Saura sugiere reformar la Carta Magna si se recorta el Estatuto

Poco a poco, los partidos que integran el Gobierno catal¨¢n van destapando sus cartas sobre qu¨¦ tendr¨¢n que hacer si el Tribunal Constitucional (TC) introduce modificaciones de fondo al Estatuto de Catalu?a, posibilidad que hace s¨®lo un a?o ni se consideraba -al menos en p¨²blico- y constitu¨ªa un tab¨², pero sobre la que, con cuentagotas, los socios del tripartito han ido respondiendo. Si hace unos d¨ªas el presidente de la Generalitat, Jos¨¦ Montilla, advert¨ªa de que un recorte estatutario podr¨ªa incluso romper la convivencia en Catalu?a, ayer fue su socio de Iniciativa per Catalunya, Joan Saura, quien traz¨® su hoja de ruta.

Seg¨²n el consejero de Interior y Relaciones Institucionales, mutilar el Estatuto representar¨ªa tener que "rehacer" el pacto pol¨ªtico entre Espa?a y Catalu?a que supuso consensuar el texto catal¨¢n. Y esto supondr¨ªa que los Gobiernos espa?ol y aut¨®nomo volvieran a sentarse para negociar punto a punto, un nuevo pacto que podr¨ªa incluso implicar, dijo, una reforma constitucional. Saura hizo estas declaraciones durante la entrega del Premio Josep Maria Vilaseca del Instituto de Estudios Auton¨®micos, que reconoce a acad¨¦micos que destacan por sus estudios en torno al federalismo o las autonom¨ªas.

Montilla tambi¨¦n rompi¨® recientemente, en junio, el silencio sobre qu¨¦ pasar¨ªa si el Constitucional objetara el Estatuto. Y curiosamente tambi¨¦n lo hizo en el marco de un acto relacionado con el mundo acad¨¦mico, en este caso del Instituto de Derecho P¨²blico. Montilla record¨® como Saura que la carta auton¨®mica es fruto de "un pacto pol¨ªtico" y alert¨® del riesgo de involuci¨®n. "Hoy es imposible la marcha atr¨¢s, a riesgo de romper la convivencia y el pacto constitucional", dijo, y apunt¨® la posibilidad de que el Estado auton¨®mico "evolucione" hacia uno de car¨¢cter federal. As¨ª, afirm¨®: "El siguiente paso deber¨ªa ser la reforma constitucional".

El tercer socio del tripartito que gobierna la Generalitat, ERC aprob¨® en su congreso del a?o pasado una enmienda que defend¨ªa que el Parlament ejerciera de manera unilateral el derecho de autodeterminaci¨®n, v¨ªa refer¨¦ndum, si el Tribunal Constitucional tumbaba el Estatuto y el Gobierno se negaba a negociar con la Generalitat el "derecho a decidir" de los catalanes. La estrategia republicana, matizada una y mil veces por sus dirigentes, consiste en que el Parlament se pronuncie en contra del TC y, llegado el caso, convoque una consulta coincidiendo con las pr¨®ximas elecciones catalanas.

Los puntos que m¨¢s discordia suscitan entre los magistrados del alto tribunal son el cap¨ªtulo ling¨¹¨ªstico, los aspectos de bilateralidad entre los Gobiernos catal¨¢n y espa?ol, y la definici¨®n de Catalu?a como "naci¨®n" en el pre¨¢mbulo del Estatuto.

Desde la oposici¨®n, el PP tambi¨¦n se refiri¨® ayer a la sentencia del Estatuto, aunque lleg¨® a la cuesti¨®n por una v¨ªa distinta. La portavoz popular, Dolors Montserrat, afirm¨® que su partido est¨¢ a la espera de la sentencia para decidir si llevan o no al tribunal la Ley de Educaci¨®n que se aprob¨® la semana pasada. Y precisamente elevar¨ªan el texto a consulta para que dirimiera la cuesti¨®n ling¨¹¨ªstica. Por parte de CiU, no existe una posici¨®n com¨²n sobre la cuesti¨®n. Mientras Uni¨® Democr¨¤tica de Catalunya guarda silencio y defiende la plena constitucionalidad del texto, Converg¨¨ncia plantea, en caso de que se mutile el Estatuto, desde intentar un pacto pol¨ªtico hasta convocar un refer¨¦ndum, en el m¨¢s adverso de los escenarios.