Un surtidor verde en cada gran gasolinera

Uno de los aspectos que m¨¢s trata la ley es el apoyo a los biocarburantes, combustibles obtenidos a partir de cultivos como el aceite, el ma¨ªz, la remolacha o el sorgo. Estos compuestos (biodi¨¦sel y bioetanol) supusieron el 1,8% de las gasolinas en 2008 y un 2,1% en el primer mes de 2009. Para este a?o, el objetivo legal era llegar al 2,5%, algo que previsiblemente se alcanzar¨¢ gracias al uso de ETBE, un aditivo en gasolina que procede de cultivos. Pero dar el salto de esa cifra hasta el 10% que la Uni¨®n Europea quiere alcanzar en 2020 ser¨¢ complicado.

Por eso el borrador de la Ley de Eficiencia Energ¨¦tica y Energ¨ªas Renovables establece que las gasolineras m¨¢s grandes -las que dispensan m¨¢s de tres millones de litros al a?o- deber¨¢n tener al menos un surtidor de biocarburante.

El objetivo de la UE es que supongan el 10% del carburante en 2020

El uso de mezclas de di¨¦sel con biodi¨¦sel (o gasolina con etanol) no requiere etiquetado si se hace a bajos porcentajes. Pero si se quiere usar un carburante con una alta proporci¨®n de bio (hasta un 85%) hacen falta un etiquetado y un surtidor espec¨ªfico, ya que no todos los coches est¨¢n preparados.

En 2014, el Ejecutivo estudia extender esta obligaci¨®n a las gasolineras que venden m¨¢s de un mill¨®n de litros y en 2018 a todas.

Actualmente s¨®lo hay 14 gasolineras que ofrecen la posibilidad de recargar bioetanol y 488 que permiten repostar biodi¨¦sel, seg¨²n la revista Energ¨ªas renovables.

Aunque estos combustibles est¨¢n exentos del impuesto de hidrocarburos, las plantas de biocarburantes funcionan a medio gas porque el consumo no termina de despegar y por la importaci¨®n de biocombustibles desde Estados Unidos, donde est¨¢n fuertemente subvencionados.

El texto que maneja el Ejecutivo plantea la posibilidad de que el Gobierno incentive fiscalmente a los veh¨ªculos que consumen m¨¢s de un 20% de biocarburante.

Espa?a mantiene su apoyo decidido a los biocombustibles, pero para evitar las cr¨ªticas de que no ahorran tanto CO2 como dicen sus impulsores o que deforestan selvas v¨ªrgenes, la norma establecer¨¢ cautelas sobre su uso. S¨®lo ser¨¢n considerados biocarburantes los que ahorren al menos el 35% del CO2 -lo que puede limitar la importaci¨®n- y "no se producir¨¢n a partir de materias primas en ¨¢reas con alto valor de biodiversidad". Si el biodi¨¦sel se produce cerca del lugar de consumo es claro, si se realiza a partir de aceite obtenido de palma plantada en Indonesia tras deforestar la selva virgen, no. El Ministerio de Industria tambi¨¦n frenar¨¢ el uso de biocombustibles si se han obtenido tras talar humedales o bosques.

Los biocarburantes han superado el estigma de ser la causa de la explosi¨®n de precios de los alimentos el a?o pasado, ya que la producci¨®n sigue creciendo y los precios han bajado. El coste de los alimentos s¨ª ha estado ligado al aumento del precio del petr¨®leo.

Aunque el apoyo a estos carburantes es claro, la norma potencia la investigaci¨®n a partir de algas o residuos, los llamados biocarburantes de segunda generaci¨®n, que no tienen estos problemas.