"Kak¨¢ rinde mejor detr¨¢s de un punta, no corriendo hacia atr¨¢s"
Afuera, en Via Turati, los milaneses se apresuran altaneros gastando zapatos que relucen y trajes de pa?o reci¨¦n estrenados. En el interior, en la sede del Milan, en un despacho escondido, Franco Baresi (Travagliato, 1960) se reclina en su asiento con un pantal¨®n de algod¨®n gastado, un jersey b¨¢sico y zapatillas. El viejo capit¨¢n lleva el pelo igual de despeinado que cuando asombr¨® al mundo. Su rostro p¨¢lido y huesudo evoca una mezcla de pr¨ªncipe de las tinieblas con cazador prehist¨®rico. Los ojos claros como glaciares no ayudan a suavizar su semblante.
Pregunta. ?Sab¨ªa que su ejercicio defensivo contra la Quinta del Buitre dej¨® una impronta imborrable en la afici¨®n espa?ola?
Respuesta. El trabajo estaba repartido. Con Arrigo Sacchi hab¨ªa entrenamientos en los que los cuatro defensores jug¨¢bamos contra 17 atacantes. Tassotti, Costacurta, Maldini y yo contra el resto. Eran sesiones tan duras que sent¨ªamos los partidos como un entrenamiento m¨¢s. Est¨¢bamos habituados a la dificultad. Adem¨¢s de la calidad t¨¦cnica, lo fundamental era la sinton¨ªa mental. La concentraci¨®n. La capacidad de moverte con el compa?ero. Cosas que tal vez ahora se vean menos. El Madrid, por ejemplo, no ha cambiado. Sigue siendo un equipo m¨¢s atento a la fase ofensiva que a defenderse. Y se pueden hacer ambas cosas.
"Cre¨ª que en el Bernab¨¦u sufrir¨ªamos. ?Pero el Madrid iba m¨¢s lento que nosotros!"
P. Cuando usted robaba el bal¨®n casi siempre sal¨ªa jugando con limpieza. ?C¨®mo consegu¨ªa que ese primer toque fuese m¨¢s sutil que un rebote?
R. Eso es una cualidad natural. Sin el instinto para anticipar la jugada ese primer toque es imposible. Si comprendes la jugada antes que el adversario, ganas unas cent¨¦simas que te ayudan a anticiparte, y si te anticipas es m¨¢s sencillo llevarte bien la pelota e iniciar el contragolpe. T¨² puedes ense?ar los movimientos, los conceptos sobre c¨®mo perfilarte ante un rival, pero la anticipaci¨®n... Hay dos categor¨ªas: el calciatore y el jugador. El calciatore es m¨¢s trabajador que inteligente. El jugador es el que sabe establecer los tiempos del juego.
P. Sacchi utiliz¨® su anticipaci¨®n como un recurso ofensivo.
R. Yo robaba en el medio campo y me incorporaba al ataque. As¨ª desbord¨¢bamos a medio equipo contrario: me quedaba ante los centrales con Van Basten.
P. Normalmente la sorpresa se busca desde el ataque. ?Hasta qu¨¦ punto la revoluci¨®n de Sacchi supon¨ªa sorprender desde atr¨¢s?
R. Para nosotros fue muy importante el fuera de juego porque muy pocos jugadores sab¨ªan hacerlo y muchos menos afrontarlo. Lo curioso es que hoy se hace menos que hace 15 a?os. Es m¨¢s dif¨ªcil porque todos los equipos ahora est¨¢n m¨¢s o menos organizados. En mi ¨¦poca no hab¨ªa organizaci¨®n. El Milan fue el primer equipo que practic¨® un f¨²tbol con todos los componentes nuevos: fuera de juego, presi¨®n, achique... El efecto en los rivales era de sorpresa, de par¨¢lisis. Y nos daba una gran ventaja porque nosotros lo racionaliz¨¢bamos: marc¨¢bamos los tiempos para movernos al un¨ªsono, con las l¨ªneas siempre juntas. Los otros iban a contrapi¨¦. Al rival que recib¨ªa el bal¨®n le hac¨ªamos tres para uno. Lo practic¨¢bamos tanto en los entrenamientos y nos daba tanto resultado que llegamos a divertirnos entrenando sin bal¨®n. No s¨®lo quer¨ªamos ganar. Quer¨ªamos asombrar a quien nos ve¨ªa.
P. ?Qu¨¦ ten¨ªa en cuenta cuando mandaba el fuera de juego?
R. No dices: "Ahora tiramos el fuera de juego". Es una consecuencia de c¨®mo se mueve el equipo. Si el bal¨®n est¨¢ en posesi¨®n del rival, y el jugador que lo tiene cuenta con espacio y tiempo, no puedes tirar el fuera de juego porque tienes grandes posibilidades de fracasar. Hay que distinguir entre bal¨®n descubierto y bal¨®n cubierto. Para tirar el fuera de juego el bal¨®n siempre tiene que estar cubierto. Todo tu equipo debe acortarse y presionar sobre el bal¨®n para que los contrarios no tengan la posibilidad de disponer f¨¢cilmente de la posesi¨®n. Y tus laterales siempre deben estar en l¨ªnea.
P. ?Con qu¨¦ equipos era m¨¢s dif¨ªcil?
R. Cuando te enfrentabas a rivales habilidosos que te atacaban con muchos hombres todo se complicaba. Y tengo que decir que para m¨ª el Madrid supuso una novedad. En Italia nadie te atacaba as¨ª y en Europa tampoco. El Madrid siempre elimin¨® al Inter a principios de los ochenta. El Inter era muy defensivo, se amontonaba sobre su ¨¢rea. Ni siquiera marcaba en zona. Si al Madrid le dabas la iniciativa estabas muerto. Ahora sigue siendo as¨ª. El Inter no estaba preparado. Y cuando el Madrid jug¨® contra nosotros se sorprendi¨® de encontrarse con un equipo italiano tan agresivo.
P. Usted actuaba con una gran determinaci¨®n. ?Nunca dudaba?
R. Yo s¨®lo me paraba a pensar cuando estaba mal f¨ªsicamente. Nunca emple¨¦ el cuerpo para chocar. Mi juego se basaba en la astucia y en el ritmo, y para practicarlo necesitaba estar r¨¢pido de piernas. Tal vez por eso parec¨ªa que no pensaba.
P. ?Por qu¨¦ pegaba tan poco? ?Un central no debe pegar m¨¢s?
R. Siempre procur¨¦ ser determinado. Con eso me bastaba. Intimidar con faltas no era mi estilo.
P. ?Qu¨¦ equipo es este Milan?
R. Sufri¨® la retirada de Maldini, el cambio de entrenador y la partida de Kak¨¢. El equipo ha estado disperso y la condici¨®n f¨ªsica de los jugadores no ha sido buena. Ha mejorado porque encontr¨® un orden que se ajusta a las caracter¨ªsticas de los jugadores.
P. ?Estos jugadores podr¨ªan jugar como exig¨ªa Sacchi?
R. Nunca. No pueden hacer un juego agresivo ni veloz. Pero tienen el cambio de ritmo que permite Pato. Y tienen a Ronaldinho, que virtualmente posee esa cualidad para cambiar de ritmo, aunque ahora no est¨¢ f¨ªsicamente en plenitud. En suma, podemos crear problemas a los rivales porque movemos bien el bal¨®n y cambiamos de orientaci¨®n con gran precisi¨®n. Pero vamos a nuestro ritmo. Pirlo, Ambrosini, Seedorf, Gattuso... llevan tantos a?os a un alto nivel que no se puede pretender que jueguen al m¨¢ximo 70 partidos por temporada.
P. ?Qu¨¦ pas¨® en Madrid?
R. El Milan no est¨¢ pensado para defender sino para imponer el propio juego. Si pierde el bal¨®n le cuesta recuperarlo. Si encontramos un rival que nos obliga a jugar a un ritmo m¨¢s alto nos mete en dificultades. Pens¨¦ que en el Bernab¨¦u sufrir¨ªamos. ?Pero el Madrid iba m¨¢s lento que nosotros! Es extra?o porque el Madrid ha empezado la temporada jugando bien. Despu¨¦s se ha ca¨ªdo.
P. ?Qu¨¦ es Kak¨¢?
R. Aqu¨ª empez¨® como media punta por detr¨¢s de dos atacantes, en un esquema de rombo. Ahora pienso que ¨¦l puede rendir m¨¢s detr¨¢s de un punta. Sabe desmarcarse muy bien y es bueno para llegar a posiciones de tiro. Es poco eficaz sin bal¨®n y es un error hacerlo correr hacia atr¨¢s. En este sentido, el Madrid est¨¢ condicionado por Ra¨²l. Porque el equipo ideal del Madrid ser¨ªa con Benzema en punta, Kak¨¢ por detr¨¢s, Ronaldo a la izquierda y un centrocampista que ayude por la derecha... Robben no le habr¨ªa venido mal ah¨ª... y en el medio yo pondr¨ªa a Guti y Lass... en un 4-2-3-1. En ese esquema necesitas velocidad, y Robben te la daba. Hoy en el f¨²tbol es fundamental tener gente r¨¢pida y no siempre pidiendo el bal¨®n al pie. Con Robben o con Rib¨¦ry obligar¨ªas al equipo contrario a replegarse. Los extremos te brindan espacio en el medio para poder dominar. Con esos jugadores Kak¨¢ aprovechar¨ªa mejor los espacios. Si juega Ra¨²l est¨¢ claro que Kak¨¢ debe sacrificarse m¨¢s. Esto es un lastre para el equilibrio. Pero Ra¨²l es el capit¨¢n y dejarlo fuera debe suponer un problema. ?No?
P. ?No le gusta Alonso?
R. Es un buen jugador pero responde al mismo perfil que Gago, Granero, Lass y Diarr¨¤. Juegan en el mismo plano. El ¨²nico medio que rompe la l¨ªnea es Guti. La plantilla no est¨¢ muy bien construida. Le faltan cosas para ser un superequipo... Necesitan un volante creativo. Atr¨¢s, los centrales son buenos. Pero los laterales... Veo todos los partidos del Madrid y Ramos es un punto d¨¦bil. No tiene nadie por delante que lo ayude, y ni defiende ni ataca. Como central me gustaba m¨¢s. ?Van a echar a Pellegrini?
P. Es posible.
R. Echaron a Capello, a Schuster, a Del Bosque... Y siguen igual. A lo mejor el problema est¨¢ en el propio club.
Guti sigue castigado
El Madrid parte hoy hacia Mil¨¢n con una numerosa expedici¨®n compuesta por 20 jugadores convocados. S¨®lo hay dos jugadores sanos descartados por el entrenador, Manuel Pellegrini. Uno es el central Metzelder. El otro es Guti, el segundo capit¨¢n, que paga por su mala conducta en el campo del Alcorc¨®n, coincidiendo con el 4-0 recibido en la Copa. Guti agredi¨® al p¨²blico con gestos violentos y desafi¨® a la autoridad del t¨¦cnico.
Hace unos d¨ªas, desde la directiva del Madrid se insinu¨® que el cargo de Pellegrini depender¨ªa del resultado que obtenga contra el Milan el martes. Ayer, en una entrevista a la RAI, Florentino P¨¦rez, el presidente, declar¨® lo contrario: "Estamos contentos con Pellegrini y estamos convencidos de que terminar¨¢ la temporada positivamente".
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