Brasil descubre Suram¨¦rica al COI

Una alta dosis de pasi¨®n, una econom¨ªa alcista en tiempos de tanta penumbra y una deuda ol¨ªmpica con 400 millones de suramericanos. Tres argumentos tan s¨®lidos como bien articulados inclinaron ayer la balanza del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional a favor de R¨ªo, del liderazgo de su presidente, Lula da Silva, y de Suram¨¦rica, que de la mano de su locomotora acoger¨¢ por primera vez unos Juegos Ol¨ªmpicos.

A la cita de 2016 tambi¨¦n aspiraba Madrid, que esta vez se qued¨® a¨²n m¨¢s cerca del objetivo que hace cuatro a?os en Singapur. No es una cuesti¨®n menor. Con una elecci¨®n politizada al m¨¢ximo nivel diplom¨¢tico, aristocr¨¢tico y palaciego, la escalada confirma el buen trabajo de la candidatura que ayer lideraron la Monarqu¨ªa, el Gobierno, la Comunidad y la Alcald¨ªa. Cuatro instituciones unidas como garantes de un proyecto que, seg¨²n las propias encuestas del COI, ten¨ªa un sost¨¦n popular del 86%. Las ciudades con las que ha ca¨ªdo Madrid (Londres y Par¨ªs en Singapur, R¨ªo en Copenhague) est¨¢n en primera l¨ªnea del concierto mundial. Tambi¨¦n Chicago y Tokio, relegadas por la aspirante espa?ola.

El voto europeo sepult¨® a Madrid y as¨ª se garantiz¨® una opci¨®n para 2020

Tras d¨ªas de adulaci¨®n, el olimpismo, un crisol de voluntades, conden¨® de un plumazo a Chicago. Una forma de marcar su territorio frente a una candidatura que se pase¨® a hombros de Barack Obama y su esposa, Michelle. Convertido en el epicentro de la escena internacional durante unos d¨ªas cada cuatro a?os, en el COI el poder no se discute. Pese al padrinazgo del presidente estadounidense, que, al igual que su mujer, hizo un discurso directo al coraz¨®n de los votantes. Con los senadores ol¨ªmpicos nunca se sabe. La presentaci¨®n de Tokio, la mejor puntuada en la comisi¨®n de evaluaci¨®n previa, result¨® hasta tal punto extravagante que uno de los titulares que dej¨® entre los medios desplazados a Copenhague fue una invitaci¨®n de una de sus deportistas a los karaokes de su pa¨ªs. No obstante, la capital japonesa salv¨® la primera criba. Recibi¨® 22 votos por 18 la ciudad natal de Michelle Obama, que quiso, sin ¨¦xito, brindar unos Juegos en Chicago a su padre, ya fallecido y que padeci¨® durante a?os una esclerosis m¨²ltiple. "El deporte era un v¨ªnculo con sus hijos", dijo la primera dama de la Casa Blanca. "Elijan a Chicago por la misma raz¨®n que yo, que no ten¨ªa grandes ra¨ªces, me enamor¨¦ de ella: es la ciudad americana m¨¢s americana", apunt¨® su marido. No cuaj¨®. En su precipitada llegada y salida, el COI percibi¨® un cierto intrusismo, sosten¨ªan ayer varios expertos.

Madrid, que articul¨® su ponencia final en la humanizaci¨®n de un evento que acu?¨® como Los Juegos de las Personas, sali¨® l¨ªder del primer recuento con 28 votos por 26 de R¨ªo. Las dos votaciones siguientes fueron significativas. La ca¨ªda de Chicago result¨® s¨ªsmica. Gran parte de sus electores iniciales se alist¨® a R¨ªo (46). Madrid sum¨® un solo feligr¨¦s (29) y Tokio perdi¨® dos (20). Exiliada la candidatura japonesa en la tercera ronda, se reprodujo la situaci¨®n. Curioso: R¨ªo conquist¨® justo los 20 escrutinios nipones (66) y Madrid s¨®lo sum¨® tres (32). Una goleada final s¨®lo comparable a la que en 2001 endos¨® Pek¨ªn a Toronto (56-22). Como se esperaba, el voto europeo, el de mayor peso (el 43,5% del censo de ayer), sepult¨® a Madrid y se garantiz¨® una opci¨®n para 2020. R¨ªo har¨¢ de puente entre Londres 2012 y la candidata de cualquier continente que no sea Am¨¦rica.

Era previsible que la rotaci¨®n de continentes, que se mantiene inquebrantable desde Melbourne 1956, socavara las opciones de Madrid. Pero no fue la ¨²nica causa. La emotiva y s¨®lida exposici¨®n final de la candidatura espa?ola, reforzada adem¨¢s por unas infraestructuras terminadas al 80% y un reguero de deportistas nacionales que copan casi cada semana los grandes podios internacionales, no fue suficiente para contrarrestar el mensaje brasile?o. La delegaci¨®n de Ipanema y Maracan¨¢ mantuvo un gui¨®n impecable: una admirable e incontestable pujanza econ¨®mica expuesta con las justas dosis de pasi¨®n carioca. Y una tercera v¨ªa, un discurso ali?ado con gui?os constantes a Suram¨¦rica, territorio ol¨ªmpicamente virgen. "Ha llegado nuestro momento. Pueden creer en nosotros y abrir prometedoras fronteras en el movimiento ol¨ªmpico". El COI crey¨® a Lula, al que en estos tiempos le sobra cr¨¦dito, y el presidente brasile?o se dio un atrac¨®n de l¨¢grimas antes de comparecer ante la prensa como el gran triunfador de la mayor batalla que haya existido por unos Juegos. Lo mismo le pas¨® a Alberto Ruiz-Gallard¨®n. Dos horas despu¨¦s del bajonazo, no pudo contener el llanto durante su encuentro de veinte minutos con la prensa. Con una permanente tiritona en la voz, desliz¨®: "Madrid seguir¨¢ so?ando". No precis¨® cu¨¢nto tiempo. Espa?a puede rendirse o prolongar el marat¨®n hasta 2020. Algunas evidencias pueden resultarle inquietantes si se mantiene en vilo. En el deporte se adivina un nuevo orden: el Mundial de f¨²tbol de 2010, en Sur¨¢frica; la Eurocopa de 2012, en Ucrania-Polonia, y el Mundial de 2014 y los Juegos de 2016, en Brasil.