Un a?o de c¨¢rcel para un m¨¦dico que ayud¨® a morir a una paciente

El presidente del tribunal popular que juzg¨® en la Audiencia de Tarragona a un m¨¦dico del hospital de M¨®ra d'Ebre acusado de ayudar a morir a una enferma terminal acept¨® ayer el acuerdo al que llegaron el fiscal y la defensa por el que se le condena al facultativo a un a?o de c¨¢rcel. El juicio contra el m¨¦dico Marcos A. H. G. qued¨® ayer visto para sentencia.

Al facultativo, adem¨¢s, se le puede condenar a una multa de 1.620 euros por un delito de cooperaci¨®n al suicidio e inhabilitaci¨®n por el tiempo que dure la condena. El juez dictar¨¢ sentencia condenatoria en los t¨¦rminos aceptados por ambas partes, de modo que el m¨¦dico, que no tiene antecedentes, no ingresar¨¢ en prisi¨®n.

En un principio, el fiscal ped¨ªa 10 a?os de c¨¢rcel e inhabilitaci¨®n durante el tiempo de condena para Marcos A. H. G. Tras escuchar la versi¨®n del acusado y de los testigos, modific¨® su petici¨®n al entender que el acusado "crey¨® err¨®neamente" que la v¨ªctima, Carmen C. R., de 82 a?os, le pidi¨® que acabara con su vida cuando, encontr¨¢ndose en estado terminal, ¨¦sta le suplic¨® que pusiera fin a su sufrimiento.

Cloruro pot¨¢sico

Durante el juicio, el facultativo, que fue despedido del hospital tras estos hechos y que ejerce como m¨¦dico en Inglaterra en la actualidad, explic¨® que suministr¨® a la paciente 60 miligramos de cloruro pot¨¢sico, a sabiendas del efecto letal de esta sustancia, por razones "humanitarias".

El m¨¦dico explic¨® que la v¨ªctima, que padec¨ªa un c¨¢ncer de colon y diabetes, ingres¨® el 28 de marzo de 2005 en "situaci¨®n terminal" en el hospital de M¨®ra d'Ebre tras sufrir un infarto de miocardio. El acusado le administr¨® un tratamiento terap¨¦utico, pero, dada la gravedad del caso, con el consentimiento de los hijos de la paciente, la sed¨® a la espera de un fallo multiorg¨¢nico.

Ante las reiteradas peticiones de la fallecida y de sus familiares para que se "acabara con su sufrimiento", el m¨¦dico decidi¨® actuar "con humanidad" y opt¨® por inyectarle una dosis letal de cloruro pot¨¢sico, lo que le caus¨® la muerte al instante, explic¨®.

Los forenses que declararon en el juicio avalaron el tratamiento curativo y la sedaci¨®n que se practic¨® a la v¨ªctima, y coincidieron en que la mujer hubiese fallecido en "dos o tres d¨ªas".