Reinventando a Lope de Vega
Poco tiene que ver el magn¨ªfico despliegue que Stratford-upon-Avon dedica a William Shakespeare, en una casa natal del escritor atractiva, did¨¢ctica y multimedia en aquel pueblecito ingl¨¦s, con la austeridad y un m¨¦todo rancio de explicaci¨®n del museo de F¨¦lix Lope de Vega (Madrid, 1562-1635), en pleno centro de la capital, y donde este genio del teatro espa?ol vivi¨® sus ¨²ltimos 25 a?os. Sin duda, esta comparaci¨®n entre dos centros culturales ejemplifica la distinta pasi¨®n por la tradici¨®n teatral de brit¨¢nicos y espa?oles. No en vano, mientras la Royal Shakespeare fue fundada en 1879, Espa?a no cont¨® con una aut¨¦ntica Compa?¨ªa Nacional de Teatro Cl¨¢sico (CNTC) hasta los a?os ochenta del siglo pasado. No obstante, actores, directores, estudiosos, instituciones p¨²blicas y, por supuesto, los aficionados intentan compensar ese retraso. Una buena prueba de esa puesta al d¨ªa, de esa reinvenci¨®n de los cl¨¢sicos, la encontramos en la multitud de espect¨¢culos, versiones y montajes que celebrar¨¢n durante este verano el 400? aniversario de la publicaci¨®n del Arte nuevo de hacer comedias, una obra con la que Lope revolucion¨® el teatro de su tiempo y puso los cimientos de la dramaturgia del Siglo de Oro.
"Fue un cazador de tendencias que supo ganarse al p¨²blico y que combin¨® calidad y ¨¦xito", dice Antoni Tordera
Por los festivales de teatro cl¨¢sico de Alcal¨¢ de Henares, C¨¢ceres, Almagro, Olite, Olmedo, Chinchilla, Niebla y Almer¨ªa, entre otros, desfilan cinco Fuenteovejuna, dos El perro del hortelano, adem¨¢s de La estrella de Sevilla, El caballero de Olmedo, La viuda valenciana, La dama boba y otros montajes con textos casi desconocidos del F¨¦nix y de una inusitada belleza como ?De cu¨¢ndo aca nos vino?, que pone en pie la CNTC el pr¨®ximo fin de semana en Almagro.
"Lope de Vega", se?ala Antoni Tordera, catedr¨¢tico de Historia del Teatro, "rompe con las tres unidades cl¨¢sicas de acci¨®n, tiempo y lugar, pero adem¨¢s mezcla de una forma magistral lo tr¨¢gico y lo c¨®mico. Por encima de todo, Lope fue lo que hoy llamar¨ªamos un cazador de tendencias que supo ganarse al p¨²blico y que combin¨® la calidad con el ¨¦xito en sus piezas teatrales. Nunca perdi¨® de vista al p¨²blico hasta el punto de que lanz¨® comentarios del estilo de que la c¨®lera del culo del espa?ol sentado no resist¨ªa funciones de m¨¢s de dos horas. Lope habr¨ªa sido en nuestros d¨ªas un estupendo guionista de cine, de pel¨ªculas de estructura r¨¢pida y amena". Ese car¨¢cter irreverente de Lope explica, en opini¨®n de muchos historiadores de la escena, que haya sido menos representado que Calder¨®n de la Barca, que ha simbolizado siempre una Espa?a cat¨®lica y conservadora. En opini¨®n de Manuel Fern¨¢ndez ?lvarez, un experto en los siglos XVI y XVII, "Lope es muy representativo de su ¨¦poca. Se comporta casi como un m¨ªstico, que sufre remordimientos de conciencia y que, en su madurez, se ordena como sacerdote. Por otro lado, es un pecador que vive los placeres de la vida. Lope es un personaje t¨ªpico de la Espa?a del Siglo de Oro y esas profundas contradicciones se notan tanto en su poes¨ªa como en su teatro".
Desde la experiencia que le otorga ser uno de los pocos hombres de teatro que conjuga la universidad con la gesti¨®n del festival medieval de Elche, y con la direcci¨®n esc¨¦nica, Tordera destaca que en Lope aparecen totalmente entremezcladas su vida y sus obras. "Se cas¨® dos veces y tuvo infinidad de amantes, muchas de ellas fueron actrices, de tal forma que escribi¨® muchos dramas para estas int¨¦rpretes. Isabel de Urbina, su primera esposa, ha pasado a la historia como Belisa, y Marta de Nevares, su ¨²ltimo amor, como Amarilis o Marcia Leonarda".
Hijo de un humilde bordador y de una mujer del pueblo, Lope de Vega se revel¨® como un genio precoz que pudo estudiar en Alcal¨¢ de Henares. Soldado en algunas campa?as militares, protegido de nobles como el duque de Sessa, el escritor sufri¨® destierros y penurias hasta que logr¨® triunfos memorables en la escena que le permitieron pasar una madurez digna y comprar en 1610 por 9.000 reales -una peque?a fortuna para la ¨¦poca- su casa en el centro de Madrid, a unos centenares de metros de la plaza Mayor. Catorce hijos, entre leg¨ªtimos e ileg¨ªtimos, tuvo Lope de Vega aunque en sus ¨²ltimos a?os vio morir a varios de ellos. Estas peripecias, aventuras, desdichas y placeres no s¨®lo no perjudicaron al que t¨®picamente se califica de "f¨¦nix de los ingenios", sino que le sirvieron de material literario de primer orden, de diamantes narrativos en bruto que despu¨¦s pasaban por las tablas de un escenario. Se jactaba el autor de El perro del hortelano de escribir una comedia en una noche y la fantasmada no debi¨® estar muy alejada de la realidad en un autor que dej¨® escritos unos tres mil sonetos, unas cuatrocientas comedias y tres novelas m¨¢s algunas epopeyas y poemas did¨¢cticos.
Junto a todo ello est¨¢ ese texto te¨®rico de nueve p¨¢ginas, cuya publicaci¨®n en 1609 se celebra este a?o, y que se han atrevido a montar Laila Ripoll y Manuel Llorente con su grupo Micomic¨®n, respetando el t¨ªtulo original: El arte nuevo de hacer comedias en este tiempo. "El director de cl¨¢sicos en Alcal¨¢ nos ret¨® a montarla y como somos lopemaniacos nos hemos embarcado", se?ala Ripoll, quien se enfrenta al octavo montaje de este autor. "Es un vicio como otro cualquiera, a unos les gustan las pipas y a nosotros Lope, gracias a Josefina Garc¨ªa Ar¨¢ez, profesora de la RESAD". En su montaje han a?adido canciones y fragmentos de obras de Lope: "Hemos intentado hacer algo muy divertido y en este texto se explica muy bien lo que tiene Lope que no tengan los dem¨¢s: humor, picard¨ªa y mucha capacidad de comunicaci¨®n", concluye Ripoll.
Teatro Corsario, la compa?¨ªa decana en Espa?a dedicada a teatro cl¨¢sico, se atreve con El caballero de Olmedo, que estrenar¨¢ en esa villa. "Esta obra deber¨ªa estar programada siempre en el Festival de Olmedo", explica el director Fernando Urdiales, "aunque fuera en ruso o en chino. Es una de las mejores de Lope y del Siglo de Oro, una tragicomedia peculiar, que Garc¨ªa Lorca redescubre y recupera con La Barraca, porque los dos siglos anteriores se presentaba s¨®lo como comedia o m¨¢s bien una parodia".
En este a?o marcadamente lopista la CNTC ha optado por dos t¨ªtulos, ni consolidados, ni obvios. La estrella de Sevilla, cuya autor¨ªa hay quien pone en duda y que se ha convertido en un ¨¦xito de la CNTC, y ?De cu¨¢ndo ac¨¢ nos vino?, una comedia deliciosa, inteligente y, lo que la hace a¨²n m¨¢s atractiva, totalmente desconocida. Eduardo Vasco, director de la CNTC, ha convocado para su puesta en escena a Rafael Rodr¨ªguez, un director solvente y conocedor de los cl¨¢sicos, pero que sale muy pocas veces de Canarias a dirigir. Adem¨¢s La Joven, como ya todo el mundo llama a la compa?¨ªa que la CNTC ha creado con profesionales j¨®venes pero de s¨®lida formaci¨®n, se ha especializado en Lopes. Pocos directores en Espa?a son m¨¢s lopistas que Eduardo Vasco, quien sostiene, sin temblarle la voz, cuando se le pregunta por la imaginaria pugna entre el autor madrile?o y Shakespeare: "A m¨ª me gusta m¨¢s Lope, de haber vivido en una sociedad m¨¢s abierta y con una religi¨®n reprimiendo menos, hubiera sido menos Lope, porque no se hubiera tenido que buscar tanto las vueltas para vivir de una manera y contarlo de otra. Lo cierto es que se puede dudar si Shakespeare existi¨®. De Lope no hay dudas. Pero del ingl¨¦s con esa cosa tan et¨¦rea se ignoran demasiadas cosas".
Actores muy curtidos en cl¨¢sicos, como Joaqu¨ªn Notario y Pepa Pedroche, destacan de Lope que "parece que naci¨® hablando lo que escribi¨®, tiene un lenguaje fluido, da una enorme facilidad". "Pero ello no le resta belleza, gracias a su maravillosa po¨¦tica", comenta Pedroche, que destaca que concede mucha libertad a los personajes femeninos. "Permite inventarte el personaje, crear, te da la acci¨®n y las armas para que t¨² hagas tu trabajo", explica Pedroche. Entretanto, Notario comenta que "es alucinante c¨®mo escribe y c¨®mo nos hace hablar, sus estructuras, sobre todo en comedias, son de una perfecci¨®n incre¨ªble, otros como Calder¨®n o Shakespeare se adentran en la reflexi¨®n, en la acci¨®n interior y Lope sit¨²a al espectador, al actor, ante los hechos, algunos bestiales, sus barbaridades son fant¨¢sticas", se?ala el actor, que como su compa?era no conoc¨ªa ?De cu¨¢ndo ac¨¢ nos vino?: "?Por Dios!, ?d¨®nde estaba escondida?", dicen de esta comedia en la que una madre y una hija se disputan el amor de un gal¨¢n y fue la base para El hijo fingido, de Joaqu¨ªn Rodrigo, de la misma manera que La discreta enamorada dio lugar a la zarzuela Do?a Francisquita.
?De cu¨¢ndo ac¨¢ nos vino? ha salido ahora a la palestra por esas charlas de caf¨¦ sobre repertorio cl¨¢sico que mantienen Vasco y Rafael P¨¦rez Sierra, uno de los grandes conocedores del teatro cl¨¢sico en nuestro pa¨ªs y poseedor del ¨²nico Goya otorgado a un gui¨®n basado en una obra de Lope de Vega. Lo obtuvo, junto con la directora Pilar Mir¨®, por su trabajo en El perro del hortelano, ¨²ltima pel¨ªcula de la conocida realizadora.
"Lope no se atiene a una forma cristalizada, a una f¨®rmula concreta, no siempre es ordenado y estructurado como Calder¨®n, pero le gana en vida, mientras que a Shakespeare le gana en hilaridad, su vitalidad es desbordante, por eso es dif¨ªcil encasillar sus obras en un g¨¦nero", se?ala P¨¦rez Sierra.
Festival de Almagro. Del 2 al 26 de julio. www.festivaldealmagro.com
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