Balance econ¨®mico de la legislatura (II)

La evoluci¨®n econ¨®mica de Galicia depende s¨®lo parcialmente de la pol¨ªtica econ¨®mica que despliega la Xunta de Galicia. Porque existen otros niveles de gobierno y, sobre todo, porque es una econom¨ªa de mercado en la que las empresas privadas son protagonistas principales. Dicho esto, la realidad es que desde 2005 y en comparaci¨®n con la media espa?ola, el comportamiento de la econom¨ªa gallega ha sido positivo. Nunca antes en la historia de la Galicia auton¨®mica se hab¨ªan encadenado tantos trimestres seguidos de crecimiento econ¨®mico por encima de la media espa?ola y sin contar con el plus de expansi¨®n del Xacobeo. Tambi¨¦n tuvimos mejor comportamiento que la media en desempleo o en exportaciones. Aunque este diferencial es a¨²n limitado en dimensi¨®n y duraci¨®n para poder hablar de un punto de inflexi¨®n en las tendencias negativas que mantiene atrapada desde hace muchas d¨¦cadas a la econom¨ªa gallega en el concierto espa?ol, me sorprende que la campa?a de los partidos que estaban en el gobierno no incidiese en mayor medida en este logro, tratando de responsabilizarse lo m¨¢s posible del mismo.

Galicia nota menos la recesi¨®n porque es una de las zonas de Espa?a con m¨¢s obra civil

En todo caso, el objetivo del nuevo gobierno gallego deber¨ªa ser consolidar este comportamiento comparativo favorable incluso en la coyuntura adversa por la que atravesar¨¢n las econom¨ªas europeas en 2009 y 2010. Para ello deber¨¢ trabajar tanto en las medidas con impacto a corto plazo como en las de incidencia de largo recorrido. De nuevo, la herencia del bipartito no debe ser desestimada.

En cuanto a las medidas a corto plazo, la Xunta ha trabajado bien, dentro de sus posibilidades, en lo que ata?e a financiaci¨®n empresarial. Galicia se ha convertido en referente en el mapa auton¨®mico espa?ol y el trabajo a desarrollar en los pr¨®ximos meses no deber¨ªa desviarse mucho de lo que ya se est¨¢ haciendo. De nuevo parad¨®jicamente, fue uno de los partidos en el gobierno el que en plena campa?a electoral puso en cuesti¨®n el funcionamiento del Igape y la necesidad perentoria de un banco p¨²blico gallego.

Tambi¨¦n es positivo el volumen de inversi¨®n p¨²blica presupuestada y ejecutada en Galicia, tanto por el Gobierno central como por el auton¨®mico. Somos uno de los territorios de Espa?a en el que m¨¢s obra civil se est¨¢ haciendo, lo que ayuda a explicar por qu¨¦ en Galicia estamos notando menos la recesi¨®n econ¨®mica. Con vistas a 2010 deber¨ªamos ser capaces de mantener este esfuerzo inversor gracias a unos fondos europeos ac¨ªclicos, un mayor endeudamiento y el mantenimiento de las inversiones del Estado en el entorno del 8% del total. En cuanto a las ayudas directas a empresas para el mantenimiento de empleo y contrataci¨®n de determinados colectivos, creo que hay que ser de entrada m¨¢s esc¨¦pticos y revisar lo que se est¨¢ haciendo. Finalmente, me parece que las rebajas fiscales no deber¨ªan convertirse en instrumento de reactivaci¨®n econ¨®mica. No s¨®lo porque buena parte de la rebaja pueda trasladarse a ahorro y no a gasto, como parece haber ocurrido con los 400 euros de Zapatero, sino porque los multiplicadores keynesianos son particularmente reducidos en el caso de econom¨ªas regionales peque?as y abiertas como la gallega.

En lo que ata?e a las medidas de largo plazo, existen m¨¢s frentes abiertos. En lo que sigue me referir¨¦ a uno de ellos, dejando el resto para el tercer y ¨²ltimo art¨ªculo de la serie. En materia de promoci¨®n y planificaci¨®n econ¨®mica la acci¨®n de gobierno debe ser coordinada y establecer prioridades. Para eso es fundamental dise?ar un mapa de clusters empresariales de dimensi¨®n y composici¨®n razonable, estimulando su consolidaci¨®n en aquellas ¨¢reas en las que las empresas no sean capaces de hacerlo. Desafortunadamente, la cooperaci¨®n horizontal entre conseller¨ªas ha sido muy deficiente. Mientras que en algunos ¨¢mbitos se duplicaban esfuerzos, otros se descuidaban. Por consiguiente, en este caso s¨ª queda mucho por hacer para el nuevo gobierno. Empezando por coordinar (integrar) econom¨ªa e industria para la definici¨®n y ejecuci¨®n de esas prioridades del tejido productivo gallego.