Pop, literatura, p¨®quer y maniqu¨ªs

A finales del pasado mes de mayo, el tabloide brit¨¢nico The Sun lanzaba otro rumor con aspecto de noticia. Kate Moss ya ten¨ªa claro a qu¨¦ se iba a dedicar una vez terminara su carrera como modelo y novia de roqueros con tendencia a ser derrotados por el sistema y sus circunstancias. La de Croydon iba a escribir una novela. Se tratar¨ªa de la historia de una modelo, claro, pero ser¨ªa todo ficci¨®n, obvio. De este modo, Kate segu¨ªa los pasos de su amiga Naomi Campbell, quien en 1994 publicara la novela Swan (Cisne), una obra de ficci¨®n, por supuesto, sobre una modelo a quien unos desalmados chantajeaban con la amenaza de sacar a la luz oscuros secretos de su pasado. Kate, para asegurarse de que su obra no fuera motivo de mofa, hab¨ªa contratado los servicios de una tal Louise Wener. ?Qui¨¦n es ¨¦sa?, se preguntaban los lectores de The Sun y de los blogs sobre celebridades.

"Recuerdo estar taloneando a REM en el estadio de Milton Keynes y que Michel Stipe saliera al escenario despu¨¦s de nuestro concierto y me cantara el feliz cumplea?os ante 70.000 personas que deb¨ªan de preguntarse: Y esa Louise, ?qui¨¦n es?", recuerda Wener, quien a mediados de los noventa lograra cierto ¨¦xito con su banda de britpop Sleeper. El grupo logr¨® colocar un par de discos en el top 5 de las listas brit¨¢nicas y grab¨® una versi¨®n de Atomic de Blondie para la banda sonora de Trainspotting. "En 1997 la banda se separ¨®. Jam¨¢s hab¨ªamos sido un grupo superventas, pero los ¨²ltimos singles ya no hab¨ªan entrado ni en lista de ¨¦xitos. Tras sacarme de la boca el sabor a polla de ejecutivo de sello discogr¨¢fico empec¨¦ a plantearme qu¨¦ hacer con mi vida. Trat¨¦ de grabar algo en solitario, hasta que me di cuenta de que no quer¨ªa volver a hacer m¨²sica". Louise guard¨® las demos de sus temas en solitario, enchuf¨® el ordenador y se puso a escribir. Seis meses despu¨¦s culminaba el borrador de lo que ser¨ªa Goodnight Steve McQueen (Buenas noches, Steve McQueen), su primera novela. Por si acaso, tambi¨¦n se convirti¨® en profesora de p¨®quer, impartiendo lecciones por todo Reino Unido y grabando v¨ªdeos con los principios b¨¢sicos del juego de este juego de cartas. Los giros profesionales de naturaleza poco previsible parecen algo com¨²n entre los ep¨ªgonos del britpop. El bajista de Blur se puso a fabricar quesos, el bater¨ªa se hizo pol¨ªtico y un miembro de Black Box Recorder introdujo la absenta en Reino Unido.

La prosa de Wener ha sido comparada con Nick Hornby y Roddy Doyle. Ha editado tres novelas m¨¢s, escribe con cierta regularidad en The Guardian y dirige un taller de escritura creativa en Brighton, donde reside junto a su pareja (Andy MacLure, antiguo bater¨ªa de Sleeper) y sus dos hijos. "Lo que me gusta de escribir es la privacidad. La contenci¨®n que exige estar solo y trabajar solo. Me encanta la idea de que no debo contar con la opini¨®n de otras cinco personas cada vez que escribo un verso o un estribillo", comentaba Wener antes de verse inmersa en el torbellino medi¨¢tico que conllevan todas las cosas llamadas Moss. La escritora, que una vez expulsada de la gira de la banda Blur por robarles el queso del camerino ("es incre¨ªble, pod¨ªas tomar drogas, beber como un cosaco o hacer la m¨¢s salvaje de las burradas, pero si les tocabas el plato de queso, se liaba una bien gorda"), se niega a confirmar o desmentir la veracidad del rumor que apunta a que se va a pasar los pr¨®ximos meses frente al ordenador esperando a que Kate Moss vuelva de comprar Alka Seltzer.