La inversi¨®n extranjera en los pa¨ªses en desarrollo cae un 70%
El Banco Mundial alerta de un repunte del paro en Asia
No hay liquidez; apenas hay cr¨¦dito. Las empresas espa?olas llevan meses quej¨¢ndose de ese c¨ªrculo vicioso que ha transformado la peor crisis financiera de los ¨²ltimos ochenta a?os en una recesi¨®n profunda y dolorosa. Pero siempre hay alguien que est¨¢ peor: el Banco Mundial advierte del desplome sin precedentes de los flujos de capital a los pa¨ªses en desarrollo: de los 850.000 millones de euros de 2007 se pas¨® en 2008 a 505.000 millones. Y este a?o se cerrar¨¢ con una inversi¨®n de 260.000 millones, seg¨²n las proyecciones de la instituci¨®n que preside Robert Zoellick.
Es una ca¨ªda del 70% en s¨®lo dos a?os: ni la crisis latinoamericana de los ochenta del siglo pasado ni la crisis asi¨¢tica a finales de los noventa golpearon as¨ª a las regiones emergentes. El batacazo de la inversi¨®n extranjera en los pa¨ªses en desarrollo tendr¨¢ "graves consecuencias", seg¨²n el Banco Mundial. En varios planos: desde el riesgo de quiebra en los pa¨ªses m¨¢s d¨¦biles al impacto sobre los mercados de valores y de renta fija, con los bonos p¨²blicos en el disparadero justo cuando los d¨¦ficit estatales se multiplican.
"Los pa¨ªses en desarrollo podr¨ªan convertirse en una fuerza clave en la futura recuperaci¨®n, pero para ello deben restablecerse las inversiones con el apoyo internacional", asegur¨® a este diario Mick Riordan, economista del Banco Mundial y uno de los autores del estudio Financiaci¨®n para el desarrollo 2009: los derroteros de la recuperaci¨®n.
Los derroteros que cita el informe est¨¢n a¨²n por definir: el Banco Mundial estima que el PIB global caer¨¢ el 2,9% este a?o, en lo que supone la primera contracci¨®n desde la II Guerra Mundial. El comercio mundial descender¨¢ un 10%, una tasa desconocida en d¨¦cadas. Los pa¨ªses en desarrollo apenas crecer¨¢n el 1,2% en 2009, muy lejos de las cifras de los ¨²ltimos a?os. Y si no se cuenta a China e India, el mundo en desarrollo no escapa a la recesi¨®n, con un retroceso del 1,6% que arrastrar¨¢ a miles de personas a la pobreza. Con esos mimbres, la crisis social est¨¢ a la vuelta de la esquina: el desempleo lleva meses aumentando en los pa¨ªses industriales, "y seguir¨¢ una trayectoria similar en las econom¨ªas exportadoras de Asia", advirti¨® Riordan.
El estudio aporta datos preocupantes para los pa¨ªses pobres. En algunas naciones las multinacionales han empezado a repatriar grandes sumas procedentes de su inversi¨®n directa, algo que ya ocurri¨® en la crisis asi¨¢tica, cuando algunas empresas norteamericanas repatriaron el 100% de lo que hab¨ªan invertido. Varias instituciones financieras ya han hecho lo mismo: AIG y Citigroup, por ejemplo, se han deshecho de filiales en Asia y Am¨¦rica Latina.
La soluci¨®n no parece sencilla: "Esos pa¨ªses dependen en gran medida de los flujos de capital privado procedentes del extranjero, y el colapso de las finanzas ha provocado que multinacionales y grandes bancos se encuentren en problemas y no sean capaces de contribuir en la misma medida", explic¨® Riordan. En el horizonte amenazan nuevas crisis de balanza de pagos, am¨¦n de los problemas derivados de la obligada reestructuraci¨®n de la deuda empresarial en muchos de estos pa¨ªses. La crisis va para largo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.