Gobiernos -como los de Bolivia, Ecuador o Nicaragua, entre otros- han reforzado su proyecto de fundar el socialismo del siglo XXI que se inici¨® con la redacci¨®n de una nueva Constituci¨®n para Venezuela, que destaca en materia de derechos humanos. El balance oficial de su gesti¨®n habla de reducci¨®n de la pobreza y de una tasa de alfabetizaci¨®n que alcanza el 96%, a lo que hay que a?adir los distintos programas sociales.

Frente a sus logros, criticados como medidas populistas incapaces de generar trabajo y riqueza, la deriva autoritaria del r¨¦gimen asoma como la parte m¨¢s oscura de estos ¨²ltimos 10 a?os. En el a?o 2002 se enfrent¨® a la huelga de Petr¨®leos de Venezuela despidiendo a m¨¢s de la mitad de los trabajadores; en 2004, reform¨® el Tribunal Supremo para tenerlo bajo control, y, en 2007, no renov¨® la licencia del canal opositor RCTV, por s¨®lo citar algunas medidas que han conducido al adelgazamiento de los poderes -el judicial, los medios- que sirven en una democracia para contrarrestar las tentaciones caudillistas.

El pr¨®ximo domingo se celebra un refer¨¦ndum que podr¨ªa permitirle la reelecci¨®n de manera indefinida. Ha sido una vuelta de tuerca m¨¢s a su af¨¢n de conservar el poder, tras haber perdido en 2007 otra consulta realizada con la misma intenci¨®n. La cita mostrar¨¢ hasta qu¨¦ punto conserva Ch¨¢vez el apoyo popular. Y tambi¨¦n permitir¨¢ saber qu¨¦ consistencia tiene una oposici¨®n que, tras propiciar un intento de golpe de Estado en 2002, est¨¢ atomizada y es incapaz de articular un liderazgo fuerte que frene el autoritarismo del r¨¦gimen chavista.