Internet para combatir el infarto cerebral
Un proyecto acorta el tiempo de tratamiento del ictus
Ocurre a diario: una persona pierde fuerza o sensibilidad en una parte del cuerpo, no le salen las palabras o se le nubla la vista... Siente cierta debilidad en alguna de sus extremidades... y entonces se mete en la cama a ver si se le pasa. ?Lo peor que puede hacer! Porque son estos s¨ªntomas algunos de los m¨¢s evidentes a la hora de "avisar" un infarto cerebral agudo o ictus isqu¨¦mico; una enfermedad que es la segunda causa de muerte entre la poblaci¨®n andaluza (la primera entre las mujeres), la m¨¢s importante en generar alg¨²n tipo de incapacidad y la segunda que m¨¢s demencia provoca. Y, en cifras, el ictus afecta a 16.000 personas cada a?o en esta comunidad, y genera un gasto cercano al 5% del total de los recursos sanitarios.
El ictus genera un gasto cercano al 5% del total de los recursos sanitarios
M¨¦dicos y pacientes se conectan por videoconferencia para dar confianza
El ictus se produce cuando se obstruye un vaso sangu¨ªneo del cerebro. La zona afectada, al quedarse sin riego sangu¨ªneo, morir¨¢ en pocas horas. Cuanto m¨¢s se tarde en eliminar la obstrucci¨®n, m¨¢s graves ser¨¢n las secuelas; a veces el paciente fallece. La estad¨ªstica dice que un tercio de los afectados muere al cabo de un a?o. De ah¨ª la importancia de un diagn¨®stico a tiempo, ya que, si al enfermo se le administra el tratamiento en un plazo m¨¢ximo de cuatro horas y media, es muy probable que pueda regresar a su casa en pocas semanas, y con apenas secuelas.
Pues bien. Para acortar esos tiempos de diagn¨®stico y tratamiento de estos pacientes, el servicio de Neurolog¨ªa del hospital Virgen del Roc¨ªo, junto a los hospitales comarcales de Osuna y Bormujos (Sevilla) y el de Riotinto, en Huelva, han puesto en marcha un programa, -el proyecto Teleictus- que, despu¨¦s de seis meses de pruebas y tras la fase de consolidaci¨®n, "est¨¢ dando unos magn¨ªficos resultados, aunque todav¨ªa no tenemos datos tabulados de los pacientes tratados ni de los resultados", explica Mar¨ªa Dolores Jim¨¦nez, directora de la Unidad de Gesti¨®n Cl¨ªnica de Neurociencias en el Virgen del Roc¨ªo y coordinadora auton¨®mica del programa.
Cuando llega un enfermo con s¨ªntomas, y el m¨¦dico de guardia deduce que puede ser un ictus, activa al instante el dispositivo que prev¨¦ el protocolo del proyecto Teleictus. Al introducir el c¨®digo del enfermo en el ordenador, su NUHS -N¨²mero Unitario de la Historia Sanitaria Andaluza- aparece en pantalla, autom¨¢ticamente, su historia cl¨ªnica digital (HDG), mientras en el servicio de Neurolog¨ªa del Virgen del Roc¨ªo y en m¨®vil de los miembros del equipo suena una alarma que les pone en alerta. Neur¨®logos, m¨¦dico de guardia y paciente se conectan autom¨¢ticamente por videoconferencia. "El hecho de que la conexi¨®n nos permita vernos las caras aumenta la confianza del enfermo en nosotros y, entre los profesionales, la seguridad", explica Antonio Fern¨¢ndez, jefe del servicio de Medicina Interna en el hospital de Bormujos.
Una vez realizadas las pruebas y si el infarto cerebral se confirma, se le administra al paciente fibrinolisis; el f¨¢rmaco que disuelve ese co¨¢gulo. "Este programa permite que en 20 minutos estemos en condiciones de administrarle el tratamiento adecuado", resume Fern¨¢ndez.
Un dato ¨¦ste, "el del tiempo", insiste el m¨¦dico, que cobra capital importancia. Cuanto menos tiempo pase desde que aparecen los s¨ªntomas hasta que se le pone fibrinolisis, mejores ser¨¢n los resultados. Francisco Moniche, m¨¦dico adjunto al servicio de Neurolog¨ªa en el Virgen del Roc¨ªo, recuerda que "esta pauta terap¨¦utica ser¨ªa imposible llevarla a cabo sin Internet y las nuevas tecnolog¨ªas aplicadas a la medicina". Por su parte, Jim¨¦nez, la coordinadora auton¨®mica de este programa, precisa: "Si estos enfermos han de desplazarse hasta el hospital de referencia primero, llegan a urgencias, luego se les diagnostica, se les hacen las pruebas... nos quedamos, pr¨¢cticamente, sin tiempo para recuperarlos".
La confidencialidad, la rapidez y la seguridad en el tratamiento de datos son tres de las variables absolutamente probadas en los ensayos que hasta ahora hemos hecho, comenta Jim¨¦nez. Por otra parte, ¨¦ste es un programa que puede aplicarse en otras ¨¢reas de la medicina; como la anatom¨ªa patol¨®gica, la dermatolog¨ªa, la oncolog¨ªa, la radiolog¨ªa, o para la revisi¨®n de retina en diab¨¦ticos est¨¢ ya funcionando con ¨¦xito.
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