El Banco de Espa?a apremia a grandes cajas para que acometan fusiones
El supervisor plantea el nuevo mapa del sector en una reuni¨®n con la ejecutiva de la CECA - Las entidades compradoras ser¨¢n las mayores y las m¨¢s solventes
Los responsables del Banco de Espa?a, en una reuni¨®n con la comisi¨®n ejecutiva de la Confederaci¨®n Espa?ola de Cajas de Ahorros -la CECA, la patronal de las cajas-, sondearon hace dos semanas a sus componentes sobre la disposici¨®n de las entidades en mejor situaci¨®n para quedarse con otras que presenten dificultades o, en todo caso, sean de menor tama?o. La comisi¨®n ejecutiva la forman el presidente de la CECA, Juan Ram¨®n Quint¨¢s; el director general, Juan Antonio Olavarrieta; los vicepresidentes (Isidro Fain¨¦, presidente de La Caixa; Miguel Blesa, de Caja Madrid; Jos¨¦ Luis Olivas, de Bancaja, y Braulio Medel, de Unicaja), y el secretario general, Carlos Egea.
El mensaje del Banco de Espa?a fue di¨¢fano, aunque, seg¨²n fuentes conocedoras de las negociaciones, no puso ning¨²n nombre sobre la mesa: ni de los potenciales compradores ni de las entidades eventualmente absorbidas. No fue una orden, pero todos lo entendieron. Las recomendaciones del Banco de Espa?a suelen convertirse en mandatos. Se trata de adelantar el proceso de integraci¨®n que se avecina y que qued¨® consagrado el viernes con la aprobaci¨®n del Fondo de Reestructuraci¨®n Ordenada Bancaria (FROB) por parte del Consejo de Ministros. El texto del FROB dice que entre las entidades "peque?as y medianas" hay "algunas que podr¨ªan ver comprometida su viabilidad en los pr¨®ximos meses". Aunque no lo se?ala espec¨ªficamente, se dirige especialmente a las cajas, que despu¨¦s de un proceso m¨¢s o menos largo quedar¨¢n reducidas dr¨¢sticamente desde las 45 que hay actualmente.
El proceso de fusiones se va a precipitar durante los pr¨®ximos meses
El Fondo otorga al Banco de Espa?a capacidad para controlar las operaciones de fusi¨®n o para la adquisici¨®n de participaciones significativas. En el caso de que las entidades implicadas sean cajas de ahorros, la instituci¨®n reguladora deber¨¢ solicitar informe de la comunidad aut¨®noma correspondiente, a no ser que sean intervenidas. Esta soluci¨®n salva de una forma elegante el problema del veto de los Gobiernos aut¨®nomos, pese a que ha levantado pol¨¦mica entre los partidos nacionalistas e incluso en algunas comunidades gobernadas por el PSOE, como Andaluc¨ªa y Catalu?a. Cuando sean bancos, el consultado ser¨¢ el Ministerio de Econom¨ªa.
El proceso, que se va a precipitar a lo largo de los pr¨®ximos meses, buscar¨¢ primero la soluci¨®n privada voluntaria, como indica el FROB. Pero si no hay acuerdo y el organismo considera que es necesaria, el Banco de Espa?a forzar¨¢ una fusi¨®n. Las entidades llamadas a llevar la voz cantante ser¨¢n aquellas que tengan una combinaci¨®n satisfactoria entre tama?o y solvencia. Es decir, no por ser grande una caja puede meterse en la adquisici¨®n de otra si su solvencia est¨¢ tocada. Y viceversa: no por ser peque?a, una caja tiene que ser adquirida cuando su solvencia es buena.
No resulta complicado, en esas circunstancias, hacer una baraja de posibles adquirientes. Teniendo en cuenta las cifras de las propias entidades, de las 10 primeras figuran entre las mejor colocadas La Caixa, Unicaja, Ibercaja y la BBK. Entre las cajas medianas que tambi¨¦n entrar¨ªan en el carrusel de compras est¨¢n la Kutxa, Caja Navarra, Cajastur y Caja Murcia. Las primeras podr¨ªan optar a operaciones con grandes, medianas y peque?as, mientras las segundas tienen capacidad ¨²nicamente para otras de su tama?o o inferiores.
El caso de Caja Madrid es peculiar. Est¨¢ llamada a participar en el proceso: tiene capacidad suficiente, aunque su solvencia no es de las mejores, por lo que podr¨ªa optar a fusionarse o absorber una caja mediana, pero no una grande. En una posici¨®n parecida est¨¢ la valenciana Bancaja, tercera del ranking sectorial y partidaria tambi¨¦n de buscar una integraci¨®n fuera de la comunidad a la que pertenece para ganar tama?o, seg¨²n precis¨® recientemente su presidente, Jos¨¦ Luis Olivas, en un seminario en Santander.
El proceso consagra las negociaciones entre cajas de distintas comunidades, con la ¨²nica salvedad apuntada de que los Gobiernos aut¨®nomos deben emitir un informe. En ese sentido, muchas de las grandes cajas miran fuera de su territorio natural a otras entidades grandes o medianas. En ese paquete figuran cajas como Caixa Catalunya, a la que no hacen ascos ninguna de las citadas, especialmente BBK, Ibercaja y Unicaja.
Eso no significa que el resto del sector est¨¦ mal, ni que las cajas no citadas vayan a ser objeto de adquisici¨®n. Muchas de ellas se encuentran ya en negociaciones para integrarse, principalmente de la misma regi¨®n: Caja Duero y Caja Espa?a; Segovia y ?vila; algunas catalanas, que buscan agruparse en dos bloques al margen de La Caixa; probablemente las gallegas Caixa Galicia y Caixanova, las valencianas, y las vascas BBK, Kutxa y Vital.
M¨¢s poder para Salgado y Ord¨®?ez
Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez y Elena Salgado. O tal vez al rev¨¦s. El Fondo para la Reestructuraci¨®n Ordenada Bancaria refuerza el papel del Banco de Espa?a, liderado por Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, en el proceso de fusiones que ya ha empezado a desatarse. La vicepresidenta econ¨®mica, Elena Salgado, lo present¨® as¨ª el pasado viernes tras el Consejo de Ministros. Salgado no dijo una palabra del articulado del decreto ley que define el fondo, y que le otorga un derecho de veto de 10 d¨ªas aun cuando el Banco de Espa?a intervenga una entidad con problemas. El Gobierno niega el derecho de veto de las autonom¨ªas en las cajas intervenidas, pero se asegura la ¨²ltima palabra, por encima del Banco de Espa?a. En otras palabras: se arroga ese derecho de veto con el argumento del uso de fondos p¨²blicos.
El desempleo roza el 18% y sigue escalando. Los beneficios caen. Y la morosidad cuadruplica la de hace 12 meses. El sistema financiero espa?ol ha capeado bien el hurac¨¢n, pero "varias entidades se enfrentan a posibles problemas en los pr¨®ximos meses", se?al¨® el viernes Salgado. El fondo dispondr¨¢ de un m¨¢ximo de 36.000 millones este a?o para solucionar los problemas, y de 99.000 millones a lo largo de todo el proceso de reordenaci¨®n.
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