Sin consumo no hay reciclaje

No todo lo verde es inmune a la crisis. Las actividades de recuperaci¨®n y reciclaje, un amplio sector nacido en la d¨¦cada de los noventa y que ha cogido velocidad a lo largo de la actual d¨¦cada, no lo est¨¢n pasando nada bien. Unos m¨¢s que otros, pero todos sufren la crisis: empresas de gesti¨®n o recogida de residuos, recuperadoras de material -del vidrio, el papel y cart¨®n, los pl¨¢sticos o los metales- empiezan a soportar, por primera vez en su corta historia, el embate de las fuertes ca¨ªdas de consumo y producci¨®n. "Es como un c¨ªrculo cerrado", explica Cristina Af¨¢n de Rivera, secretaria general de Repecar, la asociaci¨®n de empresas recuperadoras de papel y cart¨®n, "a menor consumo, menos residuos, pero tambi¨¦n menos producci¨®n y menos demanda por parte de los fabricantes".

La basura mide la salud econ¨®mica: a menos actividad, menos residuos

De hecho, los residuos son un term¨®metro de la salud econ¨®mica. A menos actividad, menos basura. Javier Puig de la Bellacasa, director general de Ecovidrio, que gestiona el reciclado de los residuos de envases de vidrio, explica que "antes la recogida crec¨ªa al 8% anual y ahora estamos cayendo al 1%". En la hosteler¨ªa (que consume el 50% del total), el consumo de bebidas espirituosas ha bajado un 11% en el primer trimestre. Y, con ello, de envases. "Lo que", apunta De la Bellacasa, "afecta a los recogedores y transformadores, que ya ven c¨®mo la bajada del tonelaje y de la demanda de los fabricantes de envases afectan a su facturaci¨®n".

Igual ocurre en el pl¨¢stico. "A¨²n no hay datos", comenta Andr¨¦s Parre?o, gerente de Anarpla, la asociaci¨®n de los recicladores de este material, "pero estimamos que ya en 2008 la generaci¨®n de estos residuos habr¨¢ bajado un 10%. Este a?o caer¨¢ m¨¢s". M¨¢s grave a¨²n ha sido la ca¨ªda de residuos met¨¢licos, que seg¨²n asegura Ion Olaeta, presidente de la FER (Federaci¨®n Espa?ola de la Recuperaci¨®n y Reciclaje), se ha reducido en un 50%, dado que los metales son la materia prima b¨¢sica de muchos productos no perecederos. "Y c¨®mo la gente", explica Olaeta, "aguanta con sus coches o electrodom¨¦sticos viejos, no se genera chatarra nueva". Aunque se generara, las siderurgias tampoco la comprar¨ªan. "Esta industria", prosigue el presidente de la FER, "ha reducido la entrada de materia prima met¨¢lica reciclada en un 25%".

Ante este panorama, no extra?a que las empresas recuperadoras y recicladoras, que han vivido a?os de esplendor, con crecimientos de facturaci¨®n de dos d¨ªgitos y rentabilidades desconocidas en otros sectores, est¨¦n empezando a sufrir. "Muchas de las peque?as ya est¨¢n cerrando", asegura Af¨¢n de Rivera. Y lo hacen, adem¨¢s, porque con la crisis, los precios est¨¢n por los suelos. "El precio del papel ha pegado un baj¨®n del 50% desde diciembre, y con ¨¦l, las tarifas de la materia prima reciclada. Muchas est¨¢n vendiendo ya por debajo de coste para no quedarse con el producto en los almacenes. Los fabricantes tienen muchas existencias de bobinas", asegura Af¨¢n de Rivera. Olaeta cuenta una historia similar para los residuos met¨¢licos. "Si la reactivaci¨®n se hace esperar, muchas empresas de nuestro sector lo van a pasar mal. Algunas est¨¢n facturando la mitad que hace un a?o".

Algunas no lo pasan peor gracias a la exportaci¨®n. Especialmente a China, que necesita millones de toneladas de materia prima reciclada, porque su consumo interno es muy bajo. "Los chinos", dicen desde Repacar, "est¨¢n adquiriendo materia prima de papel y cart¨®n en toda Europa para embalar sus productos. Antes, los barcos ven¨ªan con ordenadores y teles, y volv¨ªan vac¨ªos. Ahora vuelven con cart¨®n recuperado".

Pese a que la recuperaci¨®n y transformaci¨®n de residuos lleva d¨¦cadas en Espa?a -los antiguos chatarreros, traperos y cementerios de coches-, el sector en su configuraci¨®n actual no tiene m¨¢s de diez a?os. Es el caso del vidrio, seg¨²n explica Puig de la Bellacasa, que "tiene su punto de partida moderno con la Ley del Envase de 1997". Por esas fechas se transpusieron las directivas europeas sobre papel y cart¨®n y la de desguace de coches en 2002.

"El ¨¦xito del sistema ha sido tal", asegura Melchor Ord¨®?ez, director general de

Ecoembes, el ente que gestiona la recogida de envases en Espa?a, "que hemos pasado entre 1998 y 2006 de 40.000 a 1,2 millones de toneladas de envases recogidos". En vidrios se recoge ya en torno al 60% del consumo aparente. Lo m¨¢s importante, desde el punto de vista empresarial, es que la gesti¨®n -recogida, recuperaci¨®n, reciclado y venta- ha generado la riqueza suficiente para configurar un nuevo sector, con miles de empresas y decenas de miles de puestos de trabajo directos e indirectos.

S¨®lo en el segmento de desguace de autom¨®viles existen ahora, informa Rafael Pardo, de AEDRA, la asociaci¨®n que agrupa las empresas del sector, "cerca de 750 empresas que recogen, desguazan, descontaminan, achatarran y comercializan las piezas de casi un mill¨®n de veh¨ªculos al a?o". Un sector, adem¨¢s, puntero en el mundo. "Tenemos la mayor empresa del mundo, Desguaces La Torre, que recicla 70.000 veh¨ªculos al a?o y emplea a 350 trabajadores", apunta Pardo. En papel y cart¨®n hay cerca de 220 empresas, 107 en reciclado de pl¨¢sticos y 200 en metales.

La multiplicaci¨®n de actividad ha generado rentabilidades fuera de lo normal. Como muestra, en el sector de reciclado de pl¨¢sticos, Eslava Pl¨¢sticos, una de las m¨¢s grandes, ha doblado su facturaci¨®n entre 2005 y 2007 de 18 a 32 millones de euros, con un Ebitda de 2,4 millones. Lo mismo sucede en las dem¨¢s ¨¢reas, de ah¨ª el inter¨¦s de los grandes grupos como

Cespa (Ferrovial) o FCC.

Pese al cambio de tendencia derivado de la crisis, la impresi¨®n dominante es de confianza en el futuro. No s¨®lo porque se espera que en uno o dos a?os la reactivaci¨®n econ¨®mica vuelva a situar al sector en los niveles de 2007, sino porque en algunos segmentos existe a¨²n cierto recorrido. Si es dif¨ªcil que se pueda aumentar la tasa de recogida en papel y cart¨®n, ahora del 69%, o en el autom¨®vil (donde se recicla ya el 85% del peso del veh¨ªculo), s¨ª hay campo para crecer en vidrio o pl¨¢stico. "A¨²n queda un porcentaje de vidrio del 40% que no se recupera", explica Puig de la Bellacasa. "Si conseguimos que los fabricantes y ciudadanos se impliquen, se puede subir". Tambi¨¦n Parre?o cree que se puede crecer en pl¨¢sticos. El segmento recicla un 15% de los 4 millones de residuos pl¨¢sticos. "Si logramos que los fabricantes suban su demanda y haya m¨¢s recogida selectiva podr¨ªamos llegar hasta el 22%".