"El p¨²blico tiene un sexto sentido"
La agrupaci¨®n musical festeja su centenario con fuegos artificiales en el Retiro
La Banda Sinf¨®nica Municipal, con sus 91 titulares, festeja en estas fechas cien a?os al servicio de la sensibilidad musical de madrile?os y forasteros. Un concierto extraordinario en el Retiro con la M¨²sica para los fuegos artificiales, de H?ndel, y pirotecnia real, rubricar¨¢n la efem¨¦rides la noche del 2 de junio. Como premio a su trayectoria, acaba de recibir la Medalla de Plata de la Comunidad. Al frente de la agrupaci¨®n musical figuraron m¨²sicos de la talla de Ricardo Villa o Pablo Soroz¨¢bal, a quien conoci¨® Enrique Garc¨ªa Asensio (Valencia, 1937), que hoy la dirige con batuta firme.
La Banda Sinf¨®nica denunci¨® al Ayuntamiento distintos problemas concernientes a la renovaci¨®n de su plantilla, que afrontaba numerosas jubilaciones. "Aunque los momentos de crisis que vivimos no son los ¨®ptimos, el Ayuntamiento se muestra dispuesto a resolver los problemas: ha convocado las oposiciones, que eran muy necesarias". Los m¨²sicos reivindicaban la cobertura de 11 plazas, de las cuales ya ha cubierto siete. La Banda carece a¨²n de un veh¨ªculo propio.
El Ayuntamiento ya ha cubierto siete de las 11 plazas vacantes
La orquesta toca en el Templete de la M¨²sica en primavera y verano
"Nuestra funci¨®n consiste en aunar todas las sensibilidades"
El responsable considera excelente la ac¨²stica del Monumental
La experiencia interpretativa que la Sinf¨®nica Municipal atesora resulta inigualable. Convoca tres ciclos anuales de m¨²sica, de primavera, oto?o e invierno, para el p¨²blico madrile?o. Su atalaya es el Templete de la M¨²sica del Retiro, catalogado en su d¨ªa como monumento nacional, junto al estanque grande. Muchos domingos de primavera y algunos del verano ofrece all¨ª a los visitantes repertorios tan selectos como vers¨¢tiles.
As¨ª, este domingo interpret¨® a Weber y a Tchaikovski; una muy aplaudida Rapsodia n¨²mero 2 de Liszt y tambi¨¦n la Marcha f¨²nebre de El Ocaso de los dioses, de Wagner, m¨¢s La gracia de Dios, de Ram¨®n Roig, un cl¨¢sico del pasodoble. Se trataba del mismo programa e iguales propinas que las que ofreci¨® hace un siglo en el Teatro Espa?ol el maestro Villa -Aurora Rodr¨ªguez Villa, sobrina-nieta del fundador, asisti¨® al concierto- en la primera actuaci¨®n de la banda sinf¨®nica.
Enrique Garc¨ªa Asensio pertenece a la cuarta generaci¨®n de una saga de m¨²sicos: su abuelo era abogado, pero dej¨® el foro para consagrarse al viol¨ªn y a la ense?anza del solfeo; el maestro es padre de dos violinistas y abuelo de violinista y violoncelista, respectivamente. Uno de ellos interpret¨® hace d¨ªas para ¨¦l una composici¨®n de homenaje.
Garc¨ªa Asensio fue disc¨ªpulo predilecto de Sergiu Celibidache (1912-1996), el director rumano afincado en Par¨ªs a quien conoci¨® en 1958 y con el que comenz¨® a trabajar dos a?os despu¨¦s. Celibidache sent¨® c¨¢tedra en los mejores escenarios europeos. Parte de su legado musical rom¨¢ntico lo ha recogido el director valenciano, cuya pasi¨®n a la hora de transformar las partituras en un lenguaje motor de todos los corazones le vincula a los grandes m¨²sicos del siglo XX, al decir de los cr¨ªticos.
?l fue en 1970 el primer catedr¨¢tico de Direcci¨®n Musical que Espa?a ha tenido, concretamente en el Real Conservatorio Superior de M¨²sica de Madrid. Su experiencia docente le rejuvenece sobremanera, como demuestra cuando, revestido de autoridad innegable -siempre comprensiva y respetuosa hacia sus m¨²sicos, dice- sube a la tarima para situarse al frente de la Sinf¨®nica Municipal, considerada como una de las joyas de la corona madrile?a: todos sus miembros, entre los que figuran cinco mujeres, son titulados superiores; la oposici¨®n para acceder a esta banda es extremadamente dif¨ªcil y conseguirlo es un timbre de prestigio para los centenares de m¨²sicos que aspiran a lograr una plaza en su seno.
"La funci¨®n del director es la m¨¢s desconocida. Su tarea no es la de llevar el comp¨¢s: consiste en ponderar la diversidad an¨ªmica e interpretativa de cada uno de sus m¨²sicos para aunarlas en una sola inteligencia -la suya- y conducirla, yo dir¨ªa que un poco dictatorialmente, hacia una interpretaci¨®n que recoja lo mejor de cada uno de ellos con un estilo unificado", se?ala. Y explica: "El verdadero trabajo del director est¨¢ en los ensayos; luego, a trav¨¦s de una t¨¦cnica propia, recoger¨¢ todas las indicaciones observadas antes para dirigir con desenvoltura". Cree que los estudios de un director de orquesta le brindan un 55% de lo que debe saber; el resto es un don. "De esta manera, cada uno de los asistentes al concierto puede gozar de una experiencia inolvidable, un momento sublime de ¨ªntima comunicaci¨®n personal con la m¨²sica, un instante irrepetible, porque se desarrolla en el tiempo".
?Aprecia el p¨²blico la labor de un director? "El p¨²blico tiene un sexto sentido para averiguarlo y nosotros necesitamos de ¨¦l para que nos juzgue y nos valore".
Entre las salas que hay en Madrid ¨¦l prefiere la del Teatro Monumental, en la calle de Atocha, "donde Ata¨²lfo Argenta grababa todos sus discos: su ac¨²stica, de 2,5 segundos de r¨¦plica resonante, resulta perfecta para el tipo de m¨²sica que la Sinf¨®nica Municipal interpreta". ?C¨®mo es su relaci¨®n con la m¨²sica? "No concibo la vida sin ella", confiesa.
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