Los Cosmen en el avispero brit¨¢nico

El Reino Unido ha sido un aut¨¦ntico El Dorado para las grandes empresas espa?olas, desde Telef¨®nica a Iberdrola o a Banco Santander. Pero la apuesta por el sector del transporte no ha sido muy positiva, como muestra la experiencia de

Ferrovial con BAA (aeropuertos), que no s¨®lo le ha dado dolores de cabeza. Ahora, otro n¨²cleo empresarial e inversor espa?ol, la familia Cosmen, pretende lanzarse a por todas con una oferta conjunta con CVC sobre National Express, una de las grandes del transporte en autob¨²s y ferrocarril en aquel pa¨ªs y en la que ya es su primer accionista.

Pese a que se especul¨® con otras posibles ofertas sobre National Express, la que parece contar con m¨¢s posibilidades de llevarse el gato al agua es la del consorcio Cosmen-CVC, reconocida por la compa?¨ªa el 23 de julio. Opci¨®n favorecida porque los Cosmen tienen ya el 18,6% del grupo brit¨¢nico y se sientan en su consejo de administraci¨®n (Jorge Cosmen es deputy chairman). De momento, First Group, l¨ªder del sector en el pa¨ªs, se ha retirado de la pugna, y Stagecoach se avendr¨ªa a un acuerdo de reparto de activos con los nuevos accionistas. Otros candidatos como la francesa SNCF o la alemana Deutsche Bahn no han avanzado de momento noticias concretas sobre su inter¨¦s.

La cotizaci¨®n y los malos resultados de la brit¨¢nica abarata su adquisici¨®n

Las turbulencias regulatorias de los aeropuertos pueden repetirse en el tren

Los Cosmen entraron en National Express en el 2005, fecha en que cedieron su imperio espa?ol de autocares y autobuses urbanos, Alsa, al grupo brit¨¢nico. Si bien National Express anunci¨® la operaci¨®n como una compra, los Cosmen la vendieron como la creaci¨®n de un grupo hispano-brit¨¢nico sobre el que ten¨ªan ya entonces ambiciones de control. Lograron mantener cierta autonom¨ªa de gesti¨®n y marca para la divisi¨®n espa?ola, que sigui¨® siendo Alsa, y, si bien empezaron con el 9,9%, fueron adquiriendo t¨ªtulos hasta convertirse en el primer accionista del gigante brit¨¢nico.

Todo indica que los Cosmen han visto en la fuerte crisis que sufre National Express la oportunidad para hacerse con su control. Cuando vendieron Alsa en el 2005 por 381 millones de euros (217 millones en efectivo y 164 millones en acciones), el t¨ªtulo de National Express superaba las ocho libras. Tras el pasado oto?o inici¨® un desplome que lo llev¨® por debajo de las dos libras en abril, posici¨®n que recuper¨® a partir de entonces hasta situarse en las 3,39 del jueves. En el momento de la compra, el 9,9% de National Express se valor¨® en 164 millones de euros. Hoy no vale m¨¢s de 60 o 70 millones.

La recuperaci¨®n burs¨¢til del grupo brit¨¢nico ha sido bastante inferior a la media de las Bolsas, lo que se debe a las dificultades que est¨¢ enfrentando. Ello les permite a los Cosmen y a CVC adquirir la compa?¨ªa casi a precio de saldo, precio que sigue siendo una inc¨®gnita. Hace d¨ªas se filtraba la cifra de 500 millones de libras (580 millones de euros), pero el consejo de National Express considera esa oferta demasiado baja. Ahora se habla de 600 millones (700 millones de euros), que tambi¨¦n le parece baja al consejo.

National Express bien vale el esfuerzo. Es una de las l¨ªderes del sector brit¨¢nico de transporte de pasajeros, tiene posiciones destacadas en EE UU y el liderazgo en Espa?a. Pero tiene muchos frentes de crisis abiertos. En el negocio de autobuses, el que va mejor, se han estancado los ingresos y la compa?¨ªa afronta costes de combustible y pensiones en ascenso. El problema m¨¢s grave est¨¢ en su divisi¨®n de trenes. La compa?¨ªa se ha declarado pr¨¢cticamente incapaz de mantener las operaciones en East Coast, que une Londres con Escocia (17 millones de pasajeros), y honrar el pago comprometido de 1.400 millones de libras al Gobierno, lo que la ha forzado a entregar la concesi¨®n a finales de a?o. Las p¨¦rdidas en esta l¨ªnea han sido tan fuertes (20 millones de libras), que han provocado, junto con las provisiones necesarias para su entrega, buena parte de sus n¨²meros rojos del primer semestre, 48,1 millones de libras. En igual periodo de 2008 hab¨ªa ganado 52,4 millones

La huida de la compa?¨ªa ha provocado un rifirrafe con el secretario de Transportes, Lord Adonis, y la indignaci¨®n de la C¨¢mara de los Comunes. Varios diputados de la comisi¨®n de Transportes han mostrado su irritaci¨®n ante la espantada de National Express, llegando a pedir que se le retiren las otras dos concesiones. Y se?alaron que "es inaceptable que el grupo brit¨¢nico mantenga las otras dos concesiones, despu¨¦s de haberse librado de la East Coast".

Algunos expertos apuntan que esa medida, pese a todo, podr¨ªa ser buena para National Express ya que los trenes, aunque facturaron 628 millones de libras hasta junio, s¨®lo generaron beneficios operativos por 2,5 millones. No parece, sin embargo, que a los Cosmen les interese esa p¨¦rdida. Una de las condiciones para avanzar con la oferta es que las otras dos l¨ªneas sigan en manos de la compa?¨ªa, lo que tendr¨¢ que decidir la secretar¨ªa de transportes. Esta actitud contrasta con el inter¨¦s mostrado por la empresa en reducir su exposici¨®n al ferrocarril para "centrarse en los autobuses".

Al margen de lo que decidan las autoridades, todo indica que el sector de ferrocarriles brit¨¢nicos entra en una fase de turbulencias regulatorias, similar al que se abati¨® sobre Ferrovial en los aeropuertos, lo que podr¨ªa convertir el desembarco de los Cosmen en un pase¨ªllo infernal. Pero, ¨¦ste no es el ¨²nico problema. Pese a que la compa?¨ªa ha logrado reducir su deuda, mediante ventas de activos, ¨¦sta sigue en los 977 millones de libras, una suma que tensa la cuenta de resultados. La deuda es el resultado de un plan de expansi¨®n muy ambicioso. S¨®lo en Espa?a, la compra de Alsa y

Continental Auto (¨¦sta en el 2007) le supuso unos 1.300 millones de euros.

Adem¨¢s de financiar su entrada en National Express, los nuevos accionistas deber¨¢n resolver la refinanciaci¨®n de esa deuda entre 2010 y 2011. Una deuda que la compa?¨ªa no ha dudado en reconocer como "insostenible". Todo lo cual ha llevado a la empresa a reconocer que "no hay seguridad de que al final el consorcio Cosmen-CVC llegue a presentar una oferta por National Express". Cierto o no, hoy los novios parecen decididos. Fuentes cercanas a estos dos grupos, citadas por la prensa brit¨¢nica, han afirmado que "BBVA dirigir¨¢ un sindicato de seis bancos para llevar a cabo la operaci¨®n". Tambi¨¦n est¨¢n en contacto con el Santander para conseguir financiaci¨®n adicional. Al menos se llenan la caja ante lo que pueda venir a suceder.