La recesi¨®n hace caer el n¨²mero de empresas por primera vez en 10 a?os

En ¨¦pocas de crisis, los consumidores consumen menos, los fabricantes fabrican menos y los inversores invierten menos. Todos ellos se refugian en sus cuarteles de invierno a la espera de tiempos mejores. Este gui¨®n se sigui¨® escrupulosamente el a?o pasado, cuando el n¨²mero de empresas activas descendi¨® por primera vez desde que el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE) elabora el Directorio Central de Empresas. El 1 de enero de 2009 hab¨ªa 3,35 millones de negocios abiertos, un 1,9% menos que el mismo d¨ªa de 12 meses antes.

El dato asusta porque rompe una tendencia al alza en el n¨²mero de emprendedores que se deciden a poner en marcha su idea, pero es especialmente relevante en lo que se refiere a las constructoras. Casi 60.000 empresas del ladrillo echaron el cierre el a?o en el que explot¨® la burbuja, lo que supone que en 365 d¨ªas desaparecieron el 11,8% de negocios del sector.

La destrucci¨®n de compa?¨ªas ha continuado en el primer semestre

"Son datos que no sorprenden a nadie que haya observado la evoluci¨®n del producto interior bruto (PIB) y de las suspensiones de pago que se declaran. Es m¨¢s, seguro que la realidad es mucho peor de lo que muestra esta estad¨ªstica, porque muchas sociedades inactivas no se liquidan durante a?os", sostiene Luis del Amo, presidente del Registro de Economistas Asesores Fiscales. Del Amo anticipa que a la luz del desplome que est¨¢ sufriendo la actividad econ¨®mica -en el segundo trimestre el PIB cay¨® el 4% seg¨²n el dato avanzado por el Banco de Espa?a- el porcentaje de cierres superar¨¢ el pr¨®ximo a?o de largo el 1,9% de 2009.

En la misma l¨ªnea apunta Juan Iranzo, director del Instituto de Estudios Econ¨®micos, organismo cercano a la patronal. "El ¨²ltimo trimestre de 2008 y el primero de 2009 son los peores de la historia econ¨®mica de Espa?a. Y los datos publicados ayer por el INE ponen de manifiesto que el ajuste no se est¨¢ haciendo s¨®lo a trav¨¦s de la destrucci¨®n de empleo, sino tambi¨¦n eliminando empresas", asegura.

Iranzo a?ade que esta debacle se debe en gran medida al fracaso a la hora de ajustar el exceso de capacidad y a que las empresas no han aguantado la falta de tesorer¨ªa generada, en muchos casos, por administraciones p¨²blicas que se retrasan en los pagos. La conclusi¨®n, a?ade Iranzo, es la necesidad de acometer reformas estructurales, en el mercado laboral, los transportes y otros sectores. "El primer semestre de este a?o ser¨¢ todav¨ªa peor, aunque en el segundo se ir¨¢ amortizando", concluye.

El INE public¨® este dato tan s¨®lo cuatro d¨ªas despu¨¦s de presentar las suspensiones de pagos del semestre. Si bien esta cifra supuso un cierto atisbo de esperanza porque por fin se ralentizaban los ritmos de ca¨ªda de los ¨²ltimos dos a?os, las 3.285 insolvencias declaradas entre enero y junio triplicaban las del mismo periodo del a?o anterior.

Pero volviendo a la evoluci¨®n de negocios activos, el dato m¨¢s preocupante es el n¨²mero de empresas que, ahogadas por la coyuntura o por otros motivos, echaron el cierre: 398.229, el 10,6% del total. Es decir, que m¨¢s de una de cada 10 compa?¨ªas dej¨® de existir a lo largo de 2008. En el otro extremo, 334.072 negocios empezaron a andar durante el mismo periodo.

Aparte del desplome sufrido en la construcci¨®n, el resto de sectores aguantaron el tipo. Hay ahora un 1,5% menos de negocios dedicados al comercio y la ca¨ªda en la industria se limit¨® a un t¨ªmido 0,8%. Los servicios, excluyendo el comercio, experimentaron un liger¨ªsimo repunte. Es ¨¦ste el sector que mantiene un mayor peso en la estructura empresarial del pa¨ªs, con una participaci¨®n superior a la mitad de todos los negocios. El 1 de enero de 2009 representaba el 55% del total, frente al 54% del a?o anterior.

Las comunidades que m¨¢s se han volcado en los ¨²ltimos a?os en el ladrillo fueron las que han dejado por el camino m¨¢s empresas. Murcia fue, de largo, la m¨¢s castigada, con una reducci¨®n en el n¨²mero de negocios del 4,4%. Le siguieron la Comunidad Valenciana, Canarias, Andaluc¨ªa y Castilla-La Mancha.

En el otro extremo de la balanza, las que m¨¢s aguantaron el tipo fueron Ceuta y Melilla y Extremadura. Tras ellas vienen Catalu?a, Galicia, Navarra y La Rioja. Catalu?a, Madrid y Andaluc¨ªa, como ya es habitual, acaparan casi la mitad del total de empresas espa?olas.

La mayor destrucci¨®n de establecimientos de los ¨²ltimos a?os trae, al menos, un factor positivo. Juan Iranzo se?ala que servir¨¢ para aumentar la competitividad en sectores que hasta ahora estaban poco profesionalizados, como la construcci¨®n. Pobre consuelo para una econom¨ªa que en un solo a?o gener¨® 620.000 nuevos parados y destruy¨® casi 400.000 empresas.