Como la vida misma
Fernando Le¨®n, cineasta comprometido con la realidad, rueda su nuevo filme, 'Amador'
En una de las paredes de la productora de Fernando Le¨®n est¨¢ colgado el cartel estadounidense de Los lunes al sol, es decir, Mondays in the sun, con un Bardem clavado al mafioso que encarn¨® en Collateral. El cineasta para delante del p¨®ster y comienza a re¨ªr: "Mira en Internet el tr¨¢iler americano. Pusieron de fondo m¨²sica flamenca, no se oye ni un di¨¢logo y la venden como si fuera un thriller de prostitutas y mafiosos". Es decir, en los ant¨ªpodas de esta historia de parados con la que logr¨® la Concha de Oro de San Sebasti¨¢n. Le¨®n (Madrid, 1968) comienza ma?ana el rodaje de su quinto largometraje de ficci¨®n, Amador, y desde luego tampoco ser¨¢ un thriller. El Amador del t¨ªtulo es un hombre que no puede salir de la cama, y que en un caluroso verano recibir¨¢ los cuidados de Marcela, una inmigrante peruana. Ambos esconden un secreto, y ambos se lo contar¨¢n al otro en un giro de gui¨®n que Le¨®n prefiere no desvelar. "Es como si antes de ver Familia [su debut cinematogr¨¢fico] te cuentan que la familia es de alquiler".
"Me atra¨ªa hablar de la labor de alguien que pasa horas con un anciano"
"S¨®lo espero que la pel¨ªcula rodada sea lo m¨¢s parecida posible a la so?ada"
Este agosto de temperaturas infernales le ayudar¨¢ al menos a recrear el est¨ªo agobiante de Amador. Aunque en su oficina, a pocos pasos del Reina Sof¨ªa y de su casa, el calor firma una tregua. All¨ª, Le¨®n de Aranoa se ha encerrado a ensayar con Celso Bugallo (Goya por Los lunes al sol) y Magaly Solier, conocida por La teta asustada.En su mesa se amontonan los dibujos, con los que el cineasta ilustra algunos de los planos m¨¢s importantes, y varios folios del story board, que a¨²n no ha acabado de rematar. Le gusta hacerlos ¨¦l mismo, reminiscencia de antiguos trabajos de dibujante e ilustrador. No le causa ning¨²n problema ense?arlos, aunque de los ensayos no da muchas pistas. "Me he encerrado con ellos, y con otros miembros del reparto, y ha ido muy bien. Me apetec¨ªa repetir con Celso; me vino a la cabeza desde el inicio de la historia. A Magaly la descubr¨ª en un peri¨®dico, en un art¨ªculo previo al Oso de Oro en Berl¨ªn de La teta asustada. Su imagen, su mirada intensa y profunda... todo encaja con Marcela".
Entre los papeles asoma el DVD de Una jornada particular, cl¨¢sico del cine italiano de Ettore Scola. "Quer¨ªa ver un color que sale en el filme". Pero nada m¨¢s, aquella historia no tiene que ver con la de Amador. "Cuando acab¨¦ Invisibles [documental para M¨¦dicos Sin Fronteras] hab¨ªa dos argumentos que tiraban de m¨ª, y Amador era el ¨²ltimo que empec¨¦, en primavera del a?o pasado. Lo que ha hecho que me decida por este gui¨®n es su simplicidad. Bueno, relativa, porque habla de cosas complejas, interesantes, aunque a trav¨¦s del prisma de esta relaci¨®n vivida dentro de una habitaci¨®n. Marcela tiene un apuro econ¨®mico, y por eso acepta el trabajo de acompa?ante de Amador. Me atra¨ªa hablar de esa profesi¨®n, de alguien que pasa horas con un anciano. Dos desconocidos en la ciudad, que en las largas horas de verano se conf¨ªan secretos que resultar¨¢n ser complementarios".
Ense?a las maquetas de los decorados de los pisos de Marcela y Amador. Va apurado. "Si tuviera m¨¢s horas el d¨ªa... Estaremos nueve semanas rodando entre Madrid y Barcelona". Vive tan encerrado con Marcela y Amador, que tras cuatro d¨ªas de o¨ªr canciones de Michael Jackson salir desde todos los coches y las tiendas, Le¨®n pregunt¨® si pasaba algo con ¨¦l.
Algo m¨¢s le preocupa su espalda, su tal¨®n de Aquiles, y la cuida antes del esfuerzo de la filmaci¨®n. "Habr¨¢ mitad interiores, mitad exteriores. Y por cierto, repito una de las localizaciones madrile?as, en San Blas, de Barrio. Es curioso, la zona sigue igual", remata con tono triste.
Tambi¨¦n reincide con su tono, el que ha llevado a Le¨®n de Aranoa a filmar pel¨ªculas de tintes sociales. "Hay algo que es inevitable, que permanece por encima de uno, que se va filtrando en mi cine, y es todo lo que me interesa, y las cosas y las personas que me atraen. Pero junto a ese tono social est¨¢ el dilema que se le presenta a Marcela entre su necesidad y su conciencia. Algo que nos pasa en mayor o menor medida en nuestras vidas, entre la conveniencia y la conciencia; un choque que cuando lo he visto retratado en cine da mucho juego".
?Y la inmigraci¨®n? "No quer¨ªa tanto hablar del fen¨®meno, que es un tema interesant¨ªsimo, como de la realidad espa?ola. Si ahora se rodara El ladr¨®n de bicicletas, Antonio [su protagonista] ser¨ªa ecuatoriano, peruano o marroqu¨ª". El cineasta disfruta hablando del derrumbe moral del protagonista y de c¨®mo se mantiene vivo el filme de De Sica 50 a?os despu¨¦s. Y vuelta a la emigraci¨®n. "En Espa?a, en general, desde las legislaciones y desde las instituciones se comete un error de base: contemplar la emigraci¨®n como si fuera un problema propio. No, es un problema para el que tiene que salir de su pa¨ªs y dejar su casa. M¨¢s a¨²n, si se piensa en abrir la mano, se ve desde 'la ventaja propia', para que hagan el trabajo sucio en los invernaderos. En el mejor de los casos es una visi¨®n buenista o bienintencionada, y sospecho que no es as¨ª. Me parece obsceno".
Se acaba el tiempo de entrevista y de charlas previas: "A cuatro d¨ªas [la entrevista se realiz¨® el pasado viernes] s¨®lo pienso en acabar el rodaje, y en que la pel¨ªcula real sea lo m¨¢s cercana posible a la imaginada, a la so?ada cuando empec¨¦ a escribir hace un a?o. ?se es el gran pulso que empiezo el mi¨¦rcoles [por ma?ana]".
Quienes han le¨ªdo el gui¨®n hablan de su calidad, y apuntan que destila mucho humor. "Berlanguiano", emplean como adjetivo. "Es cierto que en los ensayos aparece sin cesar la risa, y debo incidir en que tiene que ser natural, salir de los personajes, que no se pierda humor por el camino".
Pregunta. ?Sigue igual de meticuloso, de puntilloso con todo lo que tiene que ver con su trabajo?
Respuesta. Lucho contra ello, s¨ª. Pero no puedo. Est¨¢ claro que en algunos momentos deber¨ªa dejar m¨¢s espacio, porque una pel¨ªcula depende de muchas personas para mal y, sobre todo, para bien. Por eso, este tipo de creaci¨®n es tan distinto a otros.
P. ?Contento con la permanencia de Forl¨¢n y el Kun en el Atl¨¦tico de Madrid?
R. Soy muy forlanista. Aunque f¨ªjate como estoy, que me enter¨¦ tarde de que ganamos el Teresa Herrera, y tampoco los vi contra el Liverpool.
Efectivamente, Le¨®n vive encerrado con su Amador. Hasta octubre no hay ni Atleti.
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