El 'DNI gen¨¦tico' permitir¨¢ tratar el c¨¢ncer de forma personalizada
En Espa?a se curan hasta el 80% de los tumores malignos de mama
"Identificar claramente el perfil gen¨¦tico del tumor mamario, es decir, estar en posesi¨®n de su DNI gen¨¦tico, ser¨¢ el primer gran paso para seleccionar un tratamiento ¨®ptimo para cada paciente e ir de verdad hacia esa terapia personalizada en c¨¢ncer de la que ahora tanto se habla. Se trata de determinar si podemos seleccionar el r¨¦gimen quimioter¨¢pico en funci¨®n de los subtipos moleculares o biomarcadores", afirma Gabriel Hortobagyi, jefe del departamento de Oncolog¨ªa M¨¦dica de la Mama del Centro MD Anderson de Houston (Tejas, EE UU), que viaj¨® la semana pasada a Madrid para codirigir el II Encuentro Multidisciplinar del Tratamiento del C¨¢ncer de Mama, junto con el doctor Antonio Gonz¨¢lez Mart¨ªn, jefe del servicio de Oncolog¨ªa M¨¦dica del MD Anderson Espa?a, situado en Madrid, la ¨²nica filial que el hospital tejano tiene en el mundo.
La tecnolog¨ªa ya permite anticipar si la quimioterapia ser¨¢ eficaz
En esta reuni¨®n se dieron cita m¨¢s de 200 expertos en mama de todo el mundo, una enfermedad, de la que en Espa?a se diagnostican alrededor de 18.000 nuevos casos al a?o.
Seg¨²n el doctor Antonio Gonz¨¢lez, es fundamental en esta patolog¨ªa la participaci¨®n coordinada de onc¨®logos, cirujanos, pat¨®logos, radioterapeutas, ginec¨®logos... "Por ello", explica, "hemos cre¨ªdo muy relevante la multidisciplinariedad de este encuentro, puesto que los principales avances en el tratamiento de este proceso los encontramos en la profundizaci¨®n del conocimiento de la biolog¨ªa de la enfermedad y en la mejora de las distintas t¨¦cnicas terap¨¦uticas".
Este experto cit¨® el tipo de tumor mamario que expresa el oncog¨¦n HER-2, que tiene un comportamiento cl¨ªnico muy agresivo y responde, sin embargo, a terapias biol¨®gicas dirigidas a ese receptor. As¨ª ha logrado aumentarse notablemente la supervivencia de estas pacientes.
Un hecho que est¨¢ muy constatado, como advirti¨® el doctor Hortobagyi, es que no todas las pacientes responden a los mismos tratamientos: "Eso significa que el c¨¢ncer de mama no es una enfermedad, sino muchas, en virtud de las alteraciones gen¨¦ticas del tumor. Existe un gran inter¨¦s en identificar los llamados predictores de respuesta a los agentes de quimioterapia, porque se mejorar¨¢ el beneficio terap¨¦utico y se reducir¨¢ la toxicidad. Confiamos en que est¨¦n disponibles en un futuro no muy lejano".
Las nuevas clasificaciones moleculares est¨¢n permitiendo diferenciar los tratamientos para ir hacia el individual. Recientemente, seg¨²n el doctor Gonz¨¢lez, se est¨¢n incorporando a la pr¨¢ctica cl¨ªnica an¨¢lisis de la gen¨¦tica del tumor mediante tests que estudian la expresi¨®n de varios genes a la vez y que se conoce como firma gen¨¦tica.
"Este tipo de tecnolog¨ªa", se?ala, "se est¨¢ aplicando ya y nos permite seleccionar qu¨¦ enfermas se beneficiar¨¢n del tratamiento de quimioterapia despu¨¦s de la cirug¨ªa y cu¨¢les no. As¨ª podremos evitar administrarla a quienes no les vaya a ir bien".
El c¨¢ncer de mama es el m¨¢s frecuente en las mujeres occidentales y se observa que su incidencia aumenta con el nivel econ¨®mico y la edad. M¨¢s de la mitad de los casos se diagnostican en los pa¨ªses desarrollados: 370.000 al a?o en Europa y 230.000 en Estados Unidos. La prevalencia m¨¢s baja se da en Jap¨®n, Tailandia, Nigeria e India.
La supervivencia por este tumor en Espa?a es superior a la media europea, que se sit¨²a en el 76%, y est¨¢ m¨¢s pr¨®xima a la de pa¨ªses como Estados Unidos, Francia, Suecia, Suiza e Italia (83% a los cinco a?os y 70% a los diez). Gracias a la detecci¨®n precoz mediante mamograf¨ªa cada vez son m¨¢s las mujeres que superan esta enfermedad.
El MD Anderson de Houston, fundado en 1944 y adscrito a la Universidad de Texas (Estados Unidos), cre¨® en 2000 su ¨²nica filial en el mundo, el Centro Oncol¨®gico MD Anderson International Espa?a en Madrid. Sin embargo, son muy conocidas las historias de algunos personajes famosos que han viajado hasta la ciudad norteamericana con la esperanza de curarse el c¨¢ncer.
Gabriel Hortobagyi se?ala que el hospital estadounidense es seis veces m¨¢s grande que el de Madrid, que s¨®lo tiene nueve a?os, y que all¨ª ven muchos m¨¢s pacientes. "Aparte de eso, no hay otras diferencias", agrega. Un gran problema, seg¨²n advierte, es preservar la privacidad y la intimidad de los pacientes, y esto es m¨¢s f¨¢cil en un centro grande y en un pa¨ªs extranjero. ?sa ha sido la experiencia de varios espa?oles c¨¦lebres, que han salvado la vida, y podr¨ªan haberse tratado aqu¨ª".
"Intentamos mantener la misma calidad en la atenci¨®n, los mismos valores ¨¦ticos, los ¨²ltimos avances en las terapias. Tenemos convenios de colaboraci¨®n en investigaci¨®n b¨¢sica y traslacional, esto es, para llevar en seguida a la pr¨¢ctica cl¨ªnica, con instituciones p¨²blicas del prestigio del Centro Nacional de Investigaciones Oncol¨®gicas. Estamos reconocidos para la formaci¨®n de m¨¦dicos internos residentes. Tambi¨¦n hay acuerdos de asistencia con compa?¨ªas m¨¦dicas aseguradoras privadas, del mismo modo que los hay con el sistema p¨²blico de salud con algunas comunidades aut¨®nomas de la zona centro de Espa?a", explica Gonz¨¢lez.
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