Messi hace bueno al Bar?a
El conjunto de Guardiola se cuelga del argentino y del acierto de Eto'o para empatar ante un estupendo Betis
Javier Mar¨ªas cuenta que ning¨²n equipo percibe mejor la derrota que el Bar?a. Ya sea casualidad o no, el viernes le preguntaron a Guardiola por el ¨²ltimo libro que ha le¨ªdo y respondi¨® que Saber perder, de David Trueba, el mismo que acaba de regalar a Messi para que ampl¨ªe su biblioteca reservada hasta ahora a una de las muchas biograf¨ªas sobre Maradona. A Messi seguramente todav¨ªa no le ha dado tiempo a echarle un vistazo porque el Bar?a concedi¨® dos goles en su ausencia y atrap¨® el empate cuando reapareci¨® en la cancha, por m¨¢s que el goleador fuera el pichichi, Eto'o. Aunque puede que fuera una coincidencia, los partidos son muy diferentes con Messi o sin ¨¦l. Bien que lo sabe el Betis, que se gan¨® un buen empate.
BETIS 2 - BARCELONA 2
Betis: Ricardo; Ilic, Juanito (Lima, m. 8; Monz¨®n, m. 46), Melli, Fernando Vega; Mehmet Aurelio, Juande; Sergio Garc¨ªa, Eman¨¢, Mark Gonz¨¢lez (Juanma, m. 58); y Oliveira. No utilizados: Casto; Monz¨®n, Pavone, Rivera e Isidoro.
Barcelona: Vald¨¦s; Alves, C¨¢ceres, Piqu¨¦, Abidal; Xavi, Busquets (Bojan, m. 80), Keita (Henry, m. 57); Hleb (Messi, m. 57), Eto'o e Iniesta. No utilizados: Pinto; M¨¢rquez, Gudjohnsen y Tour¨¦.
Goles: 1-o. M. 17. Melli. 2-0. M. 24. Mark Gonz¨¢lez. 2-1. M. 45. Eto'o, tras el rechace por Ricardo de un penalti lanzado por ¨¦l mismo. M. 83. Eto'o.
?rbitro: Iturralde. Amonest¨® a Piqu¨¦, Eman¨¢, Busquets, Juanma y Oliveira.
55.000 espectadores en el Ruiz de Lopera.
Juegan tan sobrados los azulgrana que se reservan a La Pulga para las emergencias
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El duelo fue estupendo y, consecuentemente, el resultado escocer¨¢ a los dos equipos. Al Bar?a le afect¨®, como de costumbre, el virus FIFA y cedi¨® su tercera igualada despu¨¦s de una jornada de selecciones, de la misma manera que el Betis recuper¨® ante los azulgrana el duende que le ha permitido ganarse el coraz¨®n de muchos aficionados. Los barcelonistas perdieron demasiado tiempo en ejercer de sheriff del campeonato. Necesitaron de todos sus pistoleros para revertir la situaci¨®n y aceptar finalmente la cesi¨®n de dos puntos tras nueve victorias consecutivas en campo ajeno. Les falt¨® el tercer gol de rigor.
Se arriesg¨® el Betis, quiz¨¢ porque el f¨²tbol hab¨ªa puesto precio a la cabeza del l¨ªder y sus rivales compiten como cazarrecompensas, mientras el Bar?a economiz¨® esfuerzos desde la formaci¨®n, sobre todo por cuanto respecta a Messi, convertido en el comod¨ªn de los partidos de entretiempo. Juegan con tanta suficiencia los azulgrana que se reservan a La Pulga para las situaciones extremas. A la ausencia de Messi se sum¨® la de Henry, circunstancia que aument¨® la sensaci¨®n de precariedad de los barcelonistas en las dos ¨¢reas porque a la debilidad ofensiva sumaron cierta ingenuidad en la zaga por la alineaci¨®n de Piqu¨¦ y C¨¢ceres. Las concesiones parecieron excesivas incluso en el Bar?a, de modo que el Betis entendi¨® que dispon¨ªa de una oportunidad ¨²nica para tumbar al equipo m¨¢s seductor del mundo el d¨ªa de los enamorados, la festividad de san Valent¨ªn.
Liberados defensivamente, incluso despu¨¦s de la lesi¨®n de Juanito, y animados en el ataque, los verdiblancos arramblaron tan fieramente a los azulgrana que en menos de media hora se pusieron con dos goles de ventaja, una diferencia jam¨¢s vista en un partido del Bar?a, muy vulnerable a la hora de combatir las jugadas de estrategia. Melli bati¨® a Vald¨¦s a la salida de un c¨®rner mal defendido por Busquets y Mark Gonz¨¢lez cruz¨® a la red una pelota que no achic¨® Piqu¨¦. La determinaci¨®n de los muchachos de Chaparro descoloc¨® al Bar?a, perdido en tierra de nadie, falto de jerarqu¨ªa y de pegada, vencido en el juego a¨¦reo. Las ocasiones eran para el Betis, los goles los marcaba el Betis, los balones divididos se los llevaba el Betis y si el Bar?a entr¨® en el partido fue por un penalti cometido por el Betis.
Juande reban¨® a Iniesta y el colegiado pit¨® la pena m¨¢xima ante el griter¨ªo de la hinchada, especialmente brava por la chispa de su equipo, enfurecida con el ¨¢rbitro, eternamente ensordecedora. Aunque Eto'o marr¨® el tiro, rechazado por Ricardo, el ariete recogi¨® la pelota y anot¨® su gol 100 en la Liga, el 2-1 antes del descanso, resultado estupendo para el Bar?a tal y como hab¨ªa ido el partido.
No se acobard¨® el Betis mientras el Bar?a se crec¨ªa alrededor de Iniesta. El partido adquiri¨® un tono excelente por el di¨¢logo de ambos equipos. Las transiciones locales eran tan vertiginosas como la perseverancia forastera en su juego de ataque. A Olivera se le anul¨® un gol y Eman¨¢ remat¨® al cuerpo de Vald¨¦s en un mano a mano estremecedor antes de que Messi y Henry sustituyeran a los insustanciales Hleb y Keita.
Recuperaba el Bar?a su mejor versi¨®n al tiempo que el Betis se encog¨ªa tras haber ofrecido un ejercicio plet¨®rico por la continuidad en su juego. Los cambios, por lo dem¨¢s, jugaron en contra de los verdiblancos, a los que el encuentro se les hizo cada vez m¨¢s largo. Los azulgrana asediaron a Ricardo y los disparos se sucedieron ante la impotencia de Ilic y el acierto del portero, tan puesto como Vald¨¦s, que sac¨® un remate de gol a Oliveira en la ¨²nica ocasi¨®n en que el Betis cruz¨® la divisoria desde la reaparici¨®n de Messi.
Messi hizo bueno al Bar?a y malo al Betis. Alrededor del argentino, el Bar?a encontr¨® los espacios suficientes para apuntar reiteradamente a Ricardo, convertido en h¨¦roe. Aunque el recital del portero fue extraordinario, sobre todo frente a Henry, el ataque azulgrana anunciaba el empate porque los verdiblancos hab¨ªan reventado. A nadie le sorprendi¨® el 2-2 anotado por Eto'o en una maniobra excelente y si no se cont¨® el tercero fue por Ricardo. No merec¨ªa caer el Betis ni tampoco perder el Bar?a en una emotiva noche de f¨²tbol.
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