Protesta contra la exigencia de catal¨¢n en la sanidad balear

M¨¢s de 1.500 personas, la mayor¨ªa m¨¦dicos y enfermeros de los hospitales p¨²blicos de Baleares, se concentraron ayer en Palma, Mah¨®n, Ibiza y Formentera para "rechazar la imposici¨®n" del conocimiento de un nivel elemental de lengua catalana a los nuevos funcionarios del sector. Esa exigencia fue aprobada el lunes a trav¨¦s de un decreto por el Gobierno de centro izquierda; el martes, estableci¨® una moratoria de tres a?os para que quienes logren los empleos acrediten su nivel ling¨¹¨ªstico.

El PP balear secund¨® la protesta. Su l¨ªder, Rosa Estar¨¢s, acudi¨® a la manifestaci¨®n de Palma acompa?ada de otros dirigentes. Los sindicatos profesionales de m¨¦dicos y de enfermer¨ªa (enfrentados al consejero, Vicen? Thom¨¤s, del PSOE) afirmaron que hubo m¨¢s de 3.500 manifestantes en la capital balear, pero la Polic¨ªa rebaj¨® la cifra a 2.200.

Por primera vez desde 2002, cuando la comunidad aut¨®noma asumi¨® las competencias en Sanidad, este a?o se efectuar¨¢ un proceso de selecci¨®n para 4.000 nuevos empleos. A partir de ahora, para ocupar una plaza fija en la Sanidad, desde los m¨¦dicos hasta los auxiliares de cocina deber¨¢n demostrar un nivel B de conocimiento elemental, oral y escrito, de la lengua catalana. En Baleares hay 15.000 funcionarios de Sanidad, 2.500 de ellos m¨¦dicos. El colectivo con plaza fija queda al margen de la nueva norma.

Los denominados certificados B (a los dem¨¢s funcionarios se les exige un nivel superior) ser¨¢n requeridos a los licenciados en Medicina y a los cocineros, mientras que el nivel A, que s¨®lo constata los conocimientos orales, ser¨¢ exigible a auxiliares de enfermer¨ªa y administraci¨®n, celadores y lavanderos.