La Xunta aprueba los despidos en Caramelo con la oposici¨®n del comit¨¦

La textil Caramelo est¨¢ desde ayer m¨¢s cerca de despedir al 53% de su plantilla. La Conseller¨ªa de Traballo, que dirige Beatriz Mato, aprob¨® el Expediente de Regulaci¨®n de Empleo remitido por la empresa para extinguir 237 puestos de trabajo. El visto bueno se apoya en el refer¨¦ndum celebrado el pasado 3 de agosto, en el que 222 trabajadores aceptaron las condiciones formuladas por la direcci¨®n, que suponen indemnizaciones de 39 d¨ªas por a?o cotizado con un m¨¢ximo de 34 mensualidades y un l¨ªmite de 60.000 euros. El comit¨¦ de empresa, formado mayoritariamente por representantes de CIG, ha denunciado que la resoluci¨®n "supone una grav¨ªsima ilegalidad", porque en su opini¨®n se basa en un acuerdo "que no fue aceptado por el comit¨¦". CIG, que estudiar¨¢ "acciones legales contra la decisi¨®n", defiende que la ¨²nica votaci¨®n v¨¢lida tuvo lugar el 23 de julio. Ese d¨ªa, 114 trabajadores tumbaron la propuesta a mano alzada frente a 91 votos favorables.

"La decisi¨®n confirma el acuerdo pol¨ªtico entre la Xunta y Jove"

"Esto confirma tanto el acuerdo pol¨ªtico ente la Xunta y Manuel Jove [accionista mayoritario de la compa?¨ªa] como la manipulaci¨®n de la empresa", asegur¨® Isabel Mu¨ª?os, presidenta del comit¨¦. La Xunta, en cambio, record¨® que la mayor¨ªa del cuadro de personal (exactamente la mitad m¨¢s dos) respald¨® las condiciones de los despidos en un refer¨¦ndum que, aunque no cont¨® con el apoyo del comit¨¦, "es v¨¢lido seg¨²n el Estatuto de los Trabajadores".

CC OO, que s¨ª coincide con el acuerdo, cree que el ERE es la menos mala de las salidas ante la posibilidad "real" de que la firma termine en concurso de acreedores. Manuel Lores, secretario de la Federaci¨®n del Textil, explic¨® que la resoluci¨®n recoge "la voluntad mayoritaria" de la plantilla pero no entra a valorar la legalidad del acuerdo que la motiva. "Llegado el caso tendr¨¢n que dirimirlo los jueces". Con o sin acuerdo, legalmente la Xunta puede aprobar, si lo ve motivado, el ERE, aunque en este caso contaba con un informe desfavorable de la Inspecci¨®n de Trabajo emitido el 12 de junio. En ¨¦l los t¨¦cnicos se?alaban que no hay causas organizativas que justifiquen el despido colectivo, al no existir ning¨²n factor que "incida de manera desfavorable en la eficiencia de la empresa".

Pero los cinco meses de protestas y la amenaza de que Caramelo se declare en suspensi¨®n de pagos, lo que implicar¨ªa en el peor de los casos despidos a cambio de 20 d¨ªas de indemnizaci¨®n, han abierto grietas insalvables entre la plantilla, que est¨¢ "muy tocada psicol¨®gicamente".

En los pr¨®ximos d¨ªas se abrir¨¢ un periodo para que los trabajadores que quieran la baja lo pidan de forma voluntaria. Si no se llega a la cifra de 237 despidos, la empresa decidir¨¢ qui¨¦n terminar¨¢ su contrato. Uno de los compromisos que incluye el ERE es el reinicio de la actividad de la f¨¢brica. Adem¨¢s, los 25 expedientados, 19 de ellos despedidos por su actuaci¨®n durante las protestas, ser¨¢n readmitidos.

Para la presidenta del comit¨¦, los topes en las indemnizaciones perjudicar¨¢n gravemente a los empleados con mayor antig¨¹edad (m¨¢s de 25 a?os), situaci¨®n en la que se podr¨ªan encontrar entre 40 y 50 personas. "Est¨¢n pisoteando nuestros derechos", se?al¨®.