"No tratamos peor a Espa?a que a Francia"

Andris Piebalgs (Letonia, 1957) ostenta la cartera de Energ¨ªa de la Comisi¨®n Europea desde finales de 2004. En su agenda, la seguridad del suministro y la lucha contra el cambio clim¨¢tico ocupan un lugar prioritario.

Pregunta. La crisis ha frenado las inversiones del sector. ?Qu¨¦ consecuencias tendr¨¢ eso?

Respuesta. El riesgo se plantea a medio plazo. El precio del barril se mueve entre los 40 y los 50 d¨®lares y algunas empresas del sector aducen que el precio justo que cubre los costes de sus inversiones es de 75 d¨®lares por barril. Adem¨¢s, necesitan capital para poder invertir y los bancos son reticentes a prest¨¢rselo, de modo que podr¨ªamos tener picos en los precios del petr¨®leo a medio plazo y eso ser¨ªa malo para la econom¨ªa. Lo que debemos hacer es apostar por la eficiencia energ¨¦tica y la energ¨ªa verde.

"A priori nunca debemos decir no a una inversi¨®n de una empresa rusa"

"Las energ¨ªas renovables ayudan a la seguridad del suministro"

"Los reguladores nacionales no son lo bastante independientes"

P. La crisis deber¨ªa ser un acicate, pero ?no puede convertirse en pretexto para no hacerlo?

R. No es esa mi impresi¨®n. Las empresas ven ya que la energ¨ªa verde es un negocio de crecimiento. El riesgo de ver en la crisis un pretexto para no actuar est¨¢ en los gobiernos. Pero ahora los veo comprometidos con la eficiencia energ¨¦tica y las renovables.

P. La presidencia de Barak Obama ?puede despejar un acuerdo en la cumbre de Copenhague sobre el cambio clim¨¢tico?

R. La cumbre de Copenhague y la lucha contra el cambio clim¨¢tico s¨®lo pueden tener ¨¦xito si los americanos se implican a fondo. Lo que han dicho hasta ahora es esperanzador, pero ser¨ªa importante tambi¨¦n que fijaran algunos compromisos vinculantes. Sin ellos, ser¨¢ dif¨ªcil hablar de ¨¦xito. Un frente unido entre la UE y EE UU significar¨ªa un acuerdo en Copenhague. Si no, tendremos un problema.

P. ?El objetivo de que las renovables alcancen un 20% del mix energ¨¦tico es realista?

R. Estoy del todo convencido de ello. Pero es extremadamente importante que los gobiernos no se queden cortos y preparen y pongan en marcha estrategias de apoyo claras, ambiciosas, transparentes y positivas. Creo que hemos dejado esa zona gris de los ¨²ltimos cinco a?os en que muchos se preguntaban si las renovables eran demasiado caras. Se dice que son caras, pero debe tenerse en cuenta el impacto sobre el medio ambiente de las fuentes tradicionales de energ¨ªa. Es un coste que no aparece de forma directa e inmediata, que soportan los pa¨ªses que tienen gas o petr¨®leo. Tampoco se mide con dinero, pero las renovables ayudan a la seguridad del suministro.

P. ?Qui¨¦n tuvo la culpa del corte de suministro de gas que dej¨® a media Europa sin gas?

R. No s¨¦ qui¨¦n es responsable. Y nunca lo sabremos. Rusia dice que Ucrania y Ucrania dice que Rusia. Ambas no pueden tener raz¨®n pero no s¨¦ qui¨¦n la tiene.

P. ?Y puede volver a ocurrir?

R. Podr¨ªa volver a ocurrir una interrupci¨®n, pero es menos probable. El problema resid¨ªa en la negociaci¨®n bilateral del precio del gas suministrado por Rusia. El acuerdo entre ambas incluye una f¨®rmula que hace m¨¢s predecible el precio. El reto real ahora es la econom¨ªa. Ucrania y Rusia afrontan una crisis muy seria. Rusia necesita que le paguen y Ucrania no lo tiene f¨¢cil para pagar.

P. Esa crisis reforz¨® la necesidad de la UE de buscar suministros alternativos. ?No est¨¢ bastante parado el proyecto Nabucco, que traer¨¢ a Europa gas del ¨¢rea del Caspio evitando Rusia?

R. En los ¨²ltimos d¨ªas ha habido se?ales positivas desde dos pa¨ªses clave como Azerbaiy¨¢n y Turkmenist¨¢n. Tambi¨¦n tenemos se?ales muy positivas de Turqu¨ªa (el gasoducto debe atravesar ese pa¨ªs, hasta Austria). Esperamos que el gas llegue en el a?o 2015... S¨ª, s¨¦ que 2013 era la idea original, pero llevar¨¢ m¨¢s tiempo.

P. ?Rusia es un socio fiable?

R. Siempre he cre¨ªdo que s¨ª. Es impopular decirlo, pero lo es. Rusia no quiso nunca cortar el gas a Europa. Y tiene intereses en sacar partido a sus recursos. Rusia es un importante proveedor de la UE no s¨®lo en gas. Tambi¨¦n petr¨®leo, carb¨®n y uranio. La UE debe protegerse y no poner su destino en unas ¨²nicas manos. Ni con Rusia, Argelia u otros.

P. Esa guerra gener¨® recelo en Espa?a ante un desembarco ruso en Repsol. Y Bruselas fue neutral.

R. A priori, nunca debemos decir no a una inversi¨®n de una empresa rusa. Lo importante es ver qu¨¦ valor crea, pensar qu¨¦ nos aportar¨¢. Hay muchos factores a considerar, como qu¨¦ impacto tiene sobre la competencia, o sobre la estrategia de la empresa, o la seguridad del suministro. Nunca se debe prejuzgar que las empresas que vengan de determinados pa¨ªses no deban ser bienvenidas. Es un error pol¨ªtico y econ¨®mico.

P. ?Por qu¨¦ Francia puede promover campeones nacionales energ¨¦ticos y Espa?a topa contra Bruselas? Fue el caso de Endesa.

R. Es una pregunta muy dura. El punto de partida en cada pa¨ªs europeo es ver qui¨¦n es el accionista de una empresa energ¨¦tica. Si el Estado tiene una participaci¨®n mayoritaria, tiene todo el derecho a tomar sus decisiones. Si el mayoritario es un inversor privado, tambi¨¦n. Lo que pide Bruselas es que la ley que existe sea implementada. No es justo decir que Bruselas trate peor a Espa?a que a Francia o a Alemania. Es una percepci¨®n err¨®nea. La Comisi¨®n Europea trata a todas las empresas del sector por igual, no favorece a unas sobre otras. Pero sabemos c¨®mo operan unas empresas controladas por el Estado y otras que no lo est¨¢n. Para el consumidor, lo importante es que las inversiones se hagan y que el precio de la energ¨ªa sea el mejor. Si Espa?a quiere crear un campe¨®n energ¨¦tico nacional, podr¨ªa comprar las acciones de empresas privadas ya existentes. ?Pero tendr¨ªa sentido gastar en ello el dinero de los contribuyentes? Pues no.

P. ?Y Alemania? Se critic¨® la oferta de E.ON sobre Endesa por la falta de reciprocidad en la legislaci¨®n entre Espa?a y Alemania...

R. No hay restricciones. Las empresas espa?olas no han mostrado inter¨¦s por el mercado alem¨¢n. Pero si Iberdrola o Gas Natural van a Alemania, son bienvenidas a hacerlo, proteger¨ªamos sus intereses seg¨²n la ley de la UE. Tambi¨¦n fue el caso de E.ON en Espa?a. Actuamos con justicia. Endesa, Enel, E.ON son empresas europeas. No deber¨ªa haber controversia sobre su origen.

P. ?Considera a la Comisi¨®n Nacional de la Energ¨ªa (CNE) un regulador independiente?

R. Hoy, la CNE est¨¢ actuando sobre la base de la legislaci¨®n europea existente y no tengo que hacer m¨¢s comentarios. Pero Bruselas cree que los reguladores energ¨¦ticos nacionales no son lo bastante independientes. Por eso ha fijado en la nueva normativa una independencia verdadera, con m¨¢s poder y en recursos. El regulador espa?ol tendr¨¢ m¨¢s poder, m¨¢s recursos y responsabilidad.

P. La interconexi¨®n el¨¦ctrica entre Francia y Francia ha generado una dura resistencia en Catalu?a por su impacto medioambiental. ?No hab¨ªa alternativa?

R. Todos creen y saben que la interconexi¨®n incrementa la seguridad del suministro y crea valor para el consumidor. Sabemos que existe un rechazo local muy fuerte. As¨ª que el ¨²nico modo de llevar a cabo este proyecto es soterrando una parte. Costar¨¢ m¨¢s pero se trata de lograr la aceptaci¨®n de la opini¨®n p¨²blica. El coste deber¨ªa socializarse, repartirse, pero lo que podamos pagar de m¨¢s en la factura, comparado con las ventajas de una mayor interconexi¨®n, es nada. Ha sido la mejor opci¨®n.