El cr¨ªquet inicia su partido catal¨¢n

?Joan Gamper? A Robert Musih, que naci¨® en la India y vive desde hace cuatro a?os en Barcelona, no le suena este suizo que fund¨® el Bar?a cuando, en 1899, puso un anuncio en un peri¨®dico para encontrar a gente interesada en jugar al f¨²tbol, tan ex¨®tico entonces en Barcelona. Ex¨®tico es hoy en Catalu?a el cr¨ªquet, un deporte popular¨ªsimo en el Reino Unido y sus antiguas colonias. Musih y sus amigos lo practican en su barrio de Hostafrancs, y sus pasos recuerdan a los de Gamper: hace un a?o, fundaron el Catalunya Cricket Club (CCC), que Musih preside y que ha organizado el primer torneo de Catalu?a de esta disciplina.

Tras la final del pr¨®ximo 26 de julio se sabr¨¢ cu¨¢l de los 12 clubes participantes en esta competici¨®n es el primer campe¨®n catal¨¢n de cr¨ªquet. Pero m¨¢s all¨¢ de esto, el trofeo, cuyas primeras eliminatorias se celebraron el pasado fin de semana, pretende demostrar que el cr¨ªquet en Catalu?a ya no s¨®lo est¨¢ presente en las calles de barrios como el Raval, donde lo practican los hijos de inmigrantes paquistan¨ªes e indios: ya hay dos decenas de clubes organizados y algunos rondan los 60 socios.

Las dos decenas de clubes existentes no tienen campos donde jugar

Los participantes en el torneo, b¨¢sicamente paquistan¨ªes, indios y bengal¨ªes, explican que no s¨®lo en Catalu?a se extiende el cr¨ªquet gracias a la inmigraci¨®n. Tambi¨¦n en otros pa¨ªses se nota la tendencia, explica Richard Thompson, un ingl¨¦s que juega en el Barcelona International Cricket Club, que re¨²ne a brit¨¢nicos, australianos y neozelandeses, entre otros naturales de la Commonwealth asentados en Catalu?a.

De hecho, los primeros en traer el cr¨ªquet a Espa?a fueron los ingleses residentes en la Costa Blanca. De all¨ª son el Javea y el Alf¨¤s, que gan¨® la primera liga espa?ola de cr¨ªquet en 2007.

El Barcelona Cricket Club (BCC) fue semifinalista de la segunda edici¨®n del a?o pasado, cuentan orgullosos sus jugadores. Muchos no saben qui¨¦n es Jos¨¦ Montilla o Artur Mas, pero en sus pantalones lucen, junto al escudo del equipo, un eslogan de la Casa Gran del Catalanisme de Converg¨¨ncia. No s¨®lo los nacionalistas ven este deporte como una forma de acercarse a los nuevos catalanes. "El deporte puede contribuir a mejorar la convivencia", opin¨® el secretario de Inmigraci¨®n de la Generalitat, el republicano Oriol Amor¨®s, en la presentaci¨®n del torneo, que la Administraci¨®n apoya con material y cediendo espacios para su realizaci¨®n.

De hecho, no hay campos de cr¨ªquet en Catalu?a, as¨ª que los que tienen m¨¢s suerte alquilan campos de b¨¦isbol, como el de Montju?c en el que se celebr¨® la primera fase del trofeo. Otros clubes juegan en parques o descampados. Lo hace el Bengali Cricket Club, de Santa Coloma. "Somos inmigrantes, gente pobre, y cuesta comprar el material", explica su presidente, Abdul Hakim.

En el campo de Montju?c, Musih se interesa por el ¨¦xito de Gamper: "?La gente le apoy¨®?", pregunta. La respuesta es obvia a la vista de los ¨¦xitos del Bar?a en la ¨²ltima temporada. "Estar¨ªa bien un triplete en cr¨ªquet dentro de 100 a?os", dice divertido el presidente del CCC. "No, mejor dentro de 30", bromean los jugadores del rival BCC.