Trillo fue informado ya el primer d¨ªa de la dificultad de identificar los cad¨¢veres

El 27 de mayo de 2003, un d¨ªa despu¨¦s del accidente del Yak-42 en el que murieron 62 militares espa?oles, el entonces titular de Defensa, Federico Trillo-Figueroa, acudi¨® al tanatorio de Trabzon (Turqu¨ªa), donde charl¨® con el general de divisi¨®n Vicente Navarro, principal acusado en el juicio que se inici¨® ayer en la Audiencia Nacional.

Navarro, a quien se imputa un delito continuado de falsificaci¨®n de documento oficial por la err¨®nea identificaci¨®n de 30 de las 62 v¨ªctimas (todas las que no fueron identificadas con el acuerdo de los forenses turcos), declar¨® ayer que Trillo no le dio instrucciones y ni siquiera le orden¨® que identificara los cuerpos.

"El encargo era la recuperaci¨®n y repatriaci¨®n [de las v¨ªctimas]. [Pero] cuando vi el [buen] estado de los cad¨¢veres, decid¨ª identificarlos, para acortar el duelo familiar y por respeto a mis compa?eros. Sab¨ªamos que era lo deseable", declar¨®.

El ministro inst¨® a seguir con las identificaciones antes de la repatriaci¨®n

El jefe del Ej¨¦rcito sugiri¨® no entregar a las familias los cad¨¢veres dudosos

Esta versi¨®n no coincide, sin embargo, con la que ofrece un testigo de la conversaci¨®n entre Navarro y Trillo: el entonces embajador de Espa?a en Turqu¨ªa, Manuel de la C¨¢mara.

"Al descender [del monte Pilav, lugar del accidente] el ministro y quienes le acompa?¨¢bamos nos dirigimos directamente al tanatorio, pero no entramos en su interior", explica el embajador en un documento al que ha tenido acceso EL PA?S. "Poco despu¨¦s sali¨® el general Navarro, quien inform¨® [de] que se hab¨ªan formado varios equipos de forenses turcos, espa?oles (y despu¨¦s ucranianos) para trabajar lo m¨¢s r¨¢pidamente posible en la identificaci¨®n de los cad¨¢veres y se estaba avanzando a buen ritmo, aunque ya nos anunci¨® que algunos eran dif¨ªciles de reconocer porque estaban muy quemados. El ministro recomend¨® que siguieran trabajando, al estar previsto que los cad¨¢veres fueran recogidos al d¨ªa siguiente para su traslado a Espa?a", agrega De la C¨¢mara.

El documento del diplom¨¢tico deja as¨ª en evidencia que algunos cuerpos estaban irreconocibles por las quemaduras; que Trillo fue informado de la dificultad de identificarlos; y que inst¨® a Navarro a que prosiguiera la tarea, anunci¨¢ndole que al d¨ªa siguiente deb¨ªan ser repatriados en tres aviones de transporte.

Este informe, fechado el 20 de septiembre de 2004, forma parte de la investigaci¨®n interna que orden¨® el entonces ministro de Defensa, Jos¨¦ Bono. Pero no est¨¢ incluido en la causa que se juzga en la Audiencia Nacional.

?Por qu¨¦? El juez instructor, Fernando Grande-Marlaska, dividi¨® el caso Yak-42 en dos sumarios: uno sobre la contrataci¨®n del avi¨®n y otro sobre las identificaciones. En el primero de ellos, llam¨® a testificar al actual presidente del Congreso, Jos¨¦ Bono, quien reclam¨® a su gabinete los documentos de la investigaci¨®n interna sobre la contrataci¨®n del Yak-42. Y los entreg¨® al juzgado. Pero el juez no quiso citar a Bono en el segundo sumario y los informes sobre las identificaciones se quedaron en Defensa.

Entre ellos, la nota informativa que se reproduce en esta p¨¢gina, fechada el 30 de junio de 2004 y firmada por el entonces jefe de la c¨²pula militar, F¨¦lix Sanz. Relata una conversaci¨®n con el ex jefe del Ej¨¦rcito de Tierra general Luis Alejandre, quien le cont¨® la reuni¨®n que, en la ma?ana del 28 de mayo de 2003, mantuvieron en la sala de juntas aneja al despacho del ministro los miembros del Consejo de Direcci¨®n del departamento. Durante la misma, Alejandre, "conocedor de que no hab¨ªa seguridad en la identificaci¨®n de todos los cad¨¢veres", habr¨ªa propuesto "entregar a los familiares ¨²nicamente aquellos identificados de forma positiva y trasladar los dem¨¢s a un tanatorio a la espera de que dicha identificaci¨®n positiva se produjera".

El tribunal rechaz¨® ayer citar como testigos a Bono, Manuel de la C¨¢mara, Alejandre, el ex presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar o el propio Trillo, entre otros muchos.

En este ¨²ltimo caso, con un argumento muy revelador: el testimonio del ex ministro de Defensa s¨®lo ser¨ªa relevante si lo pidieran las defensas y no las acusaciones, como era el caso. Un hipot¨¦tico reconocimiento de que Navarro y sus dos ayudantes (el comandante Jos¨¦ Ram¨ªrez Garc¨ªa y el capit¨¢n Miguel S¨¢ez Garc¨ªa) actuaron siguiendo "¨®rdenes tajantes" de Trillo favorecer¨ªa a los acusados, en vez de perjudicarlos, razon¨® el presidente del tribunal, Javier G¨®mez Berm¨²dez. Aunque tampoco ser¨ªa el caso, advirti¨®, pues la obediencia debida no exime de la comisi¨®n de un presunto delito.

Si quedaban dudas, Berm¨²dez agreg¨®: "Saber la verdad es algo ajeno al proceso penal. Este juicio no es para indagar todo lo que ocurri¨®, sino para aclarar si hubo alteraci¨®n de documento p¨²blico y si tuvo relevancia penal". Aunque a las familias de las v¨ªctimas les cueste asumirlo.