"Mario termin¨® como empez¨®, en la lucha por la libertad"
Esozi Leturiondo es desde junio pasado la presidenta de Mario Onaindia Fundazioa, que se presenta hoy en San Sebasti¨¢n y pretende ser "el relevo colectivo" de la labor pol¨ªtica e intelectual de su marido, fallecido en 2003.
Pregunta. ?Qu¨¦ caracteriz¨® la andadura pol¨ªtica de Onaindia?
Respuesta. Su obsesi¨®n y su pasi¨®n, la b¨²squeda de la libertad. Vivi¨® toda su vida en ella. Dependiendo del momento, puso el esfuerzo en una cosa u otra, primero en luchar contra la dictadura, despu¨¦s de aunar a la izquierda, pero ¨¦sa b¨²squeda fue la constante de toda su trayectoria vital.
P. ?Qu¨¦ diferenciar¨¢ esta fundaci¨®n de otras de impulso tambi¨¦n socialista?
R. La figura de Mario trasciende al socialismo. Tuvo relaci¨®n, se interes¨® e implic¨® con sectores a los que el socialismo no ha llegado, como el nacionalismo o el liberalismo, esos sectores de derecha civilizada y liberal vasca que no s¨¦ exactamente d¨®nde est¨¢n, probablemente en ning¨²n partido. Queremos dar voz a esos sectores liberales, republicanos y socialistas cuya aportaci¨®n hist¨®rica a la cultura y al euskera fue muy grande, frente a la apariencia de que en ese terreno todo lo ha hecho el nacionalismo. Ha habido un abandono, una carencia de conocimiento sobre todos esos sectores, incluido el socialismo actual, y su aportaci¨®n hist¨®rica en esos campos o en el del autogobierno. Se han convertido en banderas del nacionalismo, pero tambi¨¦n porque se le ha dejado. Hay que recuperarlas.
P. ?C¨®mo vivi¨® el tr¨¢nsito de su marido desde la ETA de los a?os sesenta, incluida su condena a muerte, a Euskadiko Ezkerra, con la disoluci¨®n de ETA p-m, y luego al PSE?
R. Fue una trayectoria que hicimos juntos, a lo largo de muchos a?os y con naturalidad. Me espanta la gente que se precia de seguir pensando igual que a los 20 a?os. Eso no ocurre en ning¨²n aspecto de la vida. La evoluci¨®n y el aprendiaje son de cada uno y Mario dej¨® de ser nacionalista. Lleg¨® a la conclusi¨®n de que, en aquel momento dado, y con el terrorismo por medio, no se pod¨ªa ser a la vez dem¨®crata, y tom¨® partido.
P. ?Fue esa evoluci¨®n su modo de enjugar la responsabilidad de haber contribuido a...
R. ?A crear el monstruo? Esa mala conciencia estuvo ah¨ª, y le satisfizo mucho colaborar a la disoluci¨®n de ETA p-m, pero siempre dec¨ªa que, de verse de nuevo con 18 a?os, con la misma dictadura enfrente, sin saber como entonces en qu¨¦ se iba a convertir ETA, probablemente habr¨ªa vuelto a actuar igual. De hecho, creo que ¨¦l fue coherente y termin¨® exactamente donde empez¨®: en la lucha por la libertad.
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