La nueva direcci¨®n de la OTAN fija como prioridad la guerra afgana
Una bomba contra un convoy policial mata a una docena de civiles en Herat
La OTAN se confirmar¨¢ en Afganist¨¢n como un pilar de la seguridad global al impedir que los talibanes vuelvan a convertir el pa¨ªs en una plataforma para el terrorismo mundial, seg¨²n el dan¨¦s Anders Fogh Rasmussen, nuevo secretario general de la Alianza. Ramussen, de 56 a?os, se estren¨® ayer formalmente en el cargo asegurando que la OTAN continuar¨¢ en Afganist¨¢n todo el tiempo que haga falta, hasta conseguir que los afganos sean responsables de su propia seguridad.
Los 75 soldados ca¨ªdos en julio convirtieron el mes pasado en el m¨¢s mort¨ªfero para las tropas aliadas desde el derrocamiento del r¨¦gimen talib¨¢n en 2001, y agosto ha comenzado con la misma t¨®nica: nueve soldados muertos en combates en el sur y el este del pa¨ªs, las zonas m¨¢s dif¨ªciles de Afganist¨¢n para la comunidad internacional, y otros 12 civiles afganos muertos ayer, incluidos dos polic¨ªas, en Herat, en el oeste del pa¨ªs, donde est¨¢n destacados los 800 soldados espa?oles, que no tuvieron novedad.
La matanza de Herat, con la explosi¨®n de un artefacto de fabricaci¨®n casera al paso del coche de un jefe policial, que result¨® herido de gravedad, forma parte de la campa?a de los talibanes para disuadir a los afganos de acudir a las urnas el pr¨®ximo d¨ªa 20 para elegir nuevo presidente.
Fue el sangriento recordatorio a Rasmussen, con los nueve cuerpos de soldados recibidos en el fin de semana de su estreno en el cargo, de la gravedad del desaf¨ªo en Afganist¨¢n. No flaque¨®. "Quiero que la OTAN alcance su pleno potencial como pilar de la seguridad global", dijo el nuevo secretario general al presentar sus ambiciones y objetivos para el mandato que comienza. "Eso empieza con el ¨¦xito en Afganist¨¢n", ¨¦xito, que no victoria, que defini¨® con dos trazos: "Impedir que Afganist¨¢n se vuelva a convertir en la estaci¨®n central del terrorismo internacional" y, tras la celebraci¨®n de unas presidenciales cre¨ªbles y a m¨¢s largo plazo, "la transferencia a los afganos del liderazgo de la responsabilidad de la seguridad en Afganist¨¢n". No se fij¨® calendario Rasmussen y s¨®lo asegur¨® que la OTAN seguir¨¢ all¨ª "todo el tiempo que haga falta" para alcanzar el objetivo.
Durante los ¨²ltimos a?os se ha repetido hasta la saciedad que Afganist¨¢n ser¨¢ la confirmaci¨®n o la tumba de la OTAN en sus ambiciones de agente de seguridad global, y Rasmussen mantiene el envite. "Afganist¨¢n ser¨¢ la confirmaci¨®n, hay mucho en juego para el mundo", se?al¨®, para pasar de inmediato a celebrar el incremento de tropas ofrecido por algunos aliados y rematar: "Necesitamos incrementar el esfuerzo militar".
Matiz¨® enseguida que no s¨®lo militar. Dej¨® entrever uno de los triunfos que atesora, a diferencia de todos sus predecesores en el cargo: el haber sido primer ministro y haber tratado de t¨² a t¨² desde 2001 a otros jefes de Estados y de Gobierno. "Les conozco y mantengo con ellos una amistad de la que pienso sacar partido", se?al¨®.
Desarrollar una relaci¨®n estrat¨¦gica con Rusia a partir de los intereses compartidos y establecer relaciones m¨¢s fuertes con los pa¨ªses isl¨¢micos del Mediterr¨¢neo y del Golfo, lo que supone deshacerse del sambenito de ser el primer ministro que no censur¨® ni conden¨® las caricaturas de Mahoma publicadas en 2005 por un peri¨®dico dan¨¦s, son las otras grandes prioridades que se ha fijado Rasmussen.
La m¨¢s trascendente, sin embargo, es la de dotar a la Alianza de un nuevo concepto estrat¨¦gico, el marco doctrinal y operativo para el siglo XXI. El vigente viene de 1999. Desde entonces la OTAN casi ha doblado el n¨²mero de socios y ha asumido misiones inimaginables hace una d¨¦cada. La ex secretaria de Estado norteamericana Madeleine Albright encabezar¨¢ el grupo de 12 notables, entre los que se halla el antiguo embajador espa?ol Fernando Perpi?¨¢, que deber¨¢ perge?ar las ideas. Rasmussen quiere que la discusi¨®n sobre la futura OTAN sea lo m¨¢s abierta posible, para lo cual los expertos celebrar¨¢n reuniones en m¨²ltiples formatos, incluidas algunas en los distintos pa¨ªses para escuchar a sus opiniones p¨²blicas.
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