Ni un euro adicional para que la Universidad se adapte a Bolonia
La Generalitat, poco implicada en el proceso, descarta destinar fondos extra
![Ignacio Zafra](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F4d89325c-7f93-4b69-b7eb-b1b3b272c02d.jpg?auth=eb0419eecf558bcf53cd5f7086dca9762dfd83c9619fba0f80a50674db2f041f&width=100&height=100&smart=true)
No habr¨¢ fondos adicionales para adaptar el sistema universitario valenciano al Espacio Europeo de Educaci¨®n Superior. Al menos no saldr¨¢n de la Generalitat. Los rectores de las universidades p¨²blicas y la junta de profesores de la Universitat de Val¨¨ncia han declarado que resultar¨¢ imposible reorganizar las carreras, introducir modelos de innovaci¨®n docente y ofrecer formaci¨®n de calidad si la reforma se realiza a coste cero. Ese es tambi¨¦n uno de los argumentos principales del movimiento anti-Bolonia: si el cambio se hace sin poner m¨¢s dinero, saldr¨¢ mal, y para eso mejor dejar las cosas estar.
La Consejer¨ªa de Educaci¨®n se escuda en la crisis econ¨®mica. "Estamos en un momento muy malo", dice Mar¨ªa Amparo Camarero, secretaria auton¨®mica de Universidades, y asegura que el Consell cumplir¨¢, en cambio, con lo que figura en los presupuestos (815 millones de euros) que los centros est¨¢n recibiendo por mensualidades.
La Generalitat no destinar¨¢ dinero a una reforma en la que, por otra parte, se ha implicado muy poco. No se recuerda ninguna decisi¨®n al respecto en la etapa de Justo Nieto, ni en la primera de Font de Mora, cuando Emilio Barber¨¢ estaba a cargo del ¨¢rea de universidades como secretario auton¨®mico. Ni siquiera durante la revuelta protagonizada por los estudiantes contrarios al espacio europeo se ha escuchado del Consell una palabra en defensa del proceso o del sistema universitario p¨²blico, m¨¢s all¨¢ de alg¨²n consejo gen¨¦rico del tipo estudien m¨¢s y protesten menos, que Francisco Camps, presidente de la Generalitat, dirigi¨® a los alumnos en Alicante. En el fondo, y aunque no lo reconocer¨¢n en p¨²blico, los problemas de los rectores (y en especial los problemas del rector de la Universitat de Val¨¨ncia) con los anti-Bolonia fueron m¨¢s festejados que otra cosa desde el Consell. Por varias razones, entre ellas que desviaba el foco de responsabilidad hacia los gobiernos universitarios y hacia el Ejecutivo.
Aunque con sigilo, la actividad se ha incrementado desde la llegada, en mayo de Camarero, profesora de la Universitat Jaume I de Castell¨®n, a la secretar¨ªa auton¨®mica. A finales de 2008 el departamento public¨® una orden en la que fijaba el m¨ªnimo de alumnos (50) que las carreras deb¨ªan reunir en primer curso. ?Y si no los alcanzan? "En ese caso deber¨¢n justificar su mantenimiento", responde Camarero. "Si, por poner un caso, en todas las universidades valencianas s¨®lo hubiera una carrera de F¨ªsica y matriculara a menos de 50 alumnos, lo normal ser¨ªa mantenerla, porque la Comunidad Valenciana no puede dejar de tener una carrera como F¨ªsica".
Educaci¨®n baraja otras posibilidades para salvar carreras con poca demanda. Una ser¨¢ la de t¨ªtulos compartidos. No se tratar¨¢, como se ha planteado en otras comunidades aut¨®nomas, de que dos o m¨¢s universidades impartan juntas la misma carrera (o que se deje s¨®lo en una de ellas), sino, pr¨¢cticamente, de unificar los primeros cursos de carreras distintas, dejando tercero o cuarto (los grados tendr¨¢n todos cuatro a?os, salvo unas pocas excepciones) para la especializaci¨®n. Podr¨ªan funcionar al principio como una sola carrera, por ejemplo, el grado de Administraci¨®n y Direcci¨®n de Empresas, y el grado de Finanzas y Contabilidad. O los grados de Matem¨¢ticas y Estad¨ªstica podr¨ªan compartir bastantes asignaturas, afirma Camarero.
La secretaria auton¨®mica explica la inacci¨®n en que ha estado instalada la Generalitat indicando que al Gobierno auton¨®mico le corresponde el tramo final del proceso. El Ejecutivo elabor¨® la ley; la Agencia Nacional de Evaluaci¨®n de la Calidad y Acreditaci¨®n (Aneca) debe informar sobre las solicitudes de carreras que presentan las universidades; el Consejo de Universidades aprueba los t¨ªtulos, y a las comunidades aut¨®nomas corresponde autorizar su implantaci¨®n.
Un profesor para varias carreras
La Consejer¨ªa de Educaci¨®n no acepta uno de los principales argumentos de las universidades para reclamar fondos que les permitan adaptarse al Espacio Europeo de Educaci¨®n Superior: la necesidad de reforzar con profesores las carreras con una demanda alta. El motivo es que el nuevo modelo docente que se deriva de la declaraci¨®n de Bolonia plantea la necesidad de distribuir a los alumnos en grupos m¨¢s peque?os para que puedan tener una participaci¨®n m¨¢s activa durante el curso. Es decir, que no se limiten a escuchar del profesor y a tomar notas, sino que intervengan y realicen m¨¢s trabajaos individuales o en grupo dentro y fuera del aula. Y eso, explican quienes han estado a cargo de los grupos de innovaci¨®n docente ensayados en los ¨²ltimos a?os en las universidades, puede hacerse con grupos de 30, 40 quiz¨¢ con 50 alumnos. Pero resulta pr¨¢cticamente imposible pensar que pueda hacerse con 90, 100 o 120 alumnos, tama?os que siguen siendo habituales en carreras con mucha demanda, como las de Ciencias Sociales.
El hecho de que la mayor¨ªa de los profesores ocupen plaza de funcionarios (cosa que ocurre en mayor proporci¨®n cuanto m¨¢s antigua es una universidad) hace muy complicado mover a los docentes de all¨ª de donde sobran profesores a all¨ª donde faltan. En el primer caso se hallan un buen n¨²mero de titulaciones de Humanidades y, en menor medida, de Ciencias B¨¢sicas, en las que la demanda de estudios ha ido cayendo en los ¨²ltimos a?os. En el segundo caso siguen siendo paradigm¨¢ticas las carreras de Ciencias Sociales como Administraci¨®n y Direcci¨®n de Empresas, y Derecho.
La secretaria auton¨®mica de Universidades, Mar¨ªa Amparo Camarero, est¨¢ convencida, en cambio, de que la movilidad entre carreras no es ninguna quimera. "Un profesor puede dar clases en m¨¢s de una carrera. En muchos casos, los cr¨¦ditos b¨¢sicos que se imparten en los primeros cursos los pueden dar profesores de distintos departamentos". En la Jaume I de Castell¨®n, comenta, los docentes de Matem¨¢ticas dan clases en varias titulaciones. Y lo mismo podr¨ªa hacerse en carreras de ciencias o ingenier¨ªas e incluso, afirma, en casos m¨¢s distantes: un profesor de lat¨ªn podr¨ªa explicar la genealog¨ªa de muchos t¨¦rminos en carreras como Medicina o Farmacia.
Pero aceptando que las universidades pudieran conseguir cierto grado de movilidad entre disciplinas cercanas (o entre carreras algo m¨¢s alejadas mediante cursos de reciclaje), de ese modo la descompensaci¨®n de la plantilla s¨®lo ser¨¢ paliada. Y esa cuesti¨®n no agota los quebraderos de cabeza a los que tienen que enfrentarse los gestores universitarios. La mayor parte de las aulas de las facultades fueron dise?adas y levantadas en la etapa de masificaci¨®n universitaria. Y ahora tendr¨¢n que ser reformadas para que en vez de una clase para 200 alumnos haya cuatro clases para 50. Y las obras no pueden hacerse a coste cero.
Medidas del Consell ante la reforma
- No habr¨¢ financiaci¨®n extra como hab¨ªan pedido rectores, profesores y alumnos.
- M¨ªnimo 50 estudiantes nuevos por carrera. Si no los re¨²ne tendr¨¢ que justificar su continuidad, compartir cursos con otras titulaciones o desaparecer.
- La falta de profesores puede paliarse en parte, se?ala Educaci¨®n, fomentando la movilidad entre carreras afines.
- Los t¨ªtulos con muchos docentes, circunstancia que se produce en algunas carreras de Humanidades, pueden aprovechar para reforzar los posgrados (master y doctorado).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
![Ignacio Zafra](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F4d89325c-7f93-4b69-b7eb-b1b3b272c02d.jpg?auth=eb0419eecf558bcf53cd5f7086dca9762dfd83c9619fba0f80a50674db2f041f&width=100&height=100&smart=true)
Archivado En
- EEES
- VII Legislatura Comunidad Valenciana
- Titulaciones
- Consejer¨ªas auton¨®micas
- Generalitat Valenciana
- Comunidades aut¨®nomas
- Gobierno auton¨®mico
- Profesorado
- Parlamentos auton¨®micos
- Pol¨ªtica educativa
- Comunidad Valenciana
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Comunidad educativa
- Pol¨ªtica auton¨®mica
- Uni¨®n Europea
- Parlamento
- Organizaciones internacionales
- Centros educativos
- Espa?a
- Relaciones exteriores
- Sistema educativo
- Pol¨ªtica
- Educaci¨®n
- Administraci¨®n p¨²blica