Clinton apoya la mediaci¨®n de ?scar Arias en la crisis de Honduras

EE UU se convirti¨® ayer en el epicentro de los esfuerzos diplom¨¢ticos para zanjar la crisis hondure?a. El destituido presidente Manuel Zelaya se reuni¨® con la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, en lo que supone el encuentro de mayor nivel hasta el momento con la Administraci¨®n Obama. A la salida de la reuni¨®n, Clinton declar¨® que exist¨ªa un entendimiento entre todas las partes para "evitar la violencia" y dijo haber recomendado a Zelaya hacer todo lo posible para evitar una situaci¨®n como la vivida el domingo, cuando el mandatario sobrevol¨® el pa¨ªs. Los disturbios causaron un muerto.

"Tiene que haber un mejor camino", manifest¨® Clinton a las puertas del Departamento de Estado en Washington, mientras Zelaya permanec¨ªa en el interior. "Instamos a todas las partes a evitar actos de violencia y a buscar una soluci¨®n constitucional pac¨ªfica y duradera a las serias divisiones de Honduras a trav¨¦s del di¨¢logo", declar¨® Clinton. Insisti¨® en que hab¨ªa llegado la hora de iniciar "el di¨¢logo" y manifest¨® su apoyo a que el presidente costarricense y premio Nobel de la Paz, ?scar Arias, sea el mediador. El arbitraje de Arias ha sido aceptado tanto por el Gobierno de hecho de Roberto Micheletti como por Zelaya. Seg¨²n dijo la m¨¢xima representante de la diplomacia estadounidense, las negociaciones se realizar¨¢n en Costa Rica pero no dio fecha de inicio.

Horas antes de la entrevista, un alto funcionario de la Administraci¨®n Obama declar¨® que una opci¨®n era tratar de forjar un compromiso entre Zelaya, el presidente interino Micheletti y las Fuerzas Armadas para que el depuesto mandatario pudiera retornar y terminar los seis meses de Gobierno que le quedan con poderes limitados y claramente definidos. A cambio, Zelaya abandonar¨ªa sus aspiraciones de reformar la Constituci¨®n con el fin de lograr la reelecci¨®n. Ayer, tras la reuni¨®n con Clinton, Zelaya dijo que no descartaba un adelanto de las elecciones como posible soluci¨®n a la crisis.

Mientras tanto, en Tegucigalpa, Xiomara Castro, la esposa del presidente Zelaya, que permanec¨ªa escondida desde que los militares secuestraron a su marido y lo expulsaron del pa¨ªs, se puso ayer al frente de una gran manifestaci¨®n de condena al golpe de Estado. En un momento de la marcha, los manifestantes se toparon con una barrera de polic¨ªas que hab¨ªa recibido la orden de no dejarlos pasar. La multitud los dej¨® a un lado sin que se produjeran enfrentamientos y la primera dama se acerc¨® a ellos para abrazarlos y agradecerles su actitud pac¨ªfica.

No fue la ¨²nica manifestaci¨®n que ayer recorri¨® las calles de Tegucigalpa. Los partidarios del Gobierno de facto tambi¨¦n hicieron notar su fuerza y volvieron a ocupar el Parque Central. La noticia m¨¢s comentada tanto en una como en otra marcha fue la propuesta formulada ayer mismo por el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Jorge Rivera: "El Congreso podr¨ªa conceder una amnist¨ªa a Manuel Zelaya por los delitos de que se le acusa y as¨ª ¨¦l podr¨ªa volver al pa¨ªs sin temor a ser detenido". El intento de apaciguar el ambiente no sent¨® bien en ninguna de las orillas.