Preguntas
Qu¨¦ nos gusta a los periodistas hablar o escribir, sobre las cajas de ahorro. Reconozc¨¢moslo, es un tema que, a la vista est¨¢, tiene su morbo, vamos, que da para mucho: para visualizar las contradicciones de unos, las ambiciones de otros, las dudas de muchos y por qu¨¦ no, las ansias, igualmente, de aquellos otros que ven, en este ¨¢mbito, el territorio id¨®neo para proyectar su futuro. Incluso, el asunto facilita articular discursos de todo tipo, desde el m¨¢s extremadamente localista y obstruccionista, pasando por el estrictamente economicista o, como ocurre ahora, por aquel que apela, nada m¨¢s y nada menos, que al sentimiento de autoestima de los andaluces. Se trata este ¨²ltimo aspecto especialmente resaltable ahora que nos situamos a las puertas de la celebraci¨®n del 28-F. Una exhibici¨®n sobre el potencial de nuestro sistema financiero, que se pone de manifiesto con la operaci¨®n de fusi¨®n, por absorci¨®n, de Caja Castilla La Mancha (CCM) por parte de Unicaja, viene bien en estos d¨ªas para levantar el ¨¢nimo de los andaluces, bastante alica¨ªdo ¨²ltimamente por las graves consecuencias de la crisis econ¨®mica.
En todo caso, conviene estar muy atentos a la evoluci¨®n de los acontecimientos para no vernos sorprendidos por los mismos. Aquellos viejos planes que se hicieron inicialmente han quedado obsoletos si se tiene en cuenta lo sucedido. Las primeras reticencias, cuando no, la abierta oposici¨®n a tal iniciativa por parte del PP, se ha comprobado c¨®mo han quedado desbordadas por la rapidez con la que se est¨¢n tomando las decisiones. Si nadie lo remedia, puede que los populares jueguen un papel marginal lo que pondr¨ªa en cuesti¨®n, una vez m¨¢s, su funci¨®n como partido ¨²til a la sociedad con verdadera capacidad para alcanzar grandes acuerdos necesarios para todos.
Pero tampoco hay que dramatizar. Una cosa es el discurso un tanto alarmista haciendo hincapi¨¦ en los riesgos que tiene un proceso de esta envergadura y otra, lo que realmente puedan hacer bajo la mesa, pactando los apoyos adecuados qui¨¦n sabe a cambio de qu¨¦. A nadie se le escapa que en esto de las Cajas, pr¨¢cticamente, se ha visto de todo. As¨ª las cosas, ser¨¢ cuesti¨®n de estar atentos a qu¨¦ dicen, esta semana, en la sesi¨®n del control al Gobierno en el Parlamento andaluz. Figura una pregunta sobre este asunto del Grupo Popular al vicepresidente Gri?¨¢n. Una buena ocasi¨®n, por tanto, para comprobar la altura de miras de unos y otros y, sobre todo, el sentido de la responsabilidad. Y, por favor, que vayan a otros con ese cuento a favor de la despolitizaci¨®n de las Cajas, ahora que los bancos est¨¢n cayendo como moscas en manos estatales y, conoci¨¦ndose como se conocen, las perrer¨ªas cometidas en Caja Madrid o Cajasur, por ejemplo.
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