Coquetas y viciosas
Parece que la berenjena vino al mundo en el norte de la India, donde la comieron, y pareci¨¦ndoles buena -aunque un punto venenosa, seg¨²n la variedad- decidieron exportarla al otro conf¨ªn del mundo conocido, que result¨® ser nuestra Europa del sur, previo paso por las tierras de Bizancio y por aquellas otras que dominaba el bereber.
La ruta era de sobras conocida, ya que seg¨²n nos relatan los historiadores que de esto saben, como Christian Boudan en su Geopol¨ªtica del gusto, el Oriente culinario -aquel cuya frontera con el Este limita la cultura del trigo del Pendjab, pa¨ªs de los cinco r¨ªos, y la cordillera del Pamir- ten¨ªa un fondo com¨²n de alimentos y preparaciones culinarias cuya raz¨®n de ser se encontraba en la homogeneidad clim¨¢tica y geogr¨¢fica: un mismo paisaje semides¨¦rtico entrecortado por zonas f¨¦rtiles, de macizos poco elevados y de verdes oasis, donde las zonas cultivadas por irrigaci¨®n alternan con las de escasos pastos. Propicio entorno para que el asentamiento y la agricultura convivan con el nomadismo, forma de vida que unida a la expansi¨®n de los reinos de la zona conduce -casi obliga- a exportar gustos y materiales, formas de vida y productos comestibles. Dice Boudan: "Dos grandes sucesos tuvieron un papel sobresaliente: la creaci¨®n de un mundo iranizado por los Achem¨¦nides entre el Mediterr¨¢neo y el ?ndico y la unificaci¨®n del Islam. Estos hechos han contribuido a la aceptaci¨®n de las especies y productos venidos del este por la India, como el az¨²car, el arroz y numerosas frutas y legumbres".
En el mundo ¨¢rabe les tienen un gran aprecio, sobre todo en forma de pur¨¦
V¨¢zquez Moltalb¨¢n las recomienda en 'El Balneario' cocidas al estrag¨®n
Entre ellas la berenjena, solan¨¢cea carnosa que presta sus favores a la cocina nacional desde que nos ocuparon los mahometanos, que como es sabido son grandes adeptos y consumidores del fruto. Decimos que el mundo ¨¢rabe las aprecia sobremanera, sobre todo guisadas en forma de pur¨¦, forma bajo la que act¨²a como meeza o estimulante con el nombre de muttabal betinjan. No obstante, nos cuenta Salah Jamal en su libro Aroma ¨¢rabe, en Siria y Palestina tiene la receta como justo sobrenombre el de baba ganuj, que significa coqueto y vicioso -ambos virtudes o defectos al un¨ªsono, s¨ª- debido a su textura, muy ligera y bailarina, y por la insaciabilidad que causa entre los comensales. Se?ala el autor del libro que numerosas madres, creyendo en el poder del plato para contagiar melosidad, lo administraban en generosas cantidades a sus hijas casaderas para que enfervorizasen al hombre ¨¢rabe.
Nosotros las fre¨ªmos o las asamos despu¨¦s de cortadas a rodajas y espolvoreadas con sal, que de esta suerte y merced a la figura qu¨ªmica de la ¨®smosis desaparecen los rastros de amargor que por sus componentes sufren, al ser sustituidos por el agua. En nuestros m¨¢s antiguos y conspicuos recetarios las componen siempre cocidas y posteriormente cubiertas con ralladuras de queso y buena cantidad de huevos batidos, lo cual es de suponer las dejar¨ªa en estado neutro y como simple soporte de los sabores que se depositaban sobre ellas.
Y V¨¢zquez Montalb¨¢n las recomienda en El Balneario cocidas al estrag¨®n, que as¨ª conservan todas sus vitaminas -que son muchas- y est¨¢n exentas de grasas, acopio que suelen hacer en mayor abundancia de lo que ser¨ªa de desear por la jugosa estructura y gran permeabilidad de sus carnes.
La receta (por Susi D¨ªaz del Restaurante La Finca)
Ingredientes
Magro de cerdo confitado, crema de tomate frito, berenjenas al horno, chips de berenjenas, tapetes, germinado de guisantes.
Elaboraci¨®n
Para el magro: En una sart¨¦n ponemos unas gotas de aceite de oliva, doramos el magro cortado en cuatro trozos, una vez dorado lo retiramos y lo colocamos en una bolsa de vac¨ªo, vertemos el agua en la sart¨¦n y la agregamos a la bolsa, junto con el magro. Seguido incorporamos el resto de ingredientes, cerrar la bolsa y cocinar a 90? C vapor durante 3 horas. Sacar de la bolsa, escurrir, seguidamente doramos el lomo en una sart¨¦n, mojamos con un chorrito de salsa de su cocci¨®n. Reservamos en caliente. Para la crema de tomate: trituramos el tomate frito con el caldo de cebolla, colamos y salpimentamos, agregamos la nata y las yemas, cocinamos al ba?o mar¨ªa hasta alcanzar los 80? C. Retiramos del fuego y reservamos en caliente. Partimos las berenjenas en dos mitades. Espolvoreamos con sal, piment¨®n dulce, pimienta, unas gotas de aceite de oliva y pi?ones. Metemos al horno a 180? C durante 25 minutos. Sacamos toda la carne de las berenjenas. En una sart¨¦n ponemos un poco de grasa de vaca y salteamos la carne de berenjena. Reservamos en caliente.
Recomendaciones
- La Finca: Partida Perleta, Pol¨ªgono 1, 7. Elche. Alicante. 965456007
- Piripi: Avenida ?scar Espl¨¢, 30. Alicante. 965227940
- Le Sort: Avenida de Madrid, 1. Moraira. Alicante. 966491161
- El Tridente: Hotel Neptuno, paseo Neptuno, 2. Valencia. 963567777
- Pe?al¨¦n: Fola, 1. Castell¨®n. 964234131
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