Un verano sin refuerzos

Jos¨¦ estaba preocupado por la llegada del verano. Pensaba que con la crisis bajar¨ªa el nivel de trabajo en la tienda del grupo Inditex en la que trabaja desde hace varios a?os como dependiente con contrato indefinido. Lo que no se imaginaba era que en plena ca¨ªda del consumo iba a tener que trabajar m¨¢s que nunca. "No han contratado a nadie. Siempre llegaba alguien temporal. Pero este a?o nada. Nos hemos tenido que apa?ar los de siempre", comenta. El a?o pasado no bajaban de ocho en los turnos m¨¢s flojos. "Este a?o julio fue muy duro, porque hab¨ªa d¨ªas que a ¨²ltima hora de la tarde, cuando m¨¢s lleno est¨¢ el centro comercial, ¨¦ramos s¨®lo cuatro para toda la tienda", lamenta.

Las ventas han disminuido, admite, pero cree que no tanto como para prescindir de todos los refuerzos, especialmente en rebajas. "Y algunos d¨ªas hasta se han llevado a parte de nuestra plantilla a otros centros, donde dec¨ªan que estaban peor. Y las bajas no las han cubierto", cuenta resignado.

Carrefour y El Corte Ingl¨¦s anunciaron en junio que no contratar¨ªan a nadie

Los sindicatos dicen que el ajuste lleva a una peor atenci¨®n y afecta al consumo

Algunas empresas han aplazado vacaciones o alargado jornadas

"La venta ha bajado, pero el recorte de personal es excesivo", dice una vendedora

Jos¨¦ (que ha preferido no facilitar su verdadero nombre, "para evitar problemas", al igual que el resto de los protagonistas de este reportaje) no es el ¨²nico que ha sufrido la falta de ayuda este verano en el comercio. Muchas grandes cadenas, ante la previsi¨®n de menores ventas, han decidido no realizar ninguna contrataci¨®n eventual o las han realizado s¨®lo en puntos de venta muy concretos, con vol¨²menes de venta muy altos. En algunos casos, esta decisi¨®n de limitar las contrataciones se ha traducido en problemas para los que est¨¢n detr¨¢s del mostrador. Turnos m¨¢s largos, vacaciones m¨¢s cortas o a partir de octubre y muchas horas extra.

En junio de 2006, un grupo de empresarios de la hosteler¨ªa y el comercio de Catalu?a denunci¨® que hab¨ªa 10.000 puestos de trabajo que iban a dejarse sin cubrir en verano. ?El problema? La falta de personal "dispuesto a trabajar en festivos y malos horarios". El parque de atracciones

Port Aventura, por ejemplo, se planteaba traer empleados mexicanos, contratados en origen, ante la imposibilidad de encontrar en Espa?a empleados. Tres a?os despu¨¦s, en junio de 2009, el sindicato UGT de la misma comunidad anunci¨® que, seg¨²n sus c¨¢lculos, este verano habr¨ªa 10.000 contrataciones temporales menos que otros a?os. Port Aventura, por seguir con el mismo ejemplo, tiene ahora cerca de 1.750 empleados, un 20% menos que en 2008.

?C¨®mo hemos pasado de importar trabajadores estivales a tener 1,4 millones de parados en el sector servicios? La crisis y la ca¨ªda del consumo tienen la culpa. "La crisis es real, pero a veces a algunas empresas no ha llegado o no est¨¢ siendo tan dura, y aun as¨ª aprovechan para aplicar medidas y ahorrar m¨¢s. En el caso de muchos comercios, por ejemplo, est¨¢n haciendo rebajas muy fuertes y, para poder seguir ganando lo mismo, recortan en los empleados", asegura Gonzalo Fuentes, responsable de comercio, hosteler¨ªa y turismo del sindicato CC OO en Andaluc¨ªa.

En junio, los grandes almacenes de El Corte Ingl¨¦s anunciaron que este verano no realizar¨ªan ninguna contrataci¨®n. Era la se?al definitiva que hac¨ªa prever un verano sin refuerzos a la vista. La direcci¨®n de la empresa, seg¨²n varias agencias de noticias, solicitaron a sus empleados a trav¨¦s de "cauces de voluntariedad" que retrasen el primer turno de vacaciones de julio hasta el d¨ªa 13 de dicho mes. Una vez pasado el punto ¨¢lgido de las rebajas tocar¨ªa apa?arse con la plantilla habitual.

A mediados de ese mes, Carrefour sigui¨® la misma senda. Seg¨²n sus sindicatos, los hipermercados solicitaron a sus trabajadores que aplazaran sus vacaciones de verano a los meses de octubre y noviembre para as¨ª cubrir las necesidades de las tiendas sin tener que recurrir a contrataciones de refuerzo. A cambio, dec¨ªa la petici¨®n, a aquellos que se quedaran trabajando en verano se les dar¨ªa una compensaci¨®n econ¨®mica extra. Anged, patronal que representa a grandes superficies, el a?o pasado estim¨® que en temporada estival se llevaron a cabo 25.000 contratos. Este a?o, de momento, no ha facilitado datos ni valoraciones.

A Carmen, trabajadora desde hace varios a?os en uno de los centros de El Corte Ingl¨¦s de la costa mediterr¨¢nea, no le sorprendi¨® el anuncio de la direcci¨®n. La empresa asegur¨® que, de todas formas, el volumen de contrataci¨®n estival siempre es peque?o, y la medida no se notar¨ªa mucho. Sin embargo, Carmen s¨ª ha sufrido la falta de refuerzos. "Adem¨¢s de no traer a nadie, a los trabajadores a tiempo parcial les han reducido al m¨¢ximo las horas. A cambio, a los que somos fijos nos las han aumentado al m¨¢ximo, en los peores turnos, para ahorrar. Y la mayor¨ªa las vacaciones no nos las cogemos hasta la segunda mitad de septiembre", repasa. En rebajas, dice, fue cuando m¨¢s agobiados estuvieron.

Aun as¨ª, no se queja demasiado. Al menos, dice, ella tiene trabajo. "Es normal que muchos trabajadores no se quejen. Con las cifras de paro que hay la gente valora su puesto de trabajo m¨¢s, aunque empeoren sus condiciones. Y la empresa, en muchos casos, se aprovecha de ese miedo y esa incertidumbre", razona Santos Nogales, secretario de acci¨®n sindical de la federaci¨®n de comercio de UGT.

No en todo el comercio han renunciado a contratar en verano. Javier, que trabaja en los almacenes de la cadena de supermercados Consum, dice que ellos han pasado estos dos meses con un volumen de trabajo similar al de a?os anteriores. Han tra¨ªdo a un par de trabajadores temporales para compensar las vacaciones de los habituales. "Otros a?os igual entraba alguien m¨¢s, pero tambi¨¦n hab¨ªa un poco m¨¢s de trabajo, as¨ª que est¨¢ compensado", razona.

No s¨®lo el comercio ha contenido los contratos. El sector servicios e incluso la industria han intentado reducir las incorporaciones. "En el sector servicios se ha notado mucho. En M¨¢laga, por ejemplo, muchos restaurantes no han contratado a personal discontinuo como otros a?os, donde hab¨ªa camareros que iban desde Semana Santa hasta octubre. Este a?o no han cogido a nadie o llaman para d¨ªas sueltos, o con parte de la jornada sin contrato", comenta Gonzalo Fuertes. "Es un error tener menos plantilla de la necesaria por ahorrar unos euros, porque acabar¨¢n pag¨¢ndolo a largo plazo. Si consumidores y turistas reciben peor servicio, no vuelven", advierte.