Renovaci¨®n de la automoci¨®n

Desplegaba el 17 de mayo en EL PA?S (Cambio de modelo: es el momento) el se?or ministro de Industria todo el argumentario pol¨ªticamente correcto en cuanto a cambio de modelo econ¨®mico, apuesta por la innovaci¨®n, por el I+D+i, por las energ¨ªas renovables, etc¨¦tera.

Bajando a lo algo m¨¢s concreto, defiende el se?or Sebasti¨¢n una industria de la automoci¨®n sostenible medioambientalmente, el cambio a modelos de veh¨ªculos h¨ªbridos y el¨¦ctricos. Y como justificaci¨®n de los 800 millones de euros del Plan de Competitividad del Autom¨®vil que promueve el Gobierno del que forma parte, o para muestra de la l¨ªnea estrat¨¦gica del Gobierno en este sector, un bot¨®n: la asignaci¨®n de la construcci¨®n del futuro Audi Q3 a la f¨¢brica de Martorell.

No s¨¦ cu¨¢ntos puestos de trabajo del sector del autom¨®vil se habr¨¢n salvado con tal designaci¨®n, pero lo que s¨ª est¨¢ claro es que como ejemplo al hilo del discurso futurista y bienintencionado y como paradigma del cambio de modelo necesario no es el m¨¢s adecuado.

El Audi Q3 ser¨¢ un modelo elitista cuyo precio de venta rebasar¨¢ seguramente los 30.000 euros, perteneciente al grupo de los todoterreno de dise?o y destinado a competir con otros modelos elitistas, como el BMW-X1. Por mucho que se utilice en ¨¦l tecnolog¨ªa de ¨²ltima generaci¨®n en cuanto a emisi¨®n de gases perjudiciales, est¨¢ muy lejos de la repercusi¨®n medioambiental de los veh¨ªculos h¨ªbridos enchufables o el¨¦ctricos puros que el se?or Sebasti¨¢n propone como soluci¨®n de futuro.