Nicaragua se hunde en la miseria

Esta tarde sofocante de noviembre nadie habla de la crisis pol¨ªtica en el autob¨²s. Montarse en la ruta 114, que hace el trayecto entre la zona industrial de Managua, la sombr¨ªa capital de Nicaragua, y el incierto centro de la ciudad, es hacer un viaje surrealista. Desde las ventanas del desvencijado veh¨ªculo se ven los carteles de un sonriente Daniel Ortega que cantan el fin de la pobreza, mientras esa misma miseria entra por la puerta del autob¨²s.

En una de las paradas, una mujer morena y bajita sube con la manga de su blusa levantada hasta el hombro para mostrar una pelota de carne que le deforma el brazo. "Tengo un tumor", dice, "y necesito operarlo". La mujer cuenta a los pasajeros sus penas: est¨¢ en paro, no tiene el apoyo de nadie y si no se opera teme perder el brazo. "Denme una ayudita, por favor", pide. Los pasajeros sacan las monedas: un c¨®rdoba por persona. En Nicaragua, con un c¨®rdoba se compra un chicle.

Ocho de cada diez nicarag¨¹enses viven con apenas dos d¨®lares al d¨ªa

El presidente usa de manera discrecional la ayuda econ¨®mica enviada por Ch¨¢vez

A casi tres a?os de haber asumido el poder, las promesas del presidente Ortega de hacer un pa¨ªs m¨¢s justo se desvanecen en la cotidianidad. El 79% de la poblaci¨®n de Nicaragua vive con dos d¨®lares (1,35 euros) al d¨ªa. A la pobreza se suma la incertidumbre pol¨ªtica iniciada hace ya un a?o, tras la crisis desatada por las denuncias de fraude en las elecciones municipales del 9 de noviembre de 2008, que dieron al gobernante Frente Sandinista de Liberaci¨®n Nacional 105 alcald¨ªas de las 146 en disputa. Ortega, adem¨¢s, ha usado su influencia en la Corte Suprema de Justicia para que los jueces emitieran una sentencia que le da la oportunidad de ser reelegido en 2011, pasando por encima de la Constituci¨®n.

Tras la crisis desatada por las denuncias de fraude, el pa¨ªs sufri¨® la retirada de parte de la ayuda internacional, el gran motor, junto a las remesas de los emigrantes, de su escu¨¢lida econom¨ªa. Varios pa¨ªses europeos congelaron una donaci¨®n de 97 millones de d¨®lares que entregaban directamente al presupuesto, condicionada al respeto de los derechos humanos y la democracia.

"Estamos preocupados por la situaci¨®n de la democracia y la gobernabilidad. El di¨¢logo con el Gobierno sigue, aunque no ha dado los frutos esperados (...). Pero no puede seguir indefinidamente", dice una fuente diplom¨¢tica.

Ortega decidi¨® reformar el presupuesto reduciendo las partidas destinadas a salud y educaci¨®n. Pero en Nicaragua, el techo de las escuelas se derrumba a veces sobre los estudiantes, como ocurri¨® en septiembre en el colegio Camilo Zapata de Managua, dejando a cuatro ni?os heridos.

La crisis econ¨®mica internacional tambi¨¦n juega en contra de Nicaragua. Los datos del Centro de Tr¨¢mites de las Exportaciones precisan que las exportaciones cayeron un 11% en los primeros cinco meses del a?o, y que la inversi¨®n externa registraba una ca¨ªda del 9% hasta junio. Las remesas de los emigrantes sufr¨ªan entonces una baja del 5%.

"Nicaragua es un pa¨ªs con su credibilidad deteriorada. Ortega no ha salido de la cueva de los ochenta, cuando s¨®lo hab¨ªa caos. Nicaragua es un pa¨ªs con un Estado de derecho suplantado por el amiguismo", explica el catedr¨¢tico Orlando L¨®pez.

El Gobierno impulsa una reforma tributaria para aumentar la recaudaci¨®n. Pero el proyecto se ha topado con el rechazo general, ya que sube los impuestos a las pulper¨ªas (tiendas de barrio) y grava las cuentas de ahorro, las pensiones de los jubilados y las remesas externas. Muchos de los problemas podr¨ªan solucionarse con la ayuda que otorga a Ortega el presidente de Venezuela, Hugo Ch¨¢vez, que en 2008 ascendi¨® a 457 millones de d¨®lares. Un presupuesto paralelo que representa un tercio del declarado por el Estado. Pero la ayuda venezolana es usada de manera discrecional por Ortega. El presidente ha comprado dos helic¨®pteros MI-17 de fabricaci¨®n rusa a un precio que oscila entre los tres millones y los cinco millones de d¨®lares por unidad. Varios medios de comunicaci¨®n nicarag¨¹enses aseguran que las aeronaves son para uso del presidente y su familia.

"Ortega es el prototipo del nuevo autoritarismo latinoamericano: clientelar frente a los sectores populares, cooptador frente a los sectores empresariales, y heterodoxo en las formas de represi¨®n. Ya no se usan ej¨¦rcitos, sino turbas paramilitares, la coerci¨®n fiscal, el acoso administrativo, el chantaje judicial", reconoce Edmundo Jarqu¨ªn, l¨ªder del disidente Movimiento Renovador Sandinista.