?Cu¨¢nto va a durar la gripe?

-Doctor, ?cu¨¢ndo se acabar¨¢ mi gripe? La de mi vecino se est¨¢ solucionando en una semana y la m¨ªa parece que pueda durar mucho m¨¢s.

-Amigo, su vecino tiene una gripe, pero lo de usted no es una gripe, es una neumon¨ªa. Y esto es mucho m¨¢s largo.

Aunque no lo parezca, no voy a hablar de la gripe A. Ya se ha hablado bastante. Voy a hablar de la crisis. Estos d¨ªas los medios de comunicaci¨®n ofrecen, como noticia, informes que indican que la salida de la crisis en Espa?a va a ser mucho m¨¢s lenta que en otros pa¨ªses de la UE. Y, junto a la sorpresa, son muchos los que se preguntan por qu¨¦ Espa?a va a situarse en la cola de este proceso de recuperaci¨®n. Me sorprende la sorpresa, pero pienso que es una indicaci¨®n de que las informaciones que se han dado sobre la crisis espa?ola han sido, en el mejor de los casos, insuficientes, y a veces desorientadoras.

No se trata de recuperar los puestos de trabajo perdidos, sino de crear nuevos, en nuevas actividades y adaptando a la gente

Si hay una crisis internacional, de car¨¢cter fundamentalmente financiero, que ha afectado a una gran cantidad de econom¨ªas, ?por qu¨¦ algunos pa¨ªses parece que ya se est¨¢n recuperando y, en cambio, en Espa?a, la impresi¨®n es que todav¨ªa no se ha tocado fondo? ?Es que nuestra crisis es m¨¢s profunda? La respuesta es no. La raz¨®n es que lo nuestro es otra cosa. Tambi¨¦n se trata de una crisis, evidentemente, pero de una naturaleza muy distinta a la de muchos pa¨ªses de la UE, y por ello no se pueden analizar de forma paralela, ni atacarla con las mismas medidas.

La crisis internacional, originada en Wall Street, es una crisis del sistema financiero que ha destruido los recursos propios de una buena parte de las instituciones financieras americanas y europeas, dej¨¢ndolas sin capital y sin liquidez. Algunas han quebrado y la mayor¨ªa han sido o est¨¢n siendo recapitalizadas con dinero p¨²blico. En Espa?a no ha habido crisis financiera, ning¨²n banco ha quebrado ni ha necesitado inyecci¨®n de capital p¨²blico. Veremos lo que ocurre cuando empiecen a vencer los cr¨¦ditos al sector inmobiliario, pero por ahora el sistema est¨¢ sano, aunque sin liquidez.

La crisis espa?ola es una crisis de crecimiento en una direcci¨®n equivocada (hipertrofia del sector inmobiliario) y con un instrumento inadecuado (ritmo de consumo y de inversi¨®n superior a la creaci¨®n de riqueza, basado en el endeudamiento y en la consiguiente falta de ahorro interior). Durante unos a?os, la banca internacional ha proporcionado los recursos necesarios para aguantar esta din¨¢mica perversa que ha convertido a Espa?a en el pa¨ªs m¨¢s endeudado del mundo. La deuda exterior de los espa?oles, con respecto al PIB, es casi el doble de la de los norteamericanos, que siempre ocupaban el n¨²mero 1 de la lista. Este proceso se ha interrumpido brutalmente cuando la banca internacional se ha quedado sin liquidez y no ha podido o querido seguir dando cr¨¦ditos a bancos, empresas y particulares espa?oles. ?Qu¨¦ l¨¢stima que la crisis internacional no se hubiera adelantado un par de a?os y nos hubiera puesto frente a nuestros problemas antes de llegar al punto al que hemos llegado!

La mayor¨ªa de los pa¨ªses europeos deber¨¢n resolver la crisis de sus instituciones financieras -ya lo est¨¢n haciendo- y deber¨¢n reemprender entonces ritmos moderados de crecimiento, volviendo a crear empleo, en una l¨ªnea no muy diferente de la de hace tres a?os. A esto se le llama recuperaci¨®n.

El caso espa?ol -y tambi¨¦n catal¨¢n, aunque con algunas diferencias positivas que en otro momento comentar¨¦- es distinto. Los pr¨®ximos meses, o a?os, no han de ser de recuperaci¨®n, sino de cambio. M¨¢s claro a¨²n, de recuperaci¨®n a trav¨¦s del cambio. El ejemplo m¨¢s claro es el del empleo. No se trata de recuperar los puestos de trabajo perdidos; se trata de ir creando nuevos puestos de trabajo, inventando nuevas actividades, y adaptando a las personas para las mismas. Es evidente que esto es m¨¢s complejo y m¨¢s lento que recapitalizar bancos o relanzar obras p¨²blicas. Pero es imprescindible.

Ante el ruido que se est¨¢ generando, pienso que solamente si los gobiernos aceptan y los ciudadanos, adecuadamente informados, comprenden que la situaci¨®n es la que estoy describiendo, se podr¨¢ dar respuesta a las preguntas y se podr¨¢ avanzar en serio hacia actuaciones que no s¨®lo pongan parches, sino que preparen el futuro; actuaciones que por ahora se echan en falta.

Joan Maj¨® es ingeniero y ex ministro