Carteras defensivas
Los inversores se enfrentan a un a?o 2010 repleto de enigmas y recovecos. El primer jerogl¨ªfico es si la econom¨ªa espa?ola entrar¨¢ o no por la senda de la recuperaci¨®n, como se dec¨ªa puerilmente en la d¨¦cada de los ochenta. La cuesti¨®n es pol¨¦mica, porque el Gobierno se dispone a declarar el fin de la recesi¨®n en cuanto aparezca el primer crecimiento intertrimestral, mientras que los economistas m¨¢s prudentes prefieren certificar el fin de la crisis cuando el mercado laboral empiece a generar empleo. La probabilidad de una recuperaci¨®n en 2010 se debilita a causa del cambio dr¨¢stico, que ya est¨¢ en marcha, de la pol¨ªtica monetaria y crediticia del BCE. Los tiempos est¨¢n cambiando. Si en 2008 y 2009 la crisis financiera y la recesi¨®n se combatieron con pol¨ªticas pr¨¢cticamente ilimitadas de est¨ªmulo mediante inversi¨®n y abundante liquidez, ahora los bancos centrales se disponen a exigir control presupuestario y m¨¢s rigor monetario. El Banco Central Europeo (BCE) cerr¨® la semana pasada las subastas extraordinarias a doce meses y har¨¢ lo mismo con las subastas a seis meses la pr¨®xima primavera. Est¨¢ por ver c¨®mo reaccionar¨¢n las instituciones financieras cuando ya no dispongan de ese dinero que tomaban al 1% del BCE y colocaban al 3% en deuda del Tesoro.
El endurecimiento monetario llega en mal momento. Los bancos y cajas siguen sin recuperar el flujo de cr¨¦dito necesario para sostener financieramente a las empresas solventes, las empresas tendr¨¢n que recurrir al mercado de capitales para compensar la escasez crediticia y, adem¨¢s, los gobiernos tendr¨¢n que seguir emitiendo deuda para financiar el d¨¦ficit desbordado por la recesi¨®n mundial. ?ste es el fondo general sobre el que los inversores deben dibujar sus arabescos. En los primeros an¨¢lisis, la renta variable aparece como dependiente en exceso de la recuperaci¨®n econ¨®mica y tambi¨¦n de las decisiones que tomen los bancos centrales; las cotizaciones de las entidades financieras sufrir¨¢n probablemente las consecuencias del cambio de pol¨ªtica del BCE. Ya que en las ¨²ltimas semanas se ha discutido mucho sobre el adelanto de los dividendos y de las presiones de los inversores para obtener retribuci¨®n (caso de Sacyr en Repsol), no resulta disparatado considerar que el a?o pr¨®ximo alg¨²n banco puede dejar de pagar dividendos para reforzar su capitalizaci¨®n. Sobre todo en Espa?a, donde la consolidaci¨®n financiera lleva un retraso que empieza a ser preocupante.
En consecuencia, debido a la importancia del sector financiero en la Bolsa, lo que se prev¨¦ para 2010 es volatilidad. Dicho de otra forma, quien quiera obtener rentabilidades superiores a las de la renta fija deber¨¢ aceptar un cierto riesgo. El dominio de las rentabilidades por encima del 3% estar¨¢ dominado por los bonos de empresas a largo plazo, los bonos convertibles o los bonos de los pa¨ªses emergentes. En resumen, en las pasarelas financieras, lo que se llevar¨¢ ser¨¢n las carteras defensivas; y en pol¨ªtica econ¨®mica, los esfuerzos fiscales y de reducci¨®n del gasto para reducir la deuda causada por la crisis financiera y la recesi¨®n. Las agencias de calificaci¨®n, tan laxas antes del crash y tan estrictas ahora, han lanzado las primeras advertencias. Si vale el s¨ªmil m¨¦dico, 2010 ser¨¢ un a?o de convalecencia. -
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