Rouco Varela defiende su modelo de familia sin atacar al Gobierno

El arzobispo de Madrid, Antonio Mar¨ªa Rouco Varela, ve un panorama "oscuro y desolador" para la familia cristiana por tres ataques estatales a la instituci¨®n: el divorcio, el aborto y el matrimonio homosexual. Es el mantra que repite, a?o tras a?o, desde hace tres en la misa por la familia. Lo hizo tambi¨¦n ayer. Eso s¨ª, ante una audiencia menos numerosa y con un discurso mucho menos beligerante en el que ni siquiera lleg¨® a mencionar al Gobierno. Seg¨²n c¨¢lculos de este peri¨®dico, 100.000 personas se han descolgado de la convocatoria desde 2007 hasta ayer, cuando los obispos reunieron a 56.000 fieles que cerraron filas en defensa de la familia cat¨®lica. El Arzobispado de Madrid cifr¨® el n¨²mero de asistentes en cientos de miles, pero no quiso aventurarse a dar una cifra concreta.

La manifestaci¨®n contra el aborto en octubre congreg¨® a 250.000 personas

"Europa sin vosotros se quedar¨ªa casi sin hijos", dijo el arzobispo de Madrid

Los mayores aplausos se los llev¨® el presidente de los neocatecumenales

El papa Benedicto XVI ley¨® un mensaje durante la eucarist¨ªa

La movilizaci¨®n no alcanza ni de lejos a los alrededor de 265.000 que, con el mismo c¨¢lculo, tas¨® este peri¨®dico en la manifestaci¨®n del pasado octubre contra el aborto en Madrid. O las 158.000 de la misa por la familia de hace dos a?os (entonces la organizaci¨®n s¨ª se atrevi¨® a dar cifras, y calcul¨® en dos millones los asistentes).

Ni el lema de este a?o, El futuro de Europa pasa por la familia, ni la tensi¨®n de la Iglesia cat¨®lica contra el Gobierno por la nueva ley del aborto animaron la asistencia. Ese matiz europe¨ªsta, que se notaba en el pu?ado de banderas que ondeaba en el Paseo de la Castellana, frente al gran altar blanco y rojo desplegado por el arzobispado de Madrid, se vio reforzado por la presencia de una docena de cardenales y obispos extranjeros, aparte de una treintena de espa?oles (hay unos 115 obispos en Espa?a). Y fue el aducido por la organizaci¨®n para justificar que parte de la misa fuera en lat¨ªn, "como aconseja el Papa".

Aunque no sali¨® como se esperaba, la reuni¨®n de ayer es el aperitivo para la Jornada Mundial de la Juventud que se espera que se celebre en Madrid en 2011. Porque los j¨®venes, seg¨²n Rouco Varela, son la esperanza. La homil¨ªa, con menos reproches de los habituales al Ejecutivo -fundamentalmente hacia los avances sociales- estuvo plagada de continuas alabanzas a la familia cristiana. "Europa sin vosotros se quedar¨ªa pr¨¢cticamente sin hijos. El futuro moral y biol¨®gico de Europa pasa por vosotros", dijo Rouco, lanzando as¨ª una idea que comparten muchos de los asistentes a la eucarist¨ªa. Por ejemplo, M¨®nica Torrente, madrile?a de 37 a?os, que acudi¨® por tercera vez a la cita con su marido y sus tres -"casi cuatro"- hijos. "El Gobierno no ayuda nada con las pol¨ªticas que hace, y gestos como ¨¦ste tienen que hacerle ver que hay mucha gente cristiana que valora la familia", explicaba. Torrente, como otros muchos a su alrededor, pertenece al movimiento eclesial Cursillos de Cristiandad. En la cita de ayer, la mayor¨ªa de los asistentes pertenec¨ªa a movimientos eclesi¨¢sticos. Como Danilo Jes¨²s Giglio, un chico romano de 24 a?os miembro del Camino Neocatecumenal, que hab¨ªa llegado desde Italia con un grupo de unas 150 personas para "dejar un testimonio tangible de que la familia cristiana est¨¢ viva". Giglio, con una bandera italiana anudada el cuello y un gorro calado hasta las orejas, aseguraba que en Espa?a la situaci¨®n para las familias est¨¢ "muy mal". "La realidad pol¨ªtica que tiene s¨®lo hace cosas en su contra, como el aborto, la eutanasia o la homosexualidad".

Son palabras similares a las del arzobispo de Madrid. "El panorama" para las familias "no es precisamente halag¨¹e?o", dijo Rouco. Y cit¨® la "facilitaci¨®n jur¨ªdica del divorcio hasta extremos asimilables al repudio" y la "difuminaci¨®n o eliminaci¨®n del matrimonio" concebido como la "uni¨®n de un hombre y una mujer abierta a los hijos". Tambi¨¦n dedic¨® unas palabras a denunciar el aborto. "El derecho a la vida del ni?o, todav¨ªa en el vientre de su madre -del nasciturus-", dijo, "se ve lamentablemente suplantado en la conciencia moral de un sector cada vez m¨¢s importante de la sociedad y en la legislaci¨®n que la acompa?a y la estimula, por un supuesto derecho al aborto en los primeros meses del embarazo". Fue la ¨²nica menci¨®n -muy aplaudida, por cierto- a la nueva ley del aborto que introduce un sistema de plazos.

Aunque la convocatoria empezaba a las 10.00, el ambiente s¨®lo se calde¨® -emocionalmente, ya que los term¨®metros marcaban apenas 4 grados- a partir de las 11.00. Entonces, el director de Camino Neocatecumenal, Kiko Arg¨¹ello, tom¨® la guitarra para entonar una canci¨®n compuesta por ¨¦l a la Virgen Mar¨ªa. Los llamados kikos (en honor a su fundador) fueron de los grupos m¨¢s visibles. Peter, un ingl¨¦s de 18 a?os del sur de Londres, llevaba una sudadera morada con la leyenda Neocatecumenal way. Hab¨ªa venido con un grupo "de unas 30 personas", pero reconoc¨ªa que estaba un poco perdido con la misa porque era en espa?ol.

Otro momento de animaci¨®n, ya pasadas las doce, fue la alocuci¨®n del Papa, que salud¨® a los asistentes al encuentro europeo desde la plaza de San Pedro, en Roma. Benedicto XVI insisti¨® en la idea de que la familia es la formada por "un hombre y una mujer", una instituci¨®n que considera "la mejor escuela". El fr¨ªo apretaba, y algunos se fueron cuando acab¨® de hablar el Pont¨ªfice.

No todos los asistentes atend¨ªan a la homil¨ªa. Un sacerdote de la di¨®cesis de Madrid tuvo dificultades para llegar al altar porque varias personas le pararon para pedirle confesi¨®n. C¨¦sar Oporto estaba a otra cosa. El chico, de 23 a?os, es miembro de Comuni¨®n y Liberaci¨®n. Pero ayer estaba en el servicio de seguridad, cortando el paso a quienes se quer¨ªan acercar a los camellos que iban a llevar m¨¢s tarde a los Reyes Magos.