El tab¨² es el placer
La educaci¨®n sexual se centra en los riesgos y la reproducci¨®n - Hablar de sexo incomoda a muchos docentes - Faltan formaci¨®n y apoyos
La educaci¨®n sexual es obligatoria sobre el papel. El de la ley org¨¢nica vigente (LOE). Pero no acaba de llegar a los alumnos. Y mucho menos de forma amplia y organizada desde que tienen la edad adecuada para empezar a explicarles tanto lo que le va a pasar a su cuerpo (la menstruaci¨®n, la eyaculaci¨®n...) y los riesgos que pueden correr con el sexo sin una buena informaci¨®n (embarazos no deseados, enfermedades...) como las posibilidades de placer que puede darles solos o acompa?ados. El temario m¨ªnimo de la ESO contempla estas explicaciones pero los expertos que trabajan en estos temas (sex¨®logos, psic¨®logos, m¨¦dicos...) coinciden en que, en la mayor¨ªa de los casos, esta educaci¨®n se liquida en unas cuantas charlas, por lo general, a los 15 a?os, y que son pocos los profesores que hablan de ello en las materias en las que deber¨ªa ense?arse.
Es m¨¢s f¨¢cil explicar la reproducci¨®n y los riesgos, pero es hablar en negativo
Los chavales se quedan con muchos interrogantes sin responder
Ense?ar a tener una er¨®tica satisfactoria no implica decir lo que se debe hacer
La formaci¨®n sexual buena es compatible con cualquier ideolog¨ªa
La ley educativa obliga a impartirla pero no garantiza que se haga
El problema b¨¢sico es la necesidad de dar formaci¨®n a los profesores
Pocas voces se oyen ya en contra de que se imparta educaci¨®n sexual en los colegios -como se hace pr¨¢cticamente en todos los pa¨ªses de nuestro entorno- pero sigue habiendo miedo de algunos padres a este tema. Miedo al adoctrinamiento. Algo de lo que los que s¨ª ense?an estos temas en las aulas huyen. Dicen que se debe explicar a los estudiantes todo lo relacionado con su cuerpo y lo que pueden hacer con ¨¦l, para que luego sean ellos los que escojan. Tambi¨¦n los padres en casa. La informaci¨®n es compatible con todos los valores. A partir de esas explicaciones, los padres pueden comentar a sus hijos sus propios valores, sean los que sean, para que los tengan en cuenta a la hora de tomar sus decisiones.
La iniciativa de hacer hincapi¨¦ en este tema en la nueva ley del aborto -a propuesta sobre todo de ERC e IU/ICV- es vista con buenos ojos por pr¨¢cticamente todos los colectivos. Lo vislumbran como una oportunidad para concienciar m¨¢s sobre la necesidad de impulsar la educaci¨®n sexual y para revisar lo que no est¨¢ funcionando.
Sin embargo, los colectivos que trabajan este tema siguen considerando impreciso el texto, que aprobar¨¢ el Pleno del Congreso la semana pr¨®xima para pasarlo al Senado. La mayor¨ªa pide que se especifiquen las materias y horarios en los que debe ense?arse, los contenidos concretos, la formaci¨®n de los profesores en todos los centros (p¨²blicos, concertados y privados) y que incluya una partida presupuestaria para llevarlo a cabo.
Lo que m¨¢s se explica en los colegios e institutos es todo lo relacionado con los riesgos y la reproducci¨®n, lo cual, l¨®gicamente, tiene su parte positiva, pero tambi¨¦n negativa. El tab¨² se centra en la explicaci¨®n de todo lo que tenga que ver con el placer (la masturbaci¨®n, el coito, el erotismo, los juegos sexuales...). A muchos profesores les incomoda tener que hablar de estos temas, no se sienten preparados o les resulta violento hacerlo a alumnos a los que luego tienen que tratar todo el curso.
La mayor¨ªa de los especialistas propone que estos contenidos se repartan entre diversas materias de forma m¨¢s organizada y obligatoria, con un tiempo espec¨ªfico organizado para ello a lo largo de toda la educaci¨®n y que se proporcione formaci¨®n espec¨ªfica a los docentes de cada centro que se vayan a ocupar de estas ense?anzas.
"Por debajo de los 12 a?os, el papel de los padres es muy importante, pero cuando los hijos entran en la adolescencia, los progenitores pasar a estar en otra posici¨®n y no son la fuente fundamental de informaci¨®n, seg¨²n dicen los estudios, y tambi¨¦n el sentido com¨²n", explica la presidenta de la Federaci¨®n de Planificaci¨®n Familiar, Isabel Serrano. "Por eso, la mayor¨ªa de los padres, que son muy sensatos y conscientes de que sus hijos reciben mucha informaci¨®n insegura, est¨¢n encantados de que haya una interrelaci¨®n en esta educaci¨®n entre las escuelas y las familias".
?En qu¨¦ consiste la educaci¨®n sexual? ?ste es el primer interrogante que plantean muchas familias. No lo saben, porque no lo han preguntado o porque no se les ha explicado. Otros muchos s¨ª lo saben, como explican los expertos que organizan encuentros informativos con padres. Responde Carlos de la Cruz, director de M¨¢ster de Sexolog¨ªa de la Universidad Camilo Jos¨¦ Cela, que lleva adem¨¢s 20 a?os dando charlas de este tema. "Es ense?ar a los alumnos a conocerse, lo que es la reproducci¨®n y el placer; a aceptarse a s¨ª mismos como hombres y mujeres y tambi¨¦n al otro. Pero aprender a tener una er¨®tica satisfactoria no significa que se les diga lo que tienen que hacer. Una cosa es explicar lo que es la masturbaci¨®n o el coito y otra decirles que lo tienen que hacer. A lo que se les ense?a es a tomar sus propias decisiones".
De la Cruz a?ade un interesante apunte: "La educaci¨®n sexual buena es compatible con los centros p¨²blicos, privados cat¨®licos, privados laicos... con cualquier ideolog¨ªa, porque no aporta doctrina sino exclusivamente informaci¨®n. No es s¨®lo explicar lo que se hace entre genitales, es educar para evitar el sexismo, a aprender a expresar las emociones, a relajar el cuerpo...".
"Es obligaci¨®n del Gobierno garantizar que todos los alumnos salgan de la educaci¨®n obligatoria sabiendo estos m¨ªnimos", advierte este especialista. "Habr¨ªa que ver c¨®mo se puede complementar el trabajo de profesionales externos a los centros con el de los profesores y empezar a contar estos temas cuando sea el momento, es absurdo contarles a los 15 a?os lo que es la menstruaci¨®n y la eyaculaci¨®n".
Este profesional da charlas en los colegios e institutos de Legan¨¦s (p¨²blicos, concertados y privados). Las organiza el Ayuntamiento de la localidad, son cuatro sesiones en 6? de primaria y 3? de ESO, tambi¨¦n en numerosos centros cat¨®licos, de acuerdo con la direcci¨®n y las asociaciones de padres.
Pero, cuando se aborda este tema, a menudo, se evitan algunas cuestiones. Por lo general, en muchas escuelas se dan charlas espec¨ªficas generalmente en la ESO, pero no a lo largo de los diferentes cursos, cuando su momento de desarrollo f¨ªsico y emocional lo requiera. Y, a¨²n as¨ª, sigue habiendo un tema tab¨²: el placer. "La mera palabra chirr¨ªa. Todo lo que tenga que ver con ¨¦l se evita en muchos casos. Chirr¨ªa a algunos sectores de la Iglesia cat¨®lica, que considera que esta educaci¨®n compete a la familia, y hablar de ¨¦l sigue removiendo a una parte de la sociedad espa?ola", se?ala Carlos de la Cruz.
Es m¨¢s f¨¢cil para los profesores hablar de reproducci¨®n, embarazos y enfermedades. Lo que sit¨²a la visi¨®n del sexo a los ojos del alumno en un enfoque negativo, de prevenci¨®n, de riesgos, de peligro. Y se olvida de contarles las posibilidades que tiene. Es m¨¢s f¨¢cil hacer una educaci¨®n sexual que intenta evitar riesgos, abusos, embarazos no deseados, comportamientos sexistas..., coinciden los expertos. Pero con esto se da a los chavales la sensaci¨®n de que la sexualidad es un peligro, cuando se les deber¨ªa contar tambi¨¦n que pueden aprender las posibilidades de disfrutar de su sexualidad, se decida luego a hacerlo o no. Entre los temas tab¨² relacionados con el placer los expertos apuntan, por ejemplo, el orgasmo, la masturbaci¨®n, la primera vez, los besos y caricias corporales, los gustos y las fantas¨ªas er¨®ticas... Es m¨¢s sencillo de aceptar para muchas personas un enfoque ¨¦tico o biol¨®gico del tema. Pero, si se limita a eso la educaci¨®n sexual se queda coja, y los chavales crecen con multitud de interrogantes sin responder, al menos fuera del variado universo de Internet, es decir, con rigor y desde la escuela.
Otro aspecto en el que insisten los expertos es, como pasa en toda la educaci¨®n, en la importancia de establecer una comunicaci¨®n fluida con los hijos sobre este tema. De dejarles claro que cuentan con sus padres si quieren preguntar algo, lo que no quiere decir que tengan que contarles sus relaciones, como tampoco lo hacen ¨¦stos. No se trata de eso. "No hace falta decirles la palabra vagina o pene para hablar con ellos de sexo", ilustra De la Cruz, "si adem¨¢s en familia ya se comentan much¨ªsimas cosas que tienen que ver con el deseo sin caer en la cuenta de ello". "Se hace al hablar del tipo de mujer u hombre que les gusta, al manifestar si les gusta una actriz o un modelo que est¨¢n viendo en la televisi¨®n, al comentar sus gustos, por ejemplo, por determinado tipo de mujeres u hombres...".
"Hay que ense?ar al joven a valerse por s¨ª mismo, a conocer su cuerpo y los riesgos. Y no hay que olvidar", advierte Isabel Serrano, "que hay chavales que van a sufrir en ese camino, por problemas con su orientaci¨®n sexual y tambi¨¦n que vivimos en una sociedad con comportamientos sexuales dispares, con inmigrantes procedentes de muchas culturas y con diferentes puntos de vista sobre este tema". Tambi¨¦n est¨¢n los discapacitados. La nueva ley llama a atender la educaci¨®n sexual a este colectivo, otro avance.
"De los pa¨ªses de nuestro entorno, somos de los pocos en los que no hay un marco claro de educaci¨®n sexual que la haga obligatoria para todos los ni?os", opina Isabel Serrano. Y menciona como referencia el informe La educaci¨®n sexual en Europa, realizado por diversos organismos (entre ellos, la OMS) sobre 26 pa¨ªses. "Es necesario que se establezcan unos m¨ªnimos de educaci¨®n sexual para todas las etapas educativas y para toda Espa?a, abrir un proceso de debate para que se pacten -los horarios, el reparto de contenidos por edades y la formaci¨®n que necesitan los educadores- entre todas las comunidades y los sectores implicados", propone la presidenta de la Federaci¨®n de Planificaci¨®n Familiar.
Lo cierto es que la educaci¨®n sexual est¨¢ contemplada ya como obligatoria en la LOE, como recuerda la portavoz de Educaci¨®n del PSOE en el Congreso y responsable de Educaci¨®n en la Ejecutiva socialista, C¨¢ndida Mart¨ªnez. Sin embargo, esta portavoz dice que "otra cosa es que sea importante que con la nueva ley del aborto aparezca reforzada toda la educaci¨®n sexual y afectiva. Es un acierto". "Adem¨¢s, que aparezca en el texto pactado con diversos grupos es un avance para que se reconozca la relevancia que debemos darle a estas cuestiones. Es evidente que no hay mejor prevenci¨®n que la educaci¨®n. Y quiz¨¢s a partir de aqu¨ª se podr¨ªa hacer un seguimiento serio de c¨®mo se est¨¢n impartiendo estos contenidos, c¨®mo est¨¢n llegando a los alumnos, respetando la libertad de las competencias educativas de todos".
De acuerdo con la letra de la ley, se deber¨ªa ense?ar, por un lado, de forma transversal (es decir, metida en contenidos que tengan que ver con estos temas como los de Conocimiento del Medio, Biolog¨ªa o Educaci¨®n F¨ªsica) y, por otro, en forma de temas espec¨ªficos en el real decreto que regula las ense?anzas m¨ªnimas de primaria y, de una forma m¨¢s concreta en el de la ESO.
Pero esto es sobre el papel de la ley. En la pr¨¢ctica, la mayor¨ªa de los profesionales que trabajan temas de educaci¨®n sexual dicen que no acaba de funcionar este sistema.
"La parte buena de la noticia de que se vaya a incluir en la nueva ley del aborto es que a trav¨¦s de la prevenci¨®n de riesgos se puede lograr ya de una vez que se comprenda la importancia de la educaci¨®n sexual. La parte mala es que est¨¦ focalizada en la prevenci¨®n", se?ala uno de los principales expertos en este tipo de educaci¨®n, el catedr¨¢tico de Psicolog¨ªa de la Sexualidad en la Universidad de Salamanca, F¨¦lix L¨®pez.
"Es obligatorio impartirla pero no se hace. La ley obliga a hacerlo pero no garantiza que se haga. El problema b¨¢sico es que hay que dar formaci¨®n a los profesores de los centros, a algunos, no necesariamente a todos y liberarles algunas horas de clase para que se hagan cargo de estas ense?anzas en su centro o de coordinarlas". Este catedr¨¢tico tambi¨¦n opina que como asignatura transversal no ha funcionado. Y pone el ejemplo de Canad¨¢. "All¨ª tienen un ¨¢rea de bienestar y calidad de vida, al que le dedican una hora semanal. Es s¨®lo una muestra de lo que se puede hacer y de lo que hacen otros pa¨ªses. Y en Espa?a la ley deber¨ªa incluir, aparte de un plan de formaci¨®n para educadores, recursos econ¨®micos para llevar todo esto a cabo".
F¨¦lix L¨®pez dice que lo m¨¢s viable hoy por hoy ser¨ªa que se repartieran los contenidos entre un tiempo de tutor¨ªa (sobre el desarrollo de la persona y el afecto, por ejemplo), las asignaturas de ?tica y Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa (los valores, las relaciones...) y la de Biolog¨ªa (la anatom¨ªa y fisiolog¨ªa...).
"Todo el mundo reconoce que el actual sistema ha sido un fracaso, la transversalidad no est¨¢ funcionando. Y esta educaci¨®n no se puede dejar s¨®lo, como se hace en la pr¨¢ctica, en unas charlas sobre embarazo, m¨¦todos anticonceptivos, sida, el uso de los tampones o la higiene genital... esto es s¨®lo una peque?¨ªsima parte", insiste Isabel Serrano.
"Hay que involucrar a toda la comunidad escolar (padres, profesores y j¨®venes) en este tema para que sea una realidad". A la presidenta de la Federaci¨®n de Planificaci¨®n Familiar, que es ginec¨®loga y tiene mucha experiencia en el trabajo con j¨®venes, le parece "estupendo" que la nueva ley del aborto haga hincapi¨¦ en este tema. Y critica a los que se oponen a que se ense?e en los colegios: "Es absurdo pensar que la gente puede llegar a tener una sexualidad saludable y que se vaya a lograr reducir las tasas de aborto sin tomarnos en serio la educaci¨®n sexual". "Hay sectores obsesionados con el sexo", se?ala, "que han hecho un baluarte ideol¨®gico de este puritanismo, que les lleva a oponerse a que se ense?e en los colegios. Aunque son colectivos peque?os, a¨²n hay gente que cree que con esta educaci¨®n se va a promover que sus hijos tengan relaciones sexuales sin querer. Hay mucha informaci¨®n, pero no educaci¨®n. Y pensar que los padres se pueden manejar solos en esto es un error".
Esta experta resume los tres objetivos b¨¢sicos que habr¨ªa que lograr: "Dar informaci¨®n segura (bien distinguida de la lluvia que les llega a los j¨®venes por todas partes), ayudarles a desarrollar habilidades para incorporar la sexualidad como un elemento de su vida y fomentar actitudes positivas y valores relacionados con la sexualidad, basados en el respeto y en que la toma de decisiones corresponde a cada persona". Tambi¨¦n cree que es fundamental lograr un mayor apoyo al profesorado.
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