Gerald Gardner, el sism¨®logo feminista

Hubo un tiempo en que los peri¨®dicos estadounidenses separaban las ofertas de trabajo en dos categor¨ªas: para hombres y para mujeres. En 1973 el Tribunal Supremo consider¨® discriminatoria esta pr¨¢ctica y sentenci¨® en contra de la prensa, que apelaba a la libertad de expresi¨®n para no cambiar un ¨¢pice el dise?o de sus p¨¢ginas. En el juicio resultaron decisivas las pruebas presentadas por Gerald Gardner, matem¨¢tico y geof¨ªsico fallecido el pasado 25 de julio, a los 83 a?os.

Gardner naci¨® en Tullamore, un peque?o pueblo de la campi?a irlandesa, en 1926. Estudi¨® F¨ªsica en el Trinity College de Dubl¨ªn y se mud¨® a Estados Unidos tras ser contratado por el prestigioso Instituto Tecnol¨®gico Carnegie de Pittsburgh, ciudad en la que pas¨® la mayor parte de su vida. All¨ª conoci¨® a Jo Ann Evans, feminista y antirracista, que le ense?¨® a interesarse por otros problemas m¨¢s all¨¢ de los del laboratorio. Cuando se casaron, en 1950, ella decidi¨® llamarse Evansgardner, la fusi¨®n de sus apellidos.

En 1956 Gardner entr¨® en el departamento de investigaci¨®n de la petrolera Gulf Oil y se form¨® como sism¨®logo. Utilizando modelos matem¨¢ticos, intentaba encontrar nuevas reservas de gas y predecir cat¨¢strofes.

Adem¨¢s, Gardner fue uno de los fundadores de la Organizaci¨®n Nacional de Mujeres, asociaci¨®n feminista que en 1969 elev¨® una queja a las autoridades de Pittsburgh. El prop¨®sito era parar los pies al peri¨®dico m¨¢s vendido de la ciudad, The Pittsburgh Press, que, al igual que sus competidores, presentaba en su cuadernillo interior una lista de ofertas laborales separadas por sexos.

El peri¨®dico, respaldado por el resto de la industria, recurri¨® ante los tribunales. Entonces, Gardner entr¨® en acci¨®n. Mediante un an¨¢lisis estad¨ªstico demostr¨® que los trabajos para hombres estaban mucho mejor pagados y, como media, ocupaban cuatro veces m¨¢s espacio. Cuando el caso termin¨® en el Supremo, los jueces no pudieron negar la evidencia y obligaron a toda la prensa del pa¨ªs a publicar las ofertas sin ninguna etiqueta.

En 1980 Gardner abandon¨® a las petroleras y volvi¨® a la universidad. Ense?¨® geof¨ªsica en Houston y, por ¨²ltima vez, volvi¨® a la carga con sus estad¨ªsticas, en el juicio a dos cadenas de supermercados por relegar a sus empleadas a los puestos m¨¢s bajos.