Se vende aldea

"Se vende aldea". As¨ª se anuncian en Internet pueblos deshabitados que quedaron en desuso para sus habitantes, aqu¨¦llos que, con el ¨¦xodo rural de los a?os 60, acabaron por abandonar definitivamente sus hogares y marcharse a la ciudad. La provincia de Lugo es la que m¨¢s ha acusado esta escapada, con m¨¢s de 600 aldeas despobladas, cifra que va en aumento con el paso de los a?os y que la sit¨²a a la cabeza de Galicia.

Ignacio Le¨®n, que trabaja en la web www.aldeasabandonadas.blogspot.com, es una de las personas que han encontrado un nicho de mercado con los pueblos abandonados. Su negocio se basa en actuar de intermediario entre vendedores y comprador. "Conocemos la demanda que existe e intentamos ahorrar al comprador el papeleo y el tiempo que lleva encontrar a los propietarios, que en muchos casos no saben que tienen una casita en la aldea", afirma Le¨®n. Este problema es con el que la mayor¨ªa de la gente se encuentra a la hora de hacerse con el terreno y las casas: un entramado de herederos y due?os que puede retrasar los tr¨¢mites varios a?os.

Compradores de fuera de Galicia ven m¨¢s interesante este negocio

El precio var¨ªa si las casas tienen acceso a servicios como el agua y la luz

Los precios de compra var¨ªan mucho, dependiendo del n¨²mero de casas, hect¨¢reas de terreno o incluso de si tienen acceso a luz y agua, algo considerado un peque?o lujo en estos espacios. Seg¨²n Le¨®n, "lo m¨¢s habitual es que ronden los 80.000 euros", aunque en su web las hay que ascienden a 360.000.

Pero la inversi¨®n no se queda s¨®lo en la compra del terreno y casas. La mayor parte de las aldeas necesita una transformaci¨®n que eleva la suma unos 600 o 700 euros por metro cuadrado de vivienda. Es el caso de Jos¨¦ Mar¨ªa Gal¨¢n, un empresario riojano que tuvo que invertir en el proyecto alrededor de seis millones de euros. Justo cuando estaba a punto de jubilarse, lo dej¨® literalmente todo para venir a Galicia y cumplir un sue?o: convertir el pueblo en su modo de vida, un complejo hotelero de 14 casas restauradas. El cambio de vida supuso la venta de sus f¨¢bricas en La Rioja, con las que sufrag¨® todos los gastos. Su mujer, Isabel, fue la primera en decirle que estaba loco por hacer eso. "Pero este lugar, con el r¨ªo que baja, es impresionante, algo que nos hechiz¨®", comenta.

El proyecto en s¨ª es dificultoso y requiere un arduo trabajo de investigaci¨®n. Las casas abandonadas pertenecen la mayor parte de los casos a diferentes vecinos y eso complica mucho las cosas. A Adolfo Fern¨¢ndez, propietario de una aldea en Pontevedra rehabilitada para el ecoturismo, le llev¨® varios a?os acometer el proyecto que decidi¨® emprender con su mujer. En su caso no pudieron empezar con las obras hasta pasados tres a?os porque tuvieron que comprar casa por casa, ir vecino por vecino. "Nos hemos encontrado con casas pertenecientes a 16 herederos. Hay que armarse de paciencia y tener mucha ilusi¨®n en el proyecto", afirma Fern¨¢ndez.

El rural, tanto para el negocio como para la vida en familia, resulta hoy en d¨ªa m¨¢s interesante que nunca, y para ello Galicia es un lugar id¨®neo. Pero no son los gallegos precisamente quienes ven interesante este mundo; es la gente de fuera, de las grandes ciudades sobre todo, la que encuentra un valor atractivo en este negocio. Ignacio Le¨®n asegura que suelen ser "matrimonios j¨®venes y emprendedores particularmente" los que encuentran su lugar de escapada del bullicio y el estr¨¦s de ciudades como Madrid o Barcelona. Ellos mismos buscan un cambio radical en sus vidas y vienen a la comunidad con un proyecto entre manos: restaurar una aldea para convertirla en vivienda particular o en su propia empresa.

Desde las administraciones ni Gal¨¢n ni Fern¨¢ndez recibieron "un duro" como aportaci¨®n a su proyecto. La Conseller¨ªa de Medio Ambiente e Infraestructuras no concede desde septiembre ning¨²n tipo de subvenci¨®n, cuya cuant¨ªa cubr¨ªa el 50% del capital con un m¨¢ximo de 30.000 euros. Hasta febrero, aseguran fuentes de la conseller¨ªa, no se reanudar¨¢n este tipo de subvenciones. A pesar de la escasez de ayudas, el conselleiro Agust¨ªn Hern¨¢ndez considera de gran importancia el apoyo de estas actuaciones, por eso "el nuevo plan de vivienda y la modificaci¨®n de la Lei de Solo supondr¨¢n un gran impulso y una agilizaci¨®n de las gestiones urban¨ªsticas relacionadas con la rehabilitaci¨®n".

Las ayudas p¨²blicas resultan decisivas para que Galicia siga siendo la comunidad con mayor demanda de estos espacios, codiciados principalmente por gente de otras comunidades que buscar refugio en el rural gallego.