"Si el partido lo ve, tiro para adelante"

"Si el partido lo ve, yo tiro para adelante". Nada m¨¢s ser investido presidente de la Junta de Andaluc¨ªa, pasada la una de la tarde del mi¨¦rcoles, Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n comunic¨® a Luis Pizarro, vicesecretario general del PSOE andaluz y flamante consejero de Gobernaci¨®n, que quer¨ªa fichar a la alcaldesa de C¨®rdoba, Rosa Aguilar, de IU, como consejera de Obras P¨²blicas. "D¨¦jame que me recomponga un poco", le responde en un rasgo de sinceridad el n¨²mero dos del PSOE.

A partir de ah¨ª se desencadena la operaci¨®n para cerrar el fichaje m¨¢s sorpresivo de todo el nuevo Gobierno andaluz, una propuesta que ha contado con el visto bueno de la c¨²pula dirigente socialista. En la ejecutiva federal, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y Jos¨¦ Blanco; y en la direcci¨®n regional, Manuel Chaves, Luis Pizarro, Rafael Velasco, y el secretario del PSOE de C¨®rdoba, Juan Pablo Dur¨¢n. Desde que empiezan los contactos hasta que Rosa Aguilar da el s¨ª a Gri?¨¢n -ella pide tiempo para reunirse con su equipo-, que es sobre las diez de la noche, transcurren nueve horas, seg¨²n contaron varias fuentes socialistas.

El PSOE garantiza a IU que no se trata de una estrategia de acoso y derribo

Pizarro respondi¨® a Gri?¨¢n: "D¨¦jame que me reponga un poco"

Posiblemente, Gri?¨¢n s¨ª anticipa sus intenciones al l¨ªder del PSOE andaluz y vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, quien no duda ni un segundo en avalar el nombramiento de Rosa Aguilar. Estas fuentes dan por seguro que Gri?¨¢n y la ya ex alcaldesa de C¨®rdoba -ambos son amigos- ven¨ªan hablando desde hace tiempo de esta posibilidad.

Gri?¨¢n es consciente de que la jugada pol¨ªtica entra?a riesgos. Para empezar, Aguilar no conoce "la cultura del PSOE", se?alan varias fuentes, un partido que digiere regular a los pol¨ªticos sin carn¨¦ y al que no le gusta los versos sueltos. De ah¨ª, que algunos hablaran ayer de "riesgo". Tambi¨¦n analizaron las repercusiones que tendr¨¢ en el Congreso de los Diputados, donde los dos votos de IU pueden ser b¨¢sicos para el Gobierno en minor¨ªa de Rodr¨ªguez Zapatero. Hubo preocupaci¨®n por que IU entendiera el fichaje como una opa hostil. Desde hace a?os, la ejecutiva regional que dirige Chaves ha venido trabajando en limar asperezas con IU, consciente de que, en caso de p¨¦rdida de la mayor¨ªa absoluta, su apoyo le ser¨¢ necesario.

El mi¨¦rcoles, Pizarro telefonea al coordinador de IU, Diego Valderas, y le asegura que el pacto de coalici¨®n que ambas fuerzas mantienen en C¨®rdoba se mantiene intacto. Tambi¨¦n le explica que no se trata ni de una estrategia de acoso, ni una declaraci¨®n de guerra contra la federaci¨®n, sino de una decisi¨®n personal de Gri?¨¢n.

A Izquierda Unida, la otra parte, la operaci¨®n le ha parecido un asalto, si bien exime al PSOE y culpa a Gri?¨¢n. No por esperada, la salida definitiva de Rosa Aguilar result¨® menos hiriente en la organizaci¨®n andaluza. Hac¨ªa a?os -en puridad, lustros- que la hasta ayer alcaldesa de C¨®rdoba circulaba por libre por sus entramados y jerarqu¨ªas, muy al margen de los cada vez m¨¢s radicales postulados de la nueva IU y, por su puesto, de su disciplina, de la que ha escapado siempre, a veces con pases escurridizos, pero amables, y otras con desafiantes cortes.

Diego Valderas reaccion¨® ayer como sus compa?eros de Madrid: calific¨® a la ex izquierdista de "desleal" y pidi¨® una reuni¨®n al PSOE para hablar de las consecuencias del desaguisado, con la vista puesta en los pactos puntuales pendientes. Con la garant¨ªa de los socialistas de que el equilibrio del gobierno en C¨®rdoba va a permanecer inalterado y que apoyar¨¢n al candidato que disponga IU, el coordinador se desplaz¨® hasta la ciudad para reunirse con las direcciones provincial y local y marcar el plazo de una semana para se?alar al elegido.Por la ma?ana, de los ordenadores de la direcci¨®n de IU sali¨® un documento con destino a las organizaciones provinciales y el consejo andaluz d¨®nde se detalla la "estrategia medi¨¢tica" como r¨¦plica al abandono de Aguilar, por "si surge el tema". En ¨¦l se precisa que hay que "mostrar el estupor y la sorpresa" por el nombramiento, as¨ª como subrayar que lo primero que ha hecho Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n para manifestar su "talante y voluntad de di¨¢logo" es "tratar de desestabilizar" a IU. Por lo dem¨¢s, a?ade, es conveniente decir que Rosa Aguilar se ha autoexcluido de IU y que su incorporaci¨®n al Gobierno no significa en ning¨²n modo que IU abrace "los principios neoliberales del libre mercado" que representa el socialista.

Sin embargo, Valderas trat¨® m¨¢s tarde de limar el dramatismo del plante de la ex alcaldesa y dijo que lo importante no son las personas sino el proyecto. En clave interna, hay quienes se sienten aliviados, sobre todo los dirigentes de C¨®rdoba, con quien Aguilar manten¨ªa una convivencia imposible, que, en algunos casos, ha llegado a ser lacerante.

Alivio y v¨¦rtigo

El an¨¢lisis de la proyecci¨®n exterior ya es otra cosa: despu¨¦s de m¨¢s avisos que en el instructivo cuento del lobo, el mayor referente de IU en Andaluc¨ªa y Espa?a se ha montado por fin en el tren de los ejecutivos del PSOE. Antes pasaron otros muchos -los gui?os de los socialistas de Madrid y Sevilla han sido constantes- y nunca se subi¨®, pero ni IU es la de antes ni ella tampoco. La organizaci¨®n ha ido desliz¨¢ndose hacia posiciones cada vez m¨¢s extremas bajo la hegemon¨ªa del PCE (del que Aguilar, aunque con carn¨¦, ha sido siempre disidente), y la ex alcaldesa ha evolucionando poco a poco, asida a su puesto institucional, hasta un izquierdismo muy moderado.

Adem¨¢s de consultar a su equipo, Rosa Aguilar telefone¨® el mi¨¦rcoles por la noche a Diego Valderas, quien le respondi¨® que discrepaba de su determinaci¨®n. Quedaron en hablar ayer por la ma?ana, pero ya no hubo m¨¢s contactos. La lectura de IU es que el PSOE, especialmente el federal, en un momento de claro desgaste, se ha hecho con un important¨ªsimo valor de esta organizaci¨®n, la "joya de la corona", como le llam¨® el ex coordinador Gaspar Llamazares.