Rajoy reclama una reforma laboral aunque no haya consenso

El l¨ªder de la oposici¨®n ha terciado en el debate sobre la reforma laboral. Mariano Rajoy la cree "necesaria" y exige al Ejecutivo que la lleve adelante con o sin los agentes sociales. "Mejor con consenso, pero la falta del mismo -en su caso- no exime al Gobierno de sus responsabilidades", reclam¨® ayer el presidente del PP. Se abre as¨ª un nuevo punto de confrontaci¨®n con el jefe del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, que se ha comprometido a no hacer una reforma laboral si no es con el consenso de empresarios y sindicatos.

Las reformas laborales en Espa?a o, mejor, el intento de llevarlas a cabo sin consenso social, han sido siempre un foco de conflictividad social. De hecho, su m¨¢xima expresi¨®n, la huelga general, siempre ha llegado en ese clima. As¨ª fue en 1988, en 1994 y en 2002. En la primera y en la ¨²ltima ocasi¨®n los Ejecutivos de turno (de Felipe Gonz¨¢lez y de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar) dieron marcha atr¨¢s despu¨¦s de las movilizaciones.

Fern¨¢ndez Toxo y C¨¢ndido M¨¦ndez se reunir¨¢n ma?ana con el Ejecutivo

El debate sobre la reforma laboral est¨¢ de moda. Manifiestos y declaraciones se suceden. Pocos faltan por pronunciarse. Lo han hecho sindicatos y empresarios; tambi¨¦n, el Banco de Espa?a, el Gobierno, acad¨¦micos...

Ayer, en el IX Encuentro Financiero, organizado por Caja Madrid y EL PA?S, le toc¨® el turno a Rajoy: "La evoluci¨®n del mercado de trabajo muestra que es necesaria su reforma. Es imprescindible abordar cuestiones como la dualidad, la formaci¨®n profesional, el absentismo laboral, la eficiencia en la cobertura de vacantes y la negociaci¨®n colectiva".

No es la ¨²nica reforma que propone el l¨ªder del PP. Rajoy reclam¨® otras seis: educativa, fiscal, institucional (en referencia a la justicia), energ¨¦tica, administrativa y de mercado (para reforzar su unidad). Con ellas, el PP pretende que la econom¨ªa espa?ola gane en competitividad.

Pero el l¨ªder de la oposici¨®n no dio m¨¢s pistas sobre su propuesta laboral. Adem¨¢s, evit¨® entrar en el punto m¨¢s pol¨¦mico de la tra¨ªda y llevada reforma laboral: el coste del despido.

No lo eludi¨® Xavier Sala i Mart¨ª. Fiel a su esp¨ªritu provocador, que comienza por su atuendo (ayer vest¨ªa una americana naranja butano), el profesor de Econom¨ªa de la Universidad de Columbia concluy¨®: "Facilitar el despido ahora [en pleno crecimiento del paro] ser¨ªa un error. Es moralmente corrupto decirlo ahora". Aunque s¨ª admiti¨® que hay que hacerlo m¨¢s adelante, cuando la coyuntura cambie. La reforma laboral tambi¨¦n estuvo en la boca del gobernador del Banco de Espa?a. En el mismo foro, Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez reclam¨® reformas estructurales para afrontar la crisis, entre ellas la del mercado laboral.

La demanda de una reforma laboral de Rajoy, consensuada o no, llega cuando la tensi¨®n en el di¨¢logo social se ha disparado. Las discrepancias entre sindicatos y empresarios se han agravado tanto que el anhelado pacto social con nuevas medidas anticrisis -no con una reforma del mercado de trabajo en sentido amplio- antes de agosto est¨¢ a punto de fracasar. Y el Ejecutivo se ha visto obligado a convocar a empresarios y sindicatos por separado: hoy se ver¨¢ con los primeros, y ma?ana por la ma?ana, antes de la reuni¨®n tripartita, lo har¨¢ con los secretarios generales de UGT y CC OO, C¨¢ndido M¨¦ndez e Ignacio Fern¨¢ndez Toxo.

Uno de los puntos en que la brecha entre sindicatos y empresarios es mayor ata?e a la rebaja de las cotizaciones sociales. En el IX Encuentro Financiero, el secretario de Estado de la Seguridad Social y responsable de econ¨®mica del PSOE, Octavio Granado, rechaz¨® la demanda de la CEOE de recortar cinco puntos de las cuotas de las empresas. Esta medida supondr¨ªa una ca¨ªda en la recaudaci¨®n de m¨¢s de 16.000 millones de euros. "No creo que sea necesario que para que las empresas salgan de la crisis econ¨®mica entre en crisis el sistema espa?ol de protecci¨®n social", aleg¨®.