Baltar ya gasta el doble en personal que la Diputaci¨®n de A Coru?a
Ourense invierte lo mismo en personal que la Diputaci¨®n de Castell¨®n, que triplica su presupuesto - Los sueldos superan en siete millones la inversi¨®n
En la planta principal de la Diputaci¨®n de Ourense, a unos metros del despacho del presidente, Jos¨¦ Luis Baltar, un grupo de conserjes (dos sentados en una misma mesa y dos de pie, por falta de espacio) pasa sin gran cometido su jornada laboral. No hay documentos en las estanter¨ªas ni ordenadores a la vista. Uno de los bedeles traza garabatos imaginarios sobre la madera.
En el edificio Sime¨®n, 33 porteros hacen turnos para atender las tres entradas del contenedor cultural que la instituci¨®n dedica a sala de exposiciones.
Ambas estampas definen bien la pol¨ªtica de personal de la Diputaci¨®n de Ourense que preside el incombustible Jos¨¦ Luis Baltar, a la que acuden diariamente m¨¢s de mil personas (1.100 en este momento, seg¨²n c¨¢lculos de la oposici¨®n) que perciben mensuamente de ella sus salarios. El porcentaje que dedica a pagar las n¨®minas, el 35% del presupuesto, es el doble de lo que gasta en el mismo cap¨ªtulo la Diputaci¨®n de A Coru?a.
La principal f¨¢brica en n¨²mero de empleos en la provincia, tras Coren, arrastra una deuda que roza el l¨ªmite legal (67,3 millones de euros de un presupuesto de 86 millones) aunque Baltar sigue contratando masivamente pese a la escasez de puestos y cometidos en interminables convocatorias de oposiciones.
Casi siempre en periodo electoral, las pruebas acaban favoreciendo a personas vinculadas a su propio partido o a su entorno familiar.La Diputaci¨®n de Ourense destina a pagar a su personal el 35% de todo su presupuesto. El caso no tiene parang¨®n en Galicia. El organismo que preside el todopoderoso Baltar gasta pr¨¢cticamente el doble que la que preside el socialista Salvador Fern¨¢ndez Moreda en A Coru?a (invierte en el mismo cap¨ªtulo el 18,20% de sus fondos) y bastante m¨¢s que la de Pontevedra, tambi¨¦n con presidente del PP, que dedica un 20,72% a este apartado o la de Lugo, donde el bipartito emplea el 24,87% del presupuesto en pagar las n¨®minas.
La peculiar pol¨ªtica de recursos humanos de la instituci¨®n orensana engulle uno de cada tres euros y por supuesto tambi¨¦n la principal partida de gasto: 29,4 millones, incluido el del Instituto Ourens¨¢n de Desenvolvemento Econ¨®mico (Inorde).
Para encontrar un caso similar en Espa?a, hay que buscarlo en Castell¨®n, el feudo de Carlos Fabra, donde la Diputaci¨®n invierte una cifra similar en personal, 29 millones, pero dentro de unas cuentas, 170 millones, que duplican a las de su compa?ero de partido. Seg¨²n el ¨²ltimo censo actualizado en enero de 2008, la Diputaci¨®n de Castell¨®n atiende a 594.915 personas. La de Ourense, s¨®lo a 336.099.
Pese a que Fabra es el paradigma del enchufismo (¨¦l mismo se ha jactado p¨²blicamente de no saber a cu¨¢nta gente emplea en una conversaci¨®n telef¨®nica grabada que revela los m¨¦todos clientelares de contrataci¨®n que utiliza), la plantilla de la Diputaci¨®n de Castell¨®n, incluidos sus organismos aut¨®nomos y patronatos, es de 605 personas seg¨²n consta en sus presupuestos de este a?o.
La Diputaci¨®n de Ourense duplica esa cifra. Paga menos pero a mucha m¨¢s gente. Aunque s¨®lo 600 trabajadores son funcionarios, el resto es personal contratado que depende de sus oposiciones para conseguir un empleo definitivo. Esto es, seg¨²n Bloque y PSdeG, lo que la diferencia del resto de diputaciones de Espa?a en donde las contrataciones "son puntuales".
En Ourense hijos, mujeres y parientes de alcaldes de la provincia, cuando no ellos mismos, trabajan para la Diputaci¨®n. La "red clientelar" que sistem¨¢ticamente denuncia la oposici¨®n, es, a la vista de los presupuestos, la principal raz¨®n de ser de la instituci¨®n. Al poco de llegar al Ayuntamiento de Ourense, el alcalde Francisco Rodr¨ªguez, descubri¨® con sorpresa que algunos de los empleados de la Diputaci¨®n hab¨ªan buscado acomodo en la casa consistorial, ante la falta de espacio en la Diputaci¨®n. Como tampoco el Ayuntamiento ten¨ªa mesa para todos, idearon un sistema de sillas calientes. Y as¨ª, mientras unos ocupaban la oficina, otros aprovechaban para hacer recados.
El dinero que Baltar emplea en pagar n¨®minas supera casi en 7 millones la cantidad (22,8 millones) consignada en los presupuestos de este a?o a "inversiones reales". As¨ª, las cosas hace muchos a?os que la Diputaci¨®n de Ourense no anuncia una carretera nueva.
Sus cuadrillas, las que Baltar ofrece en los m¨ªtines a los paisanos para bachear todo lo que haga falta -siempre que voten al PP-, se emplean en lavar la cara a algunas carreteras secundarias. Al ritmo que acometen los trabajos, la oposici¨®n ha calculado que tardar¨ªa aproximadamente 110 a?os en parchear su red de infraestructuras.
Para planes provinciales, objetivo b¨¢sico de las diputaciones (junto con el apoyo a los ayuntamientos m¨¢s d¨¦biles), este a?o se ha destinado una partida exigua, de 5,2 millones de euros.
En lo que respecta a otro de los fines de estos organismos, el apoyo que ofrece a los ayuntamientos m¨¢s peque?os sin capacidad para contratar personal es de 42.000 euros anuales a cada uno. La Diputaci¨®n desembolsa el 37%%, 16.000 euros los aporta el Ministerio para las Administraciones P¨²blicas y los 9.500 restantes, cada municipio. El de Lobeira no pudo acceder este a?o al plan provincial. No dispon¨ªa de los 9.500 euros necesarios.
No hay dinero para inversiones, pero Baltar reparte "sin control t¨¦cnico y bajo su propio criterio", subvenciones a asociaciones y particulares por m¨¢s de 2 millones de euros.
Los aspirantes a estas ayudas hacen cola un d¨ªa a la semana en la antesala del despacho del presidente en espera de la d¨¢diva. Es la jornada de m¨¢s tarea para los conserjes que deben ordenar los turnos. Luego Baltar firma esas concesiones discrecionales "sin que el demandante presente un programa o figure en un registro de asociaciones", seg¨²n denunci¨® el BNG.
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