El extra?o caso de Cobo

Las esquivas relaciones entre la presidenta de la Comunidad y el alcalde de la Villa est¨¢n siendo desde hace tiempo la comidilla de los medios de comunicaci¨®n y del p¨²blico en general. Pero es que ahora parecen una novela negra, complicada con tramas corruptas, esp¨ªas, cajas de ahorro, el extra?o caso del vicealcalde Cobo... A todo ello se a?ade el cacao interno de los populares liderados por el enigm¨¢tico y perplejo se?or Rajoy, el avispero en que se ha convertido la calle de G¨¦nova... En la foto de portada de ayer en este peri¨®dico, tanto la presidenta como el alcalde parecen asistir a un funeral. No es extra?o, porque en el PP hay flotando un n¨²mero incierto de cad¨¢veres pol¨ªticos, zombies en vida.

En cuanto al extra?o caso del vicealcalde Cobo, la cosa parece un jerogl¨ªfico que no deja de tener su gracia. En primer lugar, muchos de sus compa?eros populares del Ayuntamiento corroboran y apoyan las frases de Cobo. El PP le ha suspendido de militancia, pero ¨¦l sigue de vicealcalde porque as¨ª lo quiere el regidor, lo cual implica una seria advertencia de Gallard¨®n a G¨¦nova.

Cobo, en principio, deber¨ªa incorporarse al grupo mixto. Pero permanece en su relevante cargo. Seguro que hay por ah¨ª alguna normativa, o se la inventan, que permite que todo siga igual. El se?or Cobo tiene algo de Galileo Galilei (que muri¨® tal d¨ªa como hoy en 1642): el Vaticano le condena a cadena perpetua (luego atenuada con arresto domiciliario) por decir que la Tierra gira alrededor del Sol. A Cobo le condenan por decir que Esperanza gira sobre la nebulosa de su partido. El Vaticano tard¨® varios siglos en reconocer su injusticia con Galileo, que estaba en lo cierto. ?Cu¨¢nto tardar¨¢ G¨¦nova en reconocer su error y tomar nota? Todo parece indicar que Cobo est¨¢ en lo cierto tambi¨¦n.