El Gobierno planea subir impuestos a las rentas altas para capear la crisis

Termin¨® la era de proclamar que bajar los impuestos es de izquierdas. El cambio en la pol¨ªtica fiscal del Gobierno socialista est¨¢ en marcha: Jos¨¦ Blanco, n¨²mero dos del PSOE y ministro de Fomento, anunci¨® ayer que el Ejecutivo planea una subida de impuestos para las rentas altas. "Si es necesario elevar determinados tipos impositivos para garantizar pol¨ªticas sociales o inversiones p¨²blicas habr¨¢ que hacerlo", declar¨® a la cadena SER. Traducci¨®n libre: hay que subir impuestos -a los ricos y muy probablemente a las rentas medias- para pagar medidas como la ampliaci¨®n de las ayudas a los parados y hacer frente a los enormes costes de la recesi¨®n, con el d¨¦ficit p¨²blico galopando hacia niveles nunca vistos, en torno al 10% del PIB.

Tanto CC OO como UGT aplauden un aumento de la progresividad fiscal

Blanco se une as¨ª a la marea de declaraciones que vienen anunciando desde el Gobierno el cambio de rumbo fiscal. El presidente Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y la vicepresidenta Elena Salgado han advertido recientemente de que no hay m¨¢s remedio que pasar revista a todos los impuestos para embridar el d¨¦ficit. Y no son s¨®lo palabras: el Ejecutivo subi¨® en junio la tributaci¨®n sobre el tabaco y las gasolinas, y ha anunciado la eliminaci¨®n parcial de la deducci¨®n por vivienda en 2011. En las negociaciones -ya rotas- con los agentes sociales se habl¨® de reducir las cotizaciones sociales y subir el IVA, y sobre la mesa est¨¢ tambi¨¦n la posibilidad de eliminar total o parcialmente medidas discutidas, como la deducci¨®n de los 400 euros o el cheque-beb¨¦. Cualquiera de esos cambios que el Gobierno tiene en mente se incluir¨¢ en los Presupuestos del Estado de 2010.

Se cierra as¨ª una larga etapa en la que Gobiernos del PP y del PSOE pudieron bajar impuestos y al mismo tiempo mantener (con matices) la calidad de los servicios p¨²blicos ante el imponente crecimiento de los ¨²ltimos a?os. Con la llegada de la crisis y los cuatro millones de parados se desploman los ingresos del Estado y se disparan los gastos. Lo mismo sucede en todo el mundo, lo que ha llevado a organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI) a defender la necesidad de impulsar subidas tributarias.

Las respuestas a esa tendencia son dispares: Estados Unidos, Reino Unido e Irlanda, pa¨ªses con d¨¦ficit p¨²blicos disparados, han aprobado ya subidas fiscales para los ricos. Pero Alemania ha anunciado una rebaja de 13.000 millones de euros -en pleno a?o electoral- y Francia se niega a subirlos. "No aumentar¨¦ los impuestos porque eso retrasar¨ªa la salida de la crisis", asegur¨® en julio el presidente Nicolas Sarkozy.

?se es el dilema. El Gobierno ha dise?ado un ambicioso plan anticrisis, pero ahora se enfrenta a las consecuencias en forma de un abultado d¨¦ficit p¨²blico y de la necesidad de dar un giro fiscal para reducirlo ante la presi¨®n que impone el Pacto de Estabilidad de la UE. El Banco de Espa?a ya ha avisado de que futuras subidas de impuestos "pueden acabar esterilizando los efectos expansivos" de las medidas de est¨ªmulo.

Pero el titular de Fomento no titube¨® ayer a la hora de reabrir un debate espinoso. "Soy partidario de ayudar a los que m¨¢s lo necesitan y si para ello los que tienen m¨¢s recursos tienen que apretarse el cintur¨®n, habr¨¢ que decirlo con claridad a la sociedad", destac¨® Blanco, que m¨¢s tarde recalc¨® que ese planteamiento es "una reflexi¨®n personal".

El problema es que no es f¨¢cil delimitar ese colectivo que el n¨²mero dos del PSOE define como "las personas que tienen m¨¢s renta". El Ejecutivo acaba de eliminar el impuesto sobre el patrimonio. Si el Gobierno se decide por subir el IRPF, lo m¨¢s probable es que el grueso de las subidas recaiga sobre las rentas medias: s¨®lo el 3% de los contribuyentes declara m¨¢s de 60.000 euros anuales. Y s¨®lo el 20% declara m¨¢s de 30.000. Los m¨¢s ricos, adem¨¢s, tributan a trav¨¦s de sociedades de capital variable (sicav), que pagan s¨®lo el 1% de impuestos.

Una vez abierto el mel¨®n fiscal, las reacciones no tardaron en producirse. El portavoz del PP, Crist¨®bal Montoro, asegur¨® que los planes del Gobierno perjudicar¨¢n principalmente a las clases medias, "las aut¨¦nticas pagadoras". "Detr¨¢s del titular simp¨¢tico de subir los impuestos a los ricos est¨¢n en realidad las rentas medias, a quienes ya afect¨® la subida de carburantes y del tabaco", critic¨®. Blanco contraatac¨® y acus¨® al PP de hacer demagogia: "Es imposible hacerlo todo bajando impuestos y recortando gasto p¨²blico. Si pensamos ampliar la cobertura a los parados hay que tener claro que ese dinero sale de las arcas del Estado, y los recursos son limitados". Tampoco la izquierda lo ve claro. El coordinador de IU, Gaspar Llamazares, dijo que el Gobierno "lleva toda la legislatura hablando de recuperar una pol¨ªtica fiscal m¨¢s progresiva, pero su pol¨ªtica tributaria de los ¨²ltimos a?os es la contraria".

Tanto Comisiones Obreras como UGT aplaudieron la propuesta. Paloma L¨®pez, de CC OO, propuso que el aumento se aplique a aquellos que ganen m¨¢s de 60.000 euros brutos anuales y sostuvo que en todo caso las modificaciones fiscales tienen que perseguir una mayor progresividad. UGT apoy¨® la medida, al considerarla necesaria para financiar las pol¨ªticas de gasto en un contexto de crisis econ¨®mica. Toni Ferrer, secretario de Acci¨®n Sindical, pidi¨® que se revisen los tipos impositivos de patrimonio, el de sociedades y el IRPF de las rentas altas, en busca de que proporcionalmente paguen m¨¢s quienes tengan m¨¢s recursos. La CEOE rechaz¨® evaluar una posible subida hasta que la medida sea oficial.

Tras la ampliaci¨®n del subsidio a los parados con menos rentas anunciada por Zapatero, la cicatriz del d¨¦ficit sigue ampli¨¢ndose: el propio Blanco anunci¨® que licitar¨¢ obra p¨²blica entre agosto y diciembre por valor de 6.086 millones, un 22% m¨¢s que en los siete meses anteriores, con el objetivo de contribuir a la recuperaci¨®n econ¨®mica. A rengl¨®n seguido, anunci¨® la posible subida de impuestos. Como dicen los economistas, no hay comidas gratis.