"Los marineros est¨¢n al l¨ªmite f¨ªsica y an¨ªmicamente. Ya no pueden m¨¢s"
Los secuestradores intimidan con ametralladoras a la tripulaci¨®n del atunero
El relato del cautiverio que los marineros del Alakrana han podido ir comunicando a sus familiares en estos 36 d¨ªas de secuestro es estremecedor. Hoy la situaci¨®n en el barco es casi "insostenible", afirman. La tripulaci¨®n est¨¢ "al l¨ªmite: f¨ªsica y an¨ªmicamente. No pueden m¨¢s", concluyen.
Al principio, los piratas permitieron a sus rehenes comunicarse con sus familiares casi a diario para decirles que estaban bien. El precedente del Playa de Bakio, liberado a la semana de su secuestro, hac¨ªa pensar, dentro del susto, que todo se resolver¨ªa pronto. Pero las cosas empezaron a torcerse, y los piratas, pertenecientes al mismo grupo que el pasado mayo secuestr¨® a un mercante alem¨¢n, pusieron en marcha una calculada estrategia consistente en generar m¨¢s tensi¨®n, en la convicci¨®n de que esa angustia favorece sus intereses.
Apenas tienen ya agua potable y los v¨ªveres tambi¨¦n escasean
Sus familiares afirman que les han quitado medicinas que necesitan
Tambi¨¦n en el caso del buque alem¨¢n los piratas bajaron a tierra a parte de sus rehenes y tampoco les import¨® entonces que el agua y la comida se agotaran a bordo. Ayer, esa estrategia lleg¨® al punto m¨¢ximo de tensi¨®n con un ultim¨¢tum y una amenaza de muerte: o Espa?a libera a sus dos secuaces, o ellos empezar¨¢n a matar de tres en tres a sus rehenes.
La pasada madrugada, los piratas somal¨ªes obligaron a los tripulantes a tumbarse en la proa y, ante su mirada, lanzaron varios disparos intimidatorios al aire y dos granadas al mar. La tripulaci¨®n lo interpret¨® como una se?al de aviso a la fragata del Ministerio de Defensa que vigilaba el Alakrana a una distancia que le permit¨ªa tenerles controlados sin ser vistos.
Fue una exhibici¨®n de fuerza por parte de los secuestradores, dispuestos a presionar al m¨¢ximo a sus rehenes. Llevan toda la semana sin apenas agua potable y los v¨ªveres comienzan tambi¨¦n a escasear. El cautiverio dura ya m¨¢s de un mes y al barco han subido m¨¢s piratas que ni siquiera permiten poner en marcha la planta potabilizadora del barco.
Los piratas, armados con ametralladoras, mantienen a sus rehenes aislados en el comedor. Ayer eran 30. ?nicamente el capit¨¢n y el patr¨®n permanecen todo el d¨ªa sentados en la cubierta, en cuyo suelo, al raso, duermen por las noches. El resto del d¨ªa lo pasan sentados en una silla.
Los secuestradores no permiten a los marineros acceder a sus camarotes o utilizar las duchas. Incluso encuentran dificultad para acudir al servicio. Tienen que "pedir permiso" y "no siempre" se les concede. Tampoco se pueden cambiar de ropa. Todas sus pertenencias (dinero, pel¨ªculas, tel¨¦fonos m¨®viles, libros, ordenadores...) se las han robado los asaltantes. Tambi¨¦n les han arrebatado objetos sentimentales, como cadenas o anillos de boda. Y las medicinas que algunos de ellos necesitan. "Cualquier cosa parece que sirve si tiene valor". "Se han quedado sin nada", han relatado familiares suyos.
Los piratas, adem¨¢s, est¨¢n descontrolados. Deambulan por la cubierta bajo los efectos de una droga llamada kat, que les pone agresivos, y ya se han peleado varias veces entre ellos.
Est¨¢n cada vez m¨¢s nerviosos y la tripulaci¨®n apresada tambi¨¦n. Lo han notado en sus voces sus familiares, que llevaban varios d¨ªas sin escucharles y ayer pudieron hacerlo porque los piratas quer¨ªan difundir su ultim¨¢tum.
El secretario general del mar, Juan Carlos Mart¨ªn Fragueiro, ha sido el encargado de transmitir a las familias la informaci¨®n sobre el estado de la tripulaci¨®n, aunque ayer Silvia Alb¨¦s, esposa de Pablo Costas, de 33 a?os, se quejaba: "A Fragueiro lo llam¨¦ yo por la ma?ana, despu¨¦s de que me llamara a m¨ª mi marido para decirme que los piratas se hab¨ªan llevado a tres marineros a tierra. Y me dijo que estaba en un gabinete de crisis y que luego me llamaba. Sigo esperando", afirm¨® al cierre de esta edici¨®n.
Los familiares de los secuestrados han convocado una nueva manifestaci¨®n este s¨¢bado en Vigo. El lema ser¨¢ de nuevo: "Liberade aos nosos mari?eiros" (liberad a nuestros marineros).
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