El vuelo 447 se hunde en el misterio

El misterio crece en torno a la tragedia del vuelo AF-447. Las filtraciones sobre las numerosas anomal¨ªas registradas por el Airbus de la compa?¨ªa Air France est¨¢n alimentando todo tipo de hip¨®tesis sobre las causas que llevaron al aparato a precipitarse al Atl¨¢ntico con 228 personas a bordo el lunes pasado. Seg¨²n una informaci¨®n publicada ayer por Le Monde, el avi¨®n volaba, cuando entr¨® en una zona de grandes tormentas, a una velocidad "err¨®nea".

As¨ª, al menos, se desprende de los c¨¢lculos de la Oficina de Investigaciones y An¨¢lisis a¨¦reos, el organismo franc¨¦s que se encarga de determinar las causas del accidente y que, seg¨²n el diario franc¨¦s, que cita fuentes an¨®nimas del organismo, tiene previsto enviar una recomendaci¨®n a los Airbus actualmente en funcionamiento en este sentido a fin de que no cometan el mismo error. Sin embargo, este organismo se apresur¨® a desmentir esta filtraci¨®n. En la informaci¨®n de Le Monde, no se especifica si esta velocidad "err¨®nea" era alta o baja, ni qu¨¦ implicaciones podr¨ªa tener este hecho en el accidente. De cualquier manera, penetrar en una violenta tormenta demasiado deprisa comporta unos riesgos, y hacerlo demasiado lentamente tambi¨¦n, aunque diferentes: los aparatos electr¨®nicos y lectores de vuelo pueden verse afectados.

Brasil descarta que el aparato se desintegrara en el aire

Seg¨²n el diario franc¨¦s, este hecho, sumado a la lectura de los mensajes autom¨¢ticos enviados en escasos minutos por el avi¨®n poco despu¨¦s de entrar en la tormenta, desde las 4.10 a las 4.14 (hora peninsular espa?ola), indican que el Airbus se desintegr¨® en el aire. Por entonces, la tormenta, con nubes altas cargadas de electricidad, ven¨ªa zarandeada por vientos de m¨¢s de 160 kil¨®metros por hora, seg¨²n los sat¨¦lites meteorol¨®gicos.

La traducci¨®n de esos mensajes lleva a una hip¨®tesis sobrecogedora. El primero de ellos indica que el avi¨®n desconecta el piloto autom¨¢tico al tiempo que reduce velocidad; los siguientes indican un fallo en serie de los sistemas inform¨¢ticos centrales y una "velocidad vertical", lo que significar¨ªa que en ese momento el avi¨®n empieza a caer en picado. La posterior e inevitable despresurizaci¨®n de la cabina ser¨ªa causa o consecuencia de una explosi¨®n.

Los medios franceses parecen inclinarse por la teor¨ªa de la desintegraci¨®n del avi¨®n en pleno vuelo. Adem¨¢s de los mensajes citados, aportan otra prueba: la dispersi¨®n de los restos encontrados.

Sin embargo, el Ministerio de Defensa brasile?o se?al¨® que, a su juicio, las enormes manchas de queroseno aparecidas en la zona de rastreo indicar¨ªan todo lo contrario: el avi¨®n, sin control, se estamp¨® contra el oc¨¦ano, pulveriz¨¢ndose al estrellarse contra el agua. Si hubiera explotado en el aire, el queroseno se habr¨ªa volatilizado.

Mientras tanto, los aviones y los barcos, brasile?os y franceses, siguen rastreando los restos del avi¨®n en una zona acotada de unos 6.000 metros cuadrados. El Ej¨¦rcito brasile?o asegura haber avistado objetos personales de algunos pasajeros. Y a?ade que, en caso de encontrar alg¨²n cad¨¢ver, la prioridad ser¨ªa la de trasladarlo a tierra firme. Ayer por la tarde, la Marina brasile?a anunci¨® que comenzaba a recoger, por fin, los primeros restos. Pronto ser¨¢n estudiados. Se trata de una pieza de 2,5 metros cuadrados utilizada para la acomodaci¨®n de la carga en el avi¨®n y dos boyas pertenecientes al Airbus de Air France. Los objetos fueron avistados a 550 kil¨®metros de la isla de Fernando de Noronha.