M¨¢s de seis millones para la campa?a

El gasto de los partidos en las campa?as electorales est¨¢ limitado por ley, y a esa barrera legal aseguran todos atenerse. En la reci¨¦n terminada, la cifra m¨¢xima que las formaciones pol¨ªticas pueden gastar es 1.478.187 euros, a los que hay que a?adir 371.000 m¨¢s para el env¨ªo a domicilio de papeletas y folletos o cartas de petici¨®n del voto, si se acredita adecuadamente ante el Tribunal Vasco de Cuentas P¨²blicas que esa cantidad se ha empleado espec¨ªficamente en ese cometido. En total, 1.849.000 euros por formaci¨®n.La contabilidad electoral no se cierra hasta la toma de posesi¨®n de los electos. Si todos agotaran esa cifra, los partidos habr¨ªan gastado en esta campa?a 11.054.000 euros. No es as¨ª, porque los peque?os no pueden permit¨ªrselo y alguno de los grandes asegura que tampoco.

El PNV se siente en inferioridad de condiciones respecto al PSE y PP

Todos afirman que han intentado hacer la campa?a "m¨¢s austera posible" y que esperan quedarse por debajo de la cifra global, aunque los dos grandes, PNV y PSE, admiten que siempre se mueven al l¨ªmite. Ambos se?alan que esperan cerrar sus gastos en torno a 1,6 millones. Pero todos sospechan tambi¨¦n, y as¨ª lo sugieren, que sus oponentes superan las cifras que reconocen, al menos en el caso de los tres principales, PNV, PSE y PP. Este ¨²ltimo partido eleva su gasto a 1,5 millones, mientras EA lo fija en 600.000 euros, en un llamativo contraste con un partido menor, EB, que invertir¨¢ un mill¨®n. De esa cantidad dedicar¨¢ el 0,7% a cooperaci¨®n al desarrollo, adjudic¨¢ndolo a propuestas que le realicen ONG. Se trata de una iniciativa ¨²nica. As¨ª, atendiendo a las cifras que ellos mismos proporcionan, los partidos habr¨¢n gastado en esta campa?a 5,3 millones de euros, a falta de a?adir la cantidad empleada por Aralar, formaci¨®n que no facilit¨® sus cifras.

El PNV se siente en inferioridad de condiciones: los partidos de implantaci¨®n nacional pueden imputar gastos de las campa?as auton¨®micas a sus contabilidades generales. Y sus especialistas en la materia dan un ejemplo: ?d¨®nde carga el PP vasco el avi¨®n en el que se ha desplazado Mariano Rajoy a sus actos vascos: en la contabilidad espec¨ªfica de esta campa?a o en la general del partido? Es s¨®lo un ejemplo, como puede haber otros en materia de dise?o o publicidad y otras partidas, aseguran. Otro tanto ocurre, afirman, con la conformaci¨®n de opini¨®n a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n, fundamentalmente radios y televisiones, en informativos y tertulias en los que, salvo en el caso de los medios p¨²blicos vascos y la prensa local vinculada al nacionalismo, "el PSE y el PP tiene un plus gratuito" que, a juicio del PNV, deber¨ªa cuantificarse y regularse.

Los partidos, sobre todo los peque?os, escrutan los medios desplegados por los otros para rebatir la afirmaci¨®n de ¨¦stos de que se atienen a los m¨¢ximos fijados por ley.

Por ejemplo, EA sabe, porque pidi¨® presupuesto y no se lo pudo permitir, que las productoras para controlar al menos la realizaci¨®n de sus actos masivos -aunque el material se entrega ¨ªntegro a las televisiones, nunca habr¨¢ nada que no se quiera que se vea ni las tomas ser¨¢n perjudiciales para el patr¨®n- cuestan 22.000 euros por acto, incluidos el equipo del sat¨¦lite m¨®vil, al menos tres c¨¢maras y un elevador. Otro tanto ocurre con los prompter, ese cristal que no se ve, pero en el que los candidatos est¨¢n leyendo sus intervenciones: 6.000 euros por acto. "Son cosas que pasan desapercibidas, pero el gasto est¨¢ ah¨ª", afirma su jefe de comunicaci¨®n, Mikel Irujo.