Historia del librero Luque
Reabre la librer¨ªa se?era de C¨®rdoba, que reedita su gu¨ªa art¨ªstica de 1929
El apellido Luque, bastante com¨²n en C¨®rdoba, tiene en esta ciudad un nombre propio particular: "Librer¨ªa". Abierta en 1919, esta tienda de cultura se convirti¨® durante a?os en uno de los escasos referentes divulgadores de arte y literatura en la capital. Y todo gracias a su fundador, Rogelio Luque, librepensador, naturista y esperantista, nacido en Priego de C¨®rdoba en 1897 y asesinado durante los primeros d¨ªas del terror de Bruno Ib¨¢?ez Mor¨ªn, Don Bruno, el comandante de la Guardia Civil que dirigi¨® la feroz represi¨®n franquista en la ciudad a principios de la Guerra Civil.
Seg¨²n pudo leerse en un peri¨®dico local de agosto del 36, su detenci¨®n se produjo por vender literatura marxista. Con su fusilamiento, se puso fin a una carrera marcada por una constante inquietud intelectual con vocaci¨®n de comunicador.
Librepensador y esperantista, Rogelio Luque fue fusilado en agosto de 1936
Y es que Rogelio Luque no s¨®lo fue librero, sino tambi¨¦n editor e impresor de m¨²ltiples revistas y publicaciones. Esta semana se ha presentado en C¨®rdoba una edici¨®n facs¨ªmil de una de las obras impulsadas por Luque. Se trata de la Gu¨ªa art¨ªstica de C¨®rdoba, escrita en 1929 por el joven profesor de Concepto e Historia de las Artes Vicente Orti Belmonte. La obra -que se conoce como la gu¨ªa tur¨ªstica de Luque-, vio la luz en espa?ol, ingl¨¦s y franc¨¦s, y cuenta con 40 fotograbados de la ¨¦poca. El libro, como explica Francisco Solano en la introducci¨®n de la reedici¨®n, se public¨® con "olfato comercial el a?o de la Exposici¨®n Iberoamericana de Sevilla, que atrajo sin duda a C¨®rdoba a muchos visitantes". El conjunto supone, a¨²n hoy, una fant¨¢stica ventana para asomarse al pasado de algunos de los rincones m¨¢s t¨ªpicos de la ciudad, como la Puerta de Almod¨®var, el Puente Romano o la Torre de la Malmuerta.
A lo largo de sus 17 a?os de librero e impresor, Rogelio Luque edit¨® y colabor¨® en numerosas revistas culturales, como Popular, La Pluma, Biblis y Quijote. Aunque muchas de estas publicaciones se han perdido, Antonio Luque, hijo del librero, guarda todav¨ªa algunas de ellas, as¨ª como Rogelio Luque (nieto). En estas ediciones, su abuelo colaboraba con algunos de sus amigos de la intelectualidad cordobesa. "?ntimos suyos fueron, por ejemplo, Enrique Moreno El Fen¨®meno, escultor que le dedic¨® un busto de piedra -cuya reproducci¨®n en bronce se ha expuesto siempre en la librer¨ªa-. Tristemente, El Fen¨®meno tambi¨¦n termin¨® fusilado en los mismos d¨ªas en los que mataron a Rogelio. Otros amigos del impresor fueron el artista ?ngel L¨®pez-Obrero o el arquitecto Francisco A. Izquierdo, que dise?¨® la casa que Rogelio Luque decidi¨® construir en la sierra de C¨®rdoba", recuerda Antonio Luque.
La nueva reedici¨®n de la gu¨ªa coincide con otro renacimiento. El de la propia Librer¨ªa Luque, el pasado 30 de noviembre. En julio, la tienda de la calle Cruz Conde puso el punto final a nueve d¨¦cadas de puertas casi ininterrumpidamente abiertas. El cierre se un¨ªa al de otras librer¨ªas que han ido bajando las persianas en los ¨²ltimos a?os, como Anaquel, en la plaza de la Compa?¨ªa. Pero hace un mes, Javier, nieto de Rogelio e hijo de Antonio Luque (quien tambi¨¦n trabaj¨® durante a?os en el negocio familiar) decidi¨® retomar las riendas y abrir una nueva Librer¨ªa Luque en la calle Jes¨²s Mar¨ªa, una nueva sede, que supone una etapa y mudanza m¨¢s de los libreros.
No es la primera vez que la firma renace. Tas el asesinato de Rogelio Luque y el fin de la guerra, su viuda, Pilar Sarasola, volvi¨® a abrir el establecimiento de la c¨¦ntrica calle Gondomar. La tienda ya hab¨ªa sufrido varios traslados con anterioridad.
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