Intent¨¦ usar otras palabras

El t¨ªtulo de la nueva novela del escritor (y licenciado en Medicina y cirujano) Germ¨¢n Sierra, Intente usar otras palabras, es parte de la po¨¦tica que lleva adherida. Intente escribir desde otro criterio de la forma novel¨ªstica. O no intente contar la misma historia que la novela tradicional nos lleva contando desde su nacimiento, pareciera decirnos. En su novela hay una referencia a esta cuesti¨®n: "El mundo est¨¢ lleno de historias, pero la mayor parte de ellas no dicen nada o dicen lo mismo una y otra vez". De hecho, Sierra nos cuenta varias historias. Pero con ese estilo sofisticadamente descoordinado que recordamos en las propuestas m¨¢s posmodernistas de un John Barth en Estados Unidos o incluso en la ¨²ltima novela de Juli¨¢n R¨ªos, El puente de Alma. Hay un protagonista, Carlos Prat, que servir¨¢ de modelo para la novela que est¨¢ escribiendo la escritora Patricia Cantino. Y hay un joven escritor que reemplazar¨¢ a la escritora cuando ¨¦sta no est¨¦ por la labor. Mientras tanto, en los m¨¢rgenes de este argumento, donde, dicho sea de paso, no falta un tejido t¨®rrido de amantes diseccionados con una mezcla de bistur¨ª a lo Lawrence Durrell y Vlad¨ªmir Nabokov, se introducen distintas formas narrativas, todas relacionadas con las nuevas tecnolog¨ªas de la comunicaci¨®n y la informaci¨®n. En su estudio Afterpop. La literatura de la implosi¨®n medi¨¢tica, dice su autor, Eloy Fern¨¢ndez Porta, a este respecto, citando a Deleuze: "?ste describe la novela carrolliana como el primer libro que refiere dos historias a la vez: no en contig¨¹idad sino en forma de saltos, estribillos e interferencias". El cr¨ªtico Vicente Luis Mora, en su libro de ensayo La luz nueva, incluye a Germ¨¢n Sierra en el grupo bautizado por el mismo ensayista como "la narrativa de Pangea". Es decir, esos escritores que en virtud de los nuevos medios de comunicaci¨®n globales alteran los dispositivos de representaci¨®n novel¨ªsticos cl¨¢sicos. Germ¨¢n Sierra dramatiza (o comedializa, seg¨²n se interprete) con inteligente sensibilidad los propios presupuestos tradicionales de la novela.